Review AMD Ryzen 7 2700

No es el procesador más potente de la gama de AMD, y tampoco el más caro, pero es el que mejor combinar la arquitectura de muchos núcleos e hilos de procesador de la arquitectura Zen+ de AMD con un consumo más controlado que permite menos consumo, más eficiencia, manteniendo niveles de rendimiento muy elevados y, lo más importante, una configuración de ocho núcleos reales con dieciséis hilos de proceso.

 

Tampoco es una novedad porque AMD ya disponía en la generación anterior de otro modelo de 16 hilos de proceso con un TDP de 65w, el Ryzen 7 1700, pero también es una evolución perfeccionada de este gran procesador que hemos tenido la suerte de verlo montado en algún portátil que redefine el concepto de estación de trabajo móvil.

Esta nueva generación mejora de forma notable el soporte de memorias de alta velocidad, reduce las latencias y su nuevo proceso de fabricación también los hace aún más eficientes pudiendo mejorar el rendimiento del Ryzen 7 1700 con un nuevo modelo Ryzen 7 2700 más rápido, pero con el mismo consumo.

El primer cambio importante, incluso para ser una fase de actualización, lo encontramos en la reducción del proceso de fabricación. Estos nuevos procesadores disfrutan de un proceso FinFET tridimensional de 12nm, una mejora importante sobre los 14nm, que permite a AMD aumentar la eficiencia o aumentar la frecuencia de trabajo, y el overclocking, en estos nuevos procesadores.

AMD ha optimizado la unidad de control de memoria DDR4 integrada en este procesador para lograr, en combinación con los nuevos chipsets, menores latencias en memorias de alta velocidad preparadas para ello y también menores latencias en sus tres niveles de cache con hasta un 34% de mejora en su cache de segundo nivel y un 16% en su cache de tercer nivel, la que comparten todos los núcleos del procesador.

 

La mayor eficiencia también ha permitido a AMD desarrollar su tecnología Precision Boost 2 con mejor sustentación de las frecuencias turbo de los diferentes procesadores de la nueva gama. Frecuencias que también son más elevadas que en los modelos de la generación anterior.

AMD mantiene integración del IHS (Integrated Heat Spreader) mediante soldadura, solo dejando la gama más baja de sus APU con contacto por pasta térmica. Es algo que los overclockers agradecen ya que Intel hace tiempo que dejo de escuchar a sus clientes y han hecho oídos sordos a las críticas sobre sus procesadores para overclocking, que montan casi toda pasta térmica. También se mantiene la disponibilidad de multiplicador liberado en toda la gama Ryzen, con mejoras específicas para los modelos X.

AMD también ha añadido mejoras en su aplicación Ryzen Master, con una nueva versión 1.3, y ha introducido nuevos disipadores donde destaca el nuevo Wraith Prism RGB que potencia precisamente la iluminación sin dejar de lado la refrigeración optima de los modelos de gama más alta, como este modelo Ryzen 7 2700.

 

Estos nuevos procesadores serán compatibles con todos los chipsets de socket AM4 disponibles en el mercado, los diferentes fabricantes ya trabajan en las actualizaciones de bios adecuada y AMD mantendrá su programa de préstamos de CPU para poder flashear tu placa base y adaptarla a los nuevos procesadores.

Estas son sus diferentes especificaciones, como veréis en ellas hay diferencias de consumos, núcleos y frecuencias. Me alegra ver que AMD sigue apostando por consumos ajustados de 65w en sus gamas de seis y ocho núcleos, como bien demuestra el modelo que probamos hoy.

Este procesador nos ofrece una configuración masiva de núcleos, los mismos que podemos encontrar en el mejor modelo Ryzen de esta nueva gama, pero con una configuración térmica más agresiva, y ajustada, mediante el uso de frecuencias base y turbo inferiores a los modelos más potentes de la marca, en este caso el Ryzen 7 2700X que es por ahora la única alternativa con más rendimiento a este modelo y que os presentamos ya hace algunas semanas.

 

No tiene nada que envidiar a su hermano mayor y son seguramente el complemento perfecto el uno al otro. Uno busca el rendimiento máximo y el otro mantener la esencia de una gama, pero ajustando sus consumos reduciendo de forma sustancial la necesidad de refrigeración y siendo más adecuado para entornos con menos espacio donde la ventilación es más reducida.

La reducción de consumo es importante, El Ryzen 7 2700 tiene 40w menos de TDP con respecto al 2700X, pero es que además también soporta temperaturas de trabajo más elevadas, que es una de las razones por las que necesita disipadores menos capacitados. Es capaz de trabajar sin throttling a temperaturas de 95 grados lo que le habilita para ser montado en sistemas ultra compactos, como portátiles.

 

 

El procesador gestiona las frecuencias según las capacidades de ventilaciñon, temperatura y uso, y en este modelo se mantiene un magnífico soporte para memorias de alta velocidad y latencias reducidas.

El aumento de tolerancia de temperatura ayuda para rebajar ese TDP requerido, no olvidemos que esta cifra hace referencia a la necesidad de refrigeración y no al consumo real del procesador, pero también lo hace los 500Mhz menos que tiene de frecuencia base el Ryzen 7 2700 frente al Ryzen 7 2700X. Son 3.2GHz frente a los 3.7GHz de su hermano mayor. La frecuencia turbo también se reduce de los 4.3GHz que alcanza el Ryzen 7 2700X a los 4.1GHz que soporta este modelo. También tenemos que tener en cuenta que, a menor refrigeración, menos tiempo podremos mantener las frecuencias turbo.

 

El resto de prestaciones son las mismas, tiene los mismos 20MB de cache, repartidas en tres niveles, la misma configuración de memoria DDR4 de doble canal con soporte para memorias de 2933MHz en adelante, las mismas líneas 20 líneas PCI Express 3.0, de las cuales 16 están dedicadas a graficas e incluye también una revisión RGB de disipador Wraith Prism de AMD.

Otras prestaciones que comparte es la tecnología SenseMI de AMD, así como el nuevo método XBoost Precision 2 que mejora la sustentación de los modos turbo en varios de los núcleos del procesador de forma simultánea. Lo que no dispone este modelo es de la tecnología XFR que permite al procesador sobrepasar sus especificaciones de fábrica si la refrigeración del sistema lo permite. Eso solo está disponible en las variantes X de cada generación.

 

 

El disipador puede conectarse a USB o al puerto RGB de la placa base. Desde ahi podemos gestionar la iluminacion con las capacidadades propias de nuestra placa y de forma completamente sincronizada.

Si el Ryzen 7 2700 tiene niveles más reducidos de consumo es precisamente porque es una versión con menores frecuencias de trabajo que su hermano mayor, cualquier overclocking que hagamos echara por tierra este nivel de consumo y esto es algo que tenemos que tener muy en cuenta. Sin embargo, este procesador tiene una buena capacidad para el overclocking, aunque algo inferior en nuestras pruebas a su hermano mayor.

 

Si no tenemos miedo en que su consumo se eleve hasta los 120w es fácil que podamos usar un multiplicador de 40x y sostener esta frecuencia, de 4GHz estables, con un voltaje moderado de 1.32v. Estaremos doblando el TDP, pero podremos hacerlo incluso con su disipador de serie, que es el que hemos usado nosotros, con un ruido moderado cercano a los 40dBA y un rendimiento muy mejorado sobre el perfil normal del procesador.

 

 

A su frecuencia de fábrica este procesador ofrece un rendimiento realmente sano, con 80w de consumo en carga y temperaturas por debajo de los 75 grados con su disipador de serie produciendo 37dBA de ruido. 1460CB en Cinebench R15.

 

Elevando el voltaje a 1.32v y aumentando la frecuencia a 4GHz hemos mejorado el rendimiento hasta los 1777CB, una mejora de rendimiento del 21% que se lleva también un 40% más de consumo alcanzando un máximo de 120w. El ruido aumenta hasta los 40dBA y las temperaturas se sostienen cerca de los 80 grados, perfectamente asumible para este procesador.

En su perfil de energía normal el procesador es, con su disipador de serie, un procesador de funcionamiento muy elegante, con un consumo máximo de 80w en carga y con un montón de hilos de proceso que podemos aprovechar para disponer de una multitarea excepcional, al menos en este nivel de consumo.

Sisoft Sandra. Aritmética

 

Sisoft Sandra. Multimedia

 

Sisoft Sandra. Ancho de banda memoria

 

Cinebench R15 1xCPU

 

Cinebench R15 SMP

 

Handbrake X. Menos es más

 

Geekbench 4 Single CPU

 

Geekbench 4 SMP

 

Pruebas en juegos con Geforce GTX 1080 Ti

 

Estos modelos de AMD son procesadores realmente especiales porque nos acercan un nivel de densidad de núcleos e hilos de proceso realmente elevado, con una fracción del consumo habitual, menor consumo que muchos procesadores de cuatro núcleos que aún podemos encontrar en el mercado. Su rendimiento, como hemos visto en las pruebas, es inferior al 2700X pero por cifras que nos mantienen en la idea de que el Ryzen 7 2700 es el modelo mas equilibrado (precio-rendimiento) de la gama y mantiene la arquitectura masiva de 8 núcleos. 

 

Cierto es que la reducción de rendimiento es notable, en nuestras pruebas podéis verlo claramente, pero es un procesador muy equilibrado que nos permite tener rendimientos de estación de trabajo que podemos montar en sistemas muy compactos. AMD ya ha hecho alguna demostración montando el antecesor en algún portátil y este nuevo modelo seria aún más capacitado en este entorno.

Combinar este procesador con una nueva placa base ITX con chipset X470 es un sueño realmente atractivo que con estas necesidades de refrigeración es perfectamente asequible. Asequible a nivel energético, pero también en precio puesto que podemos encontrar este modelo de ocho núcleos por algo menos de 260 Euros impuestos incluidos.