Intel Core Ultra 200S: Así mejora la eficiencia Arrow Lake para sobremesa

Inicialmente, Intel cambió su nomenclatura para los procesadores de bajo consumo y rendimiento contenido para portátiles finos con Meteor Lake. Esa arquitectura supuso la llegada de los Intel Core Ultra 100. Posteriormente,  los Core Ultra 200V "Lunar Lake" mantuvieron esa denominación pero, de nuevo, limitada a procesadores más centrados en la eficiencia que en el rendimiento

Ahora, el cambio de nomenclatura llega también a los procesadores para portátiles de alto rendimiento e incluso a los sobremesa, por tanto, decimos adiós definitivamente a los Intel Core "i" para dar la bienvenida a los Core Ultra con la nueva familia Core Ultra 200 basada en Arrow Lake S (sobremesa) y Arrow Lake HX (portátiles).

Arrow Lake es la nueva arquitectura para procesadores de alto rendimiento, aunque hereda algunas características de sus hermanos pequeños como la llegada de una NPU para inteligencia artificial, eso sí, mucho más modesta, y una mayor orientación hacia la eficiencia más que a dar un salto de rendimiento en sí.

Por el camino se dejan también el soporte para hyperthreading, un movimiento que Intel ya realizó en el pasado y que tuvo que corregir en sucesivas generaciones. Veremos si en esta ocasión dicen adiós definitivamente a esta tecnología.

Arrow Lake incluye los nuevos P-Cores Lion Cove junto con núcleos Skymont para E-Cores, además de dar la bienvenida a las nuevas GPU Xe.

 

Cinco serán los modelos que se lanzarán al inicio de la llegada de Arrow Lake el 24 de octubre: el Intel Core Ultra 9 285 será el más potente, un procesador con 24 núcleos distribuidos en 8 P-Cores y 16 E-Cores que, debido a la pérdida de Hyperthreading, se queda en 24 hilos de ejecución. Los P-Cores alcanzan los 5,7 GHz de Boost y parten de una frecuencia base de 3,7 GHz. Cuenta con 36 MB de caché LLC compartida y es capaz de alcanzar los 5,7 GHz de Boost.

La parte gráfica corre a cargo de 4 núcleos Xe con 2,0 GHz de máxima, mientras que su NPU 3 ofrece 13 TOPS. Este procesador tiene un TDP en turbo de 250W, pero parte de una base de 125 W. Llegará al mercado por un precio de 589 dólares con el que sustituirá al Intel Core i9-14900K, lanzado en su día por una cifra similar.

Le sigue el Intel Core Ultra 7 265K, un modelo que se sitúa un peldaño por debajo y que pierde 4 de los E-Cores del Ultra 9, quedándose con 20 núcleos (8+12) y con 30 MB de caché LLC. Su velocidad máxima baja hasta los 5,5 GHz en los P-Cores, pero sube hasta los 3,9 GHz de base. La parte gráfica y de NPU permanece inalterada, al igual que el TDP. Además, llegará junto a una versión Core Ultra 7 265KF sin gráficos integrados, pero sí con NPU.

Finalmente, los Intel Core Ultra 5 245K y su variante sin iGPU Core Ultra 5 245KF llegarán con 14 núcleos en una configuración de 6+8 y unas velocidades máximas de 5,2 GHz. Destaca el aumento de la frecuencia base, que sube hasta los 4,2 GHz P-Cores. 

En el caso de la GPU integrada, la velocidad baja hasta 1,9 GHz, pero la NPU permanece igual. En este caso, el TDP base se mantiene en 125W, pero el TDP máximo se queda en unos contenidos 159 W.

Todos los procesadores Intel Core Ultra 200K soportan hasta 192 GB de memoria RAM DDR5 a 6400 MT/s.

Características técnicas de los procesadores Intel Core Ultra 200K 

Arrow Lake S Núcleos (P-cores + E-cores) Hilos del procesador Intel® Smart Cache (LLC) Frecuencia Base P-Core/E-Core Frecuencia máxima Turbo de P-core Frecuencia máxima Turbo de E-core Frecuencia máxima de gráficos Xe Cores GPU NPU 3 TOPS Velocidad máxima de memoria Potencia base del procesador Potencia máxima Turbo Precio
Intel Core Ultra 9 285K 24 (8+16) 24 (no HT) 36 MB 3.7/3.2 GHz Hasta 5.7 GHz Hasta 4.6 GHz Hasta 2.0 GHz 4 13 DDR5-6400 125 W  250 W $589
Intel Core Ultra 7 265K 20 (8+12) 20 (no HT) 30 MB 3.9/3.3 GHz Hasta 5.5 GHz Hasta 4.6 GHz Hasta 2.0 GHz 4 13 DDR5-6400 125 W  250 W $394
Intel Core Ultra  265KF 20 (8+12) 20 (no HT) 30 MB 3.9/3.3 GHz Hasta 5.5 GHz Hasta 4.6 GHz - 0 13 DDR5-6400 125 W  250 W $379
Intel Core Ultra 5 245K 14 (6+8) 14 (no HT) 21 MB 4.2/3.6 GHz Hasta 5.2 GHz Hasta 4.6 GHz Hasta 1.90 GHz 4 13 DDR5-6400 125 W  159 W $309
Intel Core Ultra 5 245KF 14 (6+8) 14 (no HT) 24 MB 4.2/3.6 GHz Hasta 5.2 GHz Hasta 4.6 GHz - 0 13 DDR5-6400 125 W  159 W $294

 

 

 

Arrow Lake incorpora las nuevas arquitecturas Lion Cove para sus núcleos P-Cores y Skymont para los E-Cores.

Lion Cove promete una mejora del IPC del 9% respecto a los P-Cores de Raptor Lake, además, es capaz de ajustar las frecuencias de funcionamiento en intervalos de tan solo 16,67 MHz, lo que le permite ajustar de manera más precisa las frecuencias en cada momento, ahorrando energía. Además, también potenciará las capacidades de ajuste ante overclocks.

Los P-Cores basados en Lion Cove incluyen un sistema de gestión de energía basado en Inteligencia Artificial, algo que se suma a esos intervalos de 16,67 MHz para conseguir un salto de eficiencia energética considerable desde la pasada generación.

También se ha multiplicado por 8 el sistema de predicción de instrucciones, al mismo tiempo que se mejora el sistema de memoria caché con 3 MB de L232 y hasta 36 MB de L3 compartidos.

Por otro lado, los núcleos Skymont han duplicado el ancho de banda de su caché L2 y conseguido un 32% de IPC extra si lo comparamos con los anteriores E-Cores Gracemont. Además, tienen acceso a la propia caché L3 compartida ahora entre los P-Cores y E-Cores, lo que le permite dar ese salto de rendimiento 

Este nuevo diseño le permite conseguir hasta un 72% en rendimiento de un solo hilo en FP, con hasta un 32% extra en cálculo de enteros.

En rendimiento multinúcleo también se consiguen de 32% hasta 55% más rendimiento dependiendo del tipo de cálculo. Sin duda, el mayor salto de rendimiento de Arrow Lake lo encontraremos en estos E-Cores.

Teniendo en cuenta las mejoras de ambos tipos de núcleos, Intel ha renovado su Thread Director para repartir la carga entre los distintos núcleos. Se ha introducido un nuevo sistema de predicción basada en hardware directamente para los E-Cores, mientras que los P-Cores han mejorado el sistema de telemetría para conocer su estado en todo momento y poder asignar los distintos hilos a estos núcleos. También se ha implementado una nueva generación del modelo de predicción de instrucciones respecto a Raptor Lake.

La propia Intel pone un ejemplo donde, ante la ejecución de tareas de productividad ofimática, el procesador realiza el scheduling en los E-Cores inicialmente, y luego va moviendo los cálculos a los P-Cores según se va necesitando a lo largo de la ejecución del programa.

Todo ello lleva a que Arrow Lake consigue hasta un 30% de mejora en el consumo.

Como era de esperar, Intel ha utilizado su tecnología de empaquetado Foveros 3D también en Arrow Lake S, permitiendo un diseño multi chiplet con distintos bloques interconectados.

Las NPU se han ido integrando en los SoC para portátiles de bajo consumo de los tres principales fabricantes, y en la actualidad tanto Intel, AMD y Qualcomm disponen de procesadores con NPUs que superan los 40 TOPS que Microsoft exige para la plataforma Copilot+.

Ahora llegan también a los sobremesa y portátiles de alto rendimiento con las NPU que Intel ha integrado en Arrow Lake. Sin embargo, lo hace con una modesta presencia con tan solo 13 TOPs en los modelos más potente.

 

La NPU, por tanto, estará limitada a tareas modestas de aceleración puntual de IA, pero se queda muy lejos de los requisitos de Copilot+ PC. Por otro lado, este tipo de procesadores en muchos casos se acompaña de tarjetas gráficas dedicadas, y ya sabemos que las GPU ofrecen mucho mayor rendimiento para IA. Eso significa que, aunque la NPU de Arrow Lake sea muy modesta, las capacidades de IA de muchos de los sobremesa y portátiles acompañados de GPUs dedicadas serán suficientes para la ejecución de tareas avanzadas.

De esta forma, la razón de ser de la NPU 3 de Arrow lake se quedará en aceleración puntual de tareas con un impacto mínimo en el consumo.

Algunos ejemplos que ha puesto Intel son el uso de sistemas de IA como Cephable (que ya probamos en un Snapdragon X Elite), con el que se pueden reconocer gestos de nuestra cara para realizar acciones como, por ejemplo, movernos o apuntar en juegos, sin que eso suponga una penalización de rendimiento al ejecutarse en la NPU.

Arrow Lake también dará un salto interesante en sus GPU integradas. Este bloque no suele ser demasiado importante en un sobremesa y, de hecho, hasta ahora seguían delegando en sus arquitecturas antiguas. Ahora llega la arquitectura de núcleos Xe que ya pudimos ver en las pasadas generaciones de SoCs portátiles.

Esto añade soporte para DX12 Ultimate y un mayor rendimiento multimedia, de codificación e incluso en juegos (aunque este tipo de procesadores irá acompañado de una GPU dedicada en muchos casos). También tenemos unidades de Raytracing por primera vez en una CPU de sobremesa de Intel.

Como hemos visto, cada Core Ultra 200K irá acompañado de una GPU con 4 Xe Cores con sus 4 unidades de Raytracing, 64 motores vectoriales y 4 MB de caché L2.

Incluye también soporte para la tecnología de reescaado XeSS y el motor multimedia Xe Media Engine para la codificación y decodificación de vídeo.

En total, tenemos más del doble de rendimiento que las GPU de Raptor Lake.

La GPU también se puede utilizar para tareas de Inteligencia artificial, consiguiendo 8 TOPS de máximo en Int8. Estos 8 TOPS se suman a los 13 TOPS de la NPU y a los 15 TOPS de la CPU para un total de 36 TOPS. 

El bloque SoC integrado en estas CPU incluye el motor multimedia con capacidades avanzadas de codificación. Esto permitirá a los procesadores Arrow Lake poder codificar y decodificar sin necesidad de GPUs vídeos con resoluciones de hasta 80K a 60 FPS con HDR de 10 Bits en la decodificación, y hasta 8K a 120 FPS con HDR10 en la codificación.

Por otro lado, el motor de pantalla permite utilizar hasta cuatro pantallas 4K60de manera directa al procesador, sin utilizar tarjetas gráficas dedicadas, dando lugar a la creación de, por ejemplo, mini PCs con estos Core Ultra 200K capaces de manejar múltiples pantallas de alta resolución.

En el caso de usar pantallas 1080p o de 1440p, se pueden alcanzar los 360 Hz sin problemas

En cuanto al soporte de memoria DDR, ahora podemos utilizar memorias DDR5-6400 de manera nativa que cumplan con el estándar de la JEDEC para esta velocidad.

Hay un máximo de hasta 192 GB de memoria RAM DDR5 distribuidos en un sistema de doble canal con soporte para ECC y formatos UDIMM SODIMM CUDIMM y CSODIMM. En concreto, cada DIMM puede tener hasta 48 GB por módulo.

 

Con la llegada de Arrow lake se estrena el nuevo socket LGA1851, dejando obsoleto al fugaz LGA1700 que solo ha durado dos generaciones. Por tanto, los que quieran dar el salgo a los Core Ultra 200K tendrán que desechar sus placas base y sustituirlas por unas de nueva generación con los nuevos chipsets Intel 800 Series.

Esta nueva plataforma integra lo último en conectividad y tecnologías, con un total de 48 líneas PCIe entre CPU y Chipset, 20 de ellas PCI Express 5.0.

Tenemos también soporte para 10 USB 3.x que pueden distribuirse en 5 USB  3.2 Gen 2x2 de 20 Gbps, o bien 10 USB 3.1 de 10 Gbps o 10 USB 3.0 de 5 Gbps. Adicionalmente, soportan hasta 14 USB 2.0 y 8 SATA III.

A nivel de conectividad, Arrow lake es la primera plataforma de sobremesa con Thunderbolt 4 nativo, lo que permite disponer de conectividad de dos puertos USB-C de 40 Gbps sin necesidad de chips dedicados. También tenemos Wifi 6E de hasta 2.400 Mbps integrado y Ethernet de 1 GbE.

Se podrán añadir chips dedicados para añadir hasta 4x Thunderbolt 5, WiFi 7 de 5,8 Gbps y conectividad Ethernet de 2,5 GbE

 

   Lo cierto es que los resultados de rendimiento que ha dado Intel son un poco decepcionantes. El Intel Core Ultra 9 285K, que es el modelo más potente de esta nueva generación para sobremesas, apenas consigue superar al Intel Core 14900K de la familia Raptor Lake Refresh.

Tenemos una mejora del IPC como hemos visto, pero también se pierden tecnologías como el Hyperthreading, y al igual que ocurre con Lunar Lake, si se reduce el consumo de manera tan drástica, el rendimiento también tendrá su penalización.

En juegos, este procesador ofrece un rendimiento similar al de la pasada generación, con casos donde hay un empeoramiento de hasta el -13%, y otros con mejoras de +15%, pero por lo general, hablamos de un margen de -+3% que supone que no hay salto de rendimiento entre generaciones en gaming

Donde destacan los Core Ultra 200K es en el consumo. Tras años con TDPs que alcanzaban cifras elevadas, Intel ha seguido la filosofía iniciada con Lunar Lake y han rebajado considerablemente la energía necesaria para conseguir el mismo rendimiento, con medias de 80W menos y máximas de hasta 165W menos de consumo.

Respecto a la competencia, la compañía compara su Core Ultra 9 285K con el AMD Ryzen 9 9950X. Los resultados están también parejos, con un rendimiento similar donde hay casos en los que la solución de Intel saca más rendimiento y otros donde menos.

En creación de contenido, Intel promete mejoras de rendimiento respecto a la competencia, en especial en la codificación de vídeo 8K.

En Inteligencia Artificial, las mejoras de la iGPU y de la NPU suponen un salto mucho más notable que en rendimiento puro de CPU, con hasta el doble de rendimiento en algunos casos respecto del Core i9-14900K en la parte de la iGPU.

Por tanto, todos aquellos que buscan rendimiento puro y duro, posiblemente no vean ningún aliciente en dar el salto a la nueva generación Core Ultra 200, sobre todo si tenemos en cuenta que supone un cambio de plataforma con nuevas placas y sockets. La baza de la eficiencia posiblemente no convencerá a muchos, ya que en las plataformas de sobremesa de alto rendimiento no es una característica realmente importante, y las mejoras en IA o en GPU integrada tampoco.

El 24 de octubre llegarán los Core Ultra 200K de sobremesa de la familia Arrow Lake y entrarán a competir directamente con los AMD Ryzen 9000 con arquitectura Zen 5.

Resulta llamativa las similitudes que hay entre las dos generaciones a la hora de enfocarse en una mejora de la eficiencia más que en un salto de rendimiento. Una de las críticas que se le hacen a los AMD Ryzen 9000 es que en juegos no mejoran a los anteriores Ryzen 7000X3D (al menos mientras no lleguen los 9000X3D), o que el salto de rendimiento no es demasiado como para justificar una nueva familia. Ahí mismo están los anuncios de nuevas BIOS para que los modelos más modestos suban de 65W a 105W de TDP y consigan más rendimiento.

Con estos Arrow Lake, a falta de realizar nuestras propias pruebas, parece que ocurre lo mismo y que Intel se ha centrado en mejorar considerablemente la eficiencia respecto de generaciones anteriores, dejando un poco de lado el rendimiento puro. Es cierto que en los últimos años los TDP máximos de sus CPUs se habían disparado, y de hecho, aun con Arrow Lake siguen siendo más altos que los de AMD. Está claro que esta reducción era necesaria en algún momento y posiblemente las nuevas arquitecturas abran camino para conseguir más rendimiento en sucesivas generaciones.

El salto a la arquitectura Xe en GPU integrada era también muy necesario, las Intel UHD eran GPUs muy básicas y aunque en sobremesa no se les da tanta importancia, siempre son un apoyo interesante. Por otro lado, la inclusión de una NPU puede tener sentido para esos casos donde se utilicen funciones de IA local sin afectar al rendimiento del sistema (el ejemplo que puso la propia Intel con un sistema de IA reconociendo el rostro para realizar movimientos mientas jugamos puede ser un caso de uso perfecto), no obstante, es una NPU muy básica que no cumple con los requisitos ni para Copilot+, por lo que parece que se quedará un poco a medio camino. Además, las GPUs de sobremesa son mucho más a capaces para tareas más pesadas de IA, y posiblemente la inclusión o no de una NPU en un procesador de sobremesa no vaya a ser lo que haga que el consumidor se decante por un procesador.

Por todo ello, parece que los entusiastas y los gamers que ya dispongan de un procesador K de la decimotercera o decimocuarta generación de Intel no encontrarán un salto de rendimiento que les compense dar el salto (con su consiguiente cambio de placa base) a estos nuevos Core Ultra 200K. Es la misma situación en la que se encuentra la plataforma AMD Ryzen 9000 con respecto a los Ryzen 7000, aun manteniendo socket, el salto de rendimiento posiblemente no compense la actualización.

Eso sí, los que quieran actualizar su PC desde modelos antiguos, encontrarán en Arrow Lake una plataforma de alto rendimiento con todo tipo de mejoras y tecnologías, con una eficiencia energética muy superior.

Tendremos que esperar a realizar nuestras pruebas en el laboratorio para ver el rendimiento real de los Core Ultra 200K y sacar las conclusiones finales.