Cómo calibrar la pantalla en Windows 10

Cuando compramos un nuevo monitor siguiendo nuestra guía de tipos de paneles de monitor, o si ya lo tienes pero quieres sacar el mayor rendimiento de este, no hay nada como una buena calibración de pantalla para obtener unos colores reales e intensos ya sea para trabajar o jugar. Windows 10 incluye una herramienta que nos permite calibrar la pantalla sin necesidad de ningún tipo de software o hardware adicional.

En el caso de trabajar con dos monitores a la vez, deberás calibrar ambas pantallas por separado. Si tienes alguna duda sobre como duplicar pantalla aquí te ayudamos.

El proceso de calibrar la pantalla nos sirve para obtener unos colores en el monitor lo más parecido posible a los que podemos ver con nuestros ojos, para ello haremos uso de un software específico que nos permitirá, mediante la regulación de los colores primarios (rojo, verde y azul), el brillo y contraste, modificar los ajustes de color para acercarnos lo máximo posible a la realidad.

Para entornos profesionales el proceso de calibración se realiza para obtener unos colores impresos tal y como los estamos viendo en pantalla, en estos casos es más recomendable realizar estos ajustes mediante instrumentos de hardware como un espectrómetro o colorímetro, estos son mucho más precisos, pero también mucho más costosos.

Nosotros realizaremos una calibración de la pantalla con la herramienta que incluye Windows 10, así que no necesitaremos instalar ningún tipo de software o utilizar hardware para realizar una calibración como hizo nuestro compañero con el monitor Cooler Master GM27-CF que analizó, con unos resultados bastante buenos si nuestro fabricante de monitores no ha realizado una calibración de fábrica decente. Veamos cómo hacerlo.

 

 

 

Veamos cómo usar la utilidad de Windows 10 para calibrar la pantalla y conseguir unos colores mucho mas reales simplemente haciendo unos clics con el ratón, en unos pocos minutos tendremos un nuevo perfil con la configuración necesaria para realzar esos colores que antes teníamos dominados por rojo, verde o azul.

Antes de realizar estos ajustes, sería muy recomendable tener el monitor encendido el tiempo suficiente para que coja la temperatura ideal de trabajo, además tendremos que restablecer los ajustes del monitor a valores de fábrica para no interferir en la calibración. En Windows, sería ideal no tener habilitado ninguna configuración especial que interfiera en los colores, como Luz nocturna.

1. En primer lugar, tendremos que abrir la utilidad de calibración de pantalla de Windows 10, para ello podemos escribir calibración en la lupa o hacer clic con el botón derecho en cualquier parte de la pantalla y seleccionamos Configuración de pantalla.
   
2. Un poco más abajo tendremos la opción de Configuración de pantalla avanzada.
   
3. Ahora hacemos clic en Mostrar las propiedades de adaptador de pantalla 1.
   
4. Vamos a la pestaña Administración del color y hacemos clic en el botón Administración del color...
   
5. Se abrirá la ventana Administración del color y vamos a la pestaña Opciones avanzadas.
   
6. Ahora hacemos clic en Calibrar pantalla para abrir la herramienta de calibración de color de la pantalla de Windows 10. De esta manera dejaremos abierto también la herramenta de Administración del color para poder ver el nuevo perfil una vez finalizado.
   
7. Se abrirá la herramienta de calibración de color de la pantalla y hacemos clic en siguiente para comenzar, veremos un aviso que nos indicará lo que anteriormente advertimos, será necesario restablecer los ajustes a fábrica de los valores del monitor. Cómo también será necesario tener abiertos el OSD con los ajustes del monitor, sería recomendable ponerlo en una posición que no nos moleste.
   
8. Comenzaremos ajustando el valor de gamma, tendemos que ajustar la barra de la izquierda para ajustar la imagen como en la muestra central. Si no estamos satisfechos con el resultado, podemos hacer clic en Restablecer si queremos comenzar de nuevo.
   
   
9. Ahora tendremos que ajustar el brillo para que sea lo más parecido a la imagen central, en este caso tendremos que hacer uso de los ajustes del monitor para aumentar o reducir el brillo y conseguir distinguir la camisa, de la chaqueta y de la X del fondo.
   
   
10. Lo siguiente será ajustar el contraste, haciendo uso de los ajustes del monitor tendremos que aumentar el contraste al valor máximo sin que dejemos de ver los botones y arrugas de la camisa. Si no podemos verlos con la configuración actual, tendremos que bajar el contraste hasta conseguirlo.
    
    
11. El siguiente paso nos ayudará a corregir los colores dominantes para obtener una escala de grises neutros, podemos mirar los ejemplos para hacernos una idea de que color bajar o subir según veamos la escala en nuestra pantalla.
    
    
12. Una vez completada la calibración, podemos ver los ajustes anteriores y compararlos con los actuales haciendo clic en el botón Calibración anterior y Calibración actual. Si no nos gusta el resultado, podemos volver a realizar la calibración y establecer otros valores.
    

Ya tenemos realizada la calibración de pantalla.

Una vez finalizada la calibración de pantalla con la herramienta integrada de Windows 10, podemos darle una vuelta de tuerca más haciendo que el texto sea más fácil de leer en pantalla. Desde la herramienta de calibración de pantalla, al terminar, nos ofrece la posibilidad de iniciar esta utilidad llamada Optimizador de texto ClearType, que es muy recomendable usar.

Si dejamos marcada la casilla y pulsamos en finalizar, se abrirá automáticamente al cerrar la utilidad de calibración de pantalla, veamos que sencillo es ver el texto más nítido y claro en pantalla.

1. Pulsamos en siguiente para iniciar el Optimizador de texto ClearType.
   
2. Comprobará que estamos en la resolución nativa del monitor para una mejor experiencia.
   
3. Ahora simplemente tendremos que seleccionar la muestra que mejor se vea en las 5 ventanas que nos ofrecen con opciones.
   
   
4. Al seleccionar estas 5 muestras, nos optimizará el texto para mostrarlo mas suave y mejor de manera automática, solo tenemos que hacer clic en Finalizar para terminar.
   
    

Además podemos descargar pefiles ya configurados y añadirlos para usarlos en situaciones concretas. Todos los fabricantes de monitores tienen a disposición de sus usuarios los perfiles de los monitores que venden, por lo que sería ideal descargar el perfil e instalarlo para disponer de una configuración óptima de color.

En ocasiones el resultado de los perfiles del fabricante no es el esperado, por lo que podemos realizar los ajustes de color usando la utilidad de calibración de pantalla de Windows 10 como explicamos anteriormente o podemos usar perfiles ya creados que podemos descargar de internet.

Para añadir un perfil descargado lo haremos desde la misma ventana de Administración del color, para acceder a ella si la hemos cerrado, podemos escribir color en la lupa de Windows 10 y hacemos clic en Administración del color.

1. En Dispositivo debemos seleccionar el monitor que queremos aplicar el perfil descargado.
   
2. Debemos tener marcada la opción Usar mi configuración para este dispositivo.
   
3. Ahora hacemos clic en el botón Agregar...
   
4. Si queremos usar un perfil que ya tengamos en nuestro equipo, lo seleccionamos de la lista de perfiles ICC.
   
5. Si lo que queremos es añadir uno nuevo que hayamos descargado hacemos clic en Examinar... para buscarlo en nuestro equipo y hacemos clic en Agregar.
   
6. Ahora aparecerá en la lista de perfiles asociados a este monitor, para activarlo debemos hacer clic en el botón Establecer como perfil predeterinado.
   

Ahora ya tenemos activo el perfil que hemos descargado para funcionar con él.

Tenemos que recordar que la configuración de estos perfiles se almacena individualmente para cada usuario que tengamos en nuestro PC, si compartimos el ordenador con otras personas y queremos aplicar los cambios para todos los usuarios, tendemos que Cambiar los valores predeterminados del sistema.

Para esto, y desde la ventana de Administración del color vamos a la pestaña de Opciones avanzadas, abajo del todo tenemos la opción Cambiar los valores predeterminados del sistema... y si hacemos clic en ella, abriremos la ventana Valores predeterimnados del sistema de administración del color, en la que de manera similar a como lo hemos hecho antes, podemos Agregar un perfil, Establecerlo como predeterminado, o en la pestaña de Opciones avanzadas podemos calibrar la pantalla. No olvides marcar la casilla Usar calibración de pantalla de Windows 10 para realizar la calibración.

Realizados estos cambios modificaremos la configuración de Windows y quedarán disponibles para todos los usuarios que tengamos activos, ideal si compartimos el equipo en un entorno de trabajo donde la representación real de los colores supone una ventaja para nuestro día a dia, aunque para entornos profesionales lo ideal es usar un espectrómetro o colorímetro, crear un perfil específico con los colores reales y habilitarlo para todos los usuarios.

Con la herramienta de calibración de color de la pantalla conseguiremos unos colores mucho más vivos y reales en nuestro monitor, así a la hora de ver películas ganaremos realismo, o si vamos a trabajar con colores podemos tener una representación mucho más real de estos. En juegos conseguiremos unos colores más llamativos y que nos permitirán distinguir entre colores próximos.

Además, el texto se mostrará de una manera más clara y suave gracias a la optimización que nos ofrece Windows 10 con su herramienta de optimización de texto ClearType, en conjunto ganaremos en calidad de imagen con el mismo monitor de siempre gracias a estos sencillos ajustes y sin necesidad de ningún software extra.

Si disponemos de un perfil específico para nuestro monitor o si descargamos alguno ya configurado de internet podemos añadirlo también como perfil predeterminado, en este caso el trabajo estará hecho y solo tenemos que agregarlo para empezar a trabajar con él.