Review Placa Base MSI MEG X399 Creation
La plataforma Threadripper impresiona desde que abres uno de sus procesadores, todo parece magnificado por el tamaño del procesador, pero lo cierto es que todo parece estar perfectamente equilibrado porque todos os elementos que componen esta plataforma son claramente masivos. Sus números impresionan y eso es gracias a que ha trasladado tecnología de estación de trabajo hacia un segmento de producto que hacía tiempo que estábamos estancados en lo que Intel quería que tuviéramos en cada momento.
Una de las ventajas de los nuevos Ryzen Threadripper 2 es que no requieren de nuevas placas base, usan el mismo socket y trabajan sobre el mismo chipset, pero los tiempos avanzan, las necesidades del usuario cambian y los fabricantes se adaptan. MSI anda simplificando sus gamas, como todas las marcas de placas base, y la nueva gama Creation es lo más cerca que estaremos nunca de una placa base para estación de trabajo y dentro de esta nueva gama la X399 seguramente sea su obra maestra.
La gama Threadripper es cara, y sus procesadores masivos, y solo encontraremos un chipset para darle soporte, y realmente no es que tenga mucho trabajo que hacer, salvo ofrecer conectividad menor, porque casi toda la impresionante cantidad de cifras que ofrece esta plataforma están integrados en el propio procesador. Aun así, el chipset es clave para cierta funcionalidad básica del sistema.
El chipset X399 de la MSI MEG X399 Creation está conectado al procesador Threadripper mediante un enlace PCI Express 3.0 de 4x, que ofrece hasta 32Gbps de ancho de banda. A través de este interfaz el chipset es capaz de ofrecernos hasta 8 conectores SATA 6Gbps con capacidad RAID y la conectividad básica necesaria que requiere el procesador para ofrecernos conectores como los nuevos USB 3.1 Gen2 de 10Gbps.
También nos ofrecerá soporte para controladoras añadidas de terceros, que ofrezcan mas funcionalidad, pero lo que es almacenamiento masivo de alta velocidad y gráficos, todo correrá a cargo de la impresionante cifra de 64 líneas PCI Express 3.0 que ofrecen los procesadores Threadripper.
El equipamiento de almacenamiento de la MSI MEG X399 Creation es simplemente impresionante. Debajo de las alas que dan forma al disipador del chipset X399 podemos encontrar cuatro slots de tipo M.2 Socket 3 cada uno con enlace PCI Express 3.0 2x/4x de hasta 32Gbps de ancho de banda. Todos soportan unidades PCI Express NVMe y también unidades SATA, aunque en ese caso perderemos alguno de los conectores SATA tradicionales de la placa.
Dos de ellos tienen capacidad para unidades de hasta 80mm de largo y el tercero de hasta 110mm. A estos tres conectores M.2 tenemos que añadir la tarjeta M.2 Expander Aero, que se incluye con la placa, donde podemos montar cuatro unidades mas de hasta 110mm de largo que tendrán una conectividad completamente integrada con la placa, incluida funcionalidad como el RAID en bios, y que están disipadas por un ventilador como el de una grafica compacta.
La conectividad SATA incluye 8 conectores, todos proporcionados por el chipset X399, y que tienen también capacidad RAID con modos 0, 1 y 10. No hay controladoras añadidas, solo podemos echar de menos un conector U.2 por completar el equipamiento, aunque estas unidades escasamente tienen éxito en el mercado doméstico.
Esta y todas las placas con los nuevos Threadripper 2 soportan la tecnología StoreMI. Esta tecnología combina las técnicas de cache de disco mecánico tradicionales, como es usar un SSD, añadiendo una capa con 2GB de RAM (en la versión de pago son hasta 4GB), como cache adicional que consigue resultados espectaculares. Todo el proceso es reversible sin perder datos, lo que lo hace muy fiable.
Asi es la Expander Aero por dentro, cuenta con conectividad, sensores de temperatura y algunos controles en placa.
Asi es la Aero Expander montada. Es una tarjeta con interfaz PCI Express 16x, el ventilador y los leds se pueden apagar.
La capacidad de RAM viene también definida por el procesador, que tiene un máximo teórico de 2TB de RAM DDR4 en cuádruple canal, que podemos montar en 8 bancos de memoria que difícilmente podremos cubrir con módulos de 256GB que sería el máximo teórico.
Si hay en el mercado módulos de 128GB, registradas y con ECC, que serian compatibles con esta placa base y estos procesadores, su coste es de unos 3500 Euros actualmente. Aparte de este dato, esta placa ha sido diseñada para soportar perfiles de memoria A-XMP y puede trabajar con memorias de mas de 3600Mhz en overclocking. Son precisamente las que hemos usado para sacar el máximo del procesador Threadripper 2990WX que hemos analizado aquí.
Si algo ofrece la plataforma Ryzen Threadripper 2 es capacidad de ampliación. Estos procesadores, como los de la generación anterior, tienen una capacidad para hasta 64 líneas PCI Express 3.0 controladas directamente desde el procesador. Eso hace que estas placas base puedan tener una conectividad de ampliación masiva. Ya hemos visto como se las gasta en cuanto a capacidad de almacenamiento, pero también hay hueco para un montón de tarjetas gráficas.
Tiene un total de cuatro slots PCI Expres de tipo PEG, es decir, con tamaño para enlaces de hasta 16x, el que usan tradicionalmente todas las tarjetas graficas con este interfaz. Todos los slots son completamente funcionales, a 16X, aunque la placa solo soporta SLI o Crossfire de hasta 3 tarjetas gráficas. Todas funcionarán a todo su potencial.
Estos cuatro slots, que MSI ha reforzado con una estructura metálica que aumenta la resistencia mecánica, se completa con un único conector PCI Express 1x. La placa tiene conectividad extra de alimentación, mediante un molex de 12v, para aumentar la intensidad de corriente en la zona de conectores PCI Express de la placa.
La conectividad USB de la MSI MEG X399 Creation es magnífica, a la altura de lo que esperamos de estos procesadores y este nivel de precios. En el frontal podemos encontrar cuatro puertos USB 3.1 Gen1 de 5Gbps tipo A que están suministrados por el propio chipset X399.
MSI también ha añadido una controladora ASMedia 3142 para conseguir capacidad conectiva USB 3.1 Gen2 Tipo-C para el frontal de la placa. Este tipo de conectores ofrecen hasta 15w de potencia de carga y velocidades de hasta 10Gbps. El panel de conectores USB frontales se completa con cuatro puertos USB 2.0.
No son los únicos conectores que tiene la placa sobre el PCB. Cuenta con hasta 10 ventiladores con control PWM/DC y algunos de ellos especializados para bombas de impulsión de sistemas de refrigeración liquida. Entre otros conectores también tenemos capacidad para A-RGB, tres puntos para termistores externos, conector para sistemas RGB de Corsair y también para leds de tipo 5050 de 5 y 12v.
En el panel de conectores trasero también podemos encontrar múltiples puertos USB 3.1 Gen1, incluido un puerto de tipo USB-C que están todos soportados por el propio procesador. Este panel de conectores trasero incluye también botones de acceso rápido a funciones de bios, como el reinicio de CMOS o el cambio de bios, dos puertos Ethernet Gigabit I211 de Intel – que soportan agregación de enlaces para hasta 2Gbps full-dúplex – y una controladora Wifi de última generación formada por un chipset Wifi-AC Intel 9260 capaz de desarrollar velocidades de hasta 1733Mbps gracias a su configuración de antenas 2x2.
En el panel trasero también encontraremos la conectividad principal de audio, con los conectores habituales. Esta placa base tiene un magnifico montaje de sonido, del que hablaremos durante este artículo.
La MSI MEG X399 Creation impresiona a simple vista. Es masiva la mires por de la mires y MSI la ha rematado con un diseño agresivo que parte desde el disipador del chipset para extenderse como dos alas rodeando todo el fondo y el lado derecho de la placa. Estas alas son en realidad los disipadores de sus conectores M.2 integrados en placa y podemos retirarlos mediante tornillos.
El PCB es negro, y la placa combina los todos de grises y plata, con leds estratégicamente situados. El diseño incluye también un disipador de VRM a juego que se alarga hasta la cobertura del panel de conectores trasero que a su vez se alarga para la zona del PCB donde esta situado el sistema de sonido integrado de la placa.
Este modelo cuenta con una cifra bastante impresionante de fases de alimentación, un total de 16 fases para el procesador y tres fases para las memorias y chipset. Las fases permiten estabilizar la conversión de corriente alterna, que tiene forma de onda, hacia una línea plana que es la que necesitamos para que la alimentación del procesador, y las memorias, sea lo mas estable posible. Si las líneas son de calidad, cuantas mas mejor y esta placa cuenta con componentes de primera para que los hasta 250w de estos nuevos procesadores no sean ningún problema.
A pesar de la enorme carga el sistema de disipación de los MosFETs hace un gran trabajo, manteniendo las temperaturas en rangos de trabajo normales incluso con refrigeración líquida, que no mueve aire alrededor del disipador.
Todas las fases son controladas digitalmente, lo que aumenta de forma radical la eficiencia del sistema, y se han usado componentes japoneses de máxima calidad además de un rediseñado sistema de refrigeración que incluye una heatipe únicamente dedicada al sistema de MosFETs.
La MSI MEG X399 Creation cuenta también con doble entrada auxiliar de 12v para el procesador, lo que proporciona capacidad para un consumo de hasta 720w y 60 amperios. Los componentes y los controladores se han escalado precisamente para aguantar este nivel de carga. Cuenta con calibración digital de línea y protección de sobrevoltajes
MSI ha integrado, también, controles y un display POST en placa para que todo sea más cómodo a la hora del overclocking. Dispone de doble bios, para que podamos hacer overclocking con seguridad y botones rápido para reseteo de CMOS y cambio de bios. Estos procesadores no es que tengan mucha capacidad de subida de frecuencia, por sus requerimientos de disipación básicamente, pero esta placa base está perfectamente preparada para sacar el mayor partido de cualquier MHz que podamos añadir a esa larga lista de núcleos e hilos de proceso con los que cuentan los nuevos Ryzen Threadripper 2 de AMD.
Y, como no, contamos con un gran soporte para iluminación RGB. Ya no solo por los muchos leds que integra la placa en sitios clave, sino porque es compatible con cualquier estándar del mercado y por tener también un gran software de control además de control directo desde bios.
MSI ha integrado en la MSI MEG X399 Creation su mejor sistema de sonido hasta la fecha. Se denomina Audio Boost 4 y se combina a la perfección con los códecs Nahimic de tercera generación.
Como no, esta soportado por un DSP Realtek ALC1120, que es el que usan todas las placas medio decentes del mercado y que es, a su vez, un gran DSP, donde se han añadido componentes de gran calidad, nivel audiófilo, para completar un sistema de gran calidad.
El PCB del sistema de sonido está separado del principal y los canales separados en diferentes capas del PCB. Se usan capacitadores Nichicon dorados de primea calidad y se ha integrado un amplificador de auriculares, para el frontal de placa, que puede detectar y autogestionar auriculares de hasta 600ohmios de impedancia.
Los conectores traseros están chapados en oro para mejorar la conectividad y se incluye también conectividad digital por si queremos usar algún receptor de sonido/vídeo externo.
Las bios de MSI suelen hacernos el trabajo mucho mas fácil, sobre todo a los usuarios con menos experiencia, a la hora de sacar partido a nuestros componentes. Su bios UEFI es muy accesible y tiene asistentes de configuración tanto para las memorias, aprovechando perfectamente los perfiles XMP de las memorias mas rápidas, como modos de overclocking predefinidos por los ingenieros de MSI para cada modelo de procesador.
Este ajuste automático funciona realmente bien, siempre y cuando tengamos perfiles para el procesador que estamos usando. En el caso del 2990WX de AMD no hay perfiles compatibles así que tendremos que echar mano, hasta próxima actualización de bios, de nuestras técnicas clásicas.
Tiene también un magnifico asistente para controlar todos los ventiladores instalados en la placa desde la propia bios, así como configuración automática según perfiles y necesidades del sistema. Así tenemos la refrigeración necesaria en momentos de estrés del sistema y mucho silencio en el uso normal del PC.
Esta bios se acompaña de un buen paquete de programas que nos permitirán tener el sistema siempre actualizado tanto a nivel de bios de placa como de drivers y aplicaciones extra. Entre las aplicaciones mas destacadas con las que cuenta este modelo podemos encontrar el clásico Command Center de MSI, el App Manager, la nueva Gaming App que nos permite optimizar el sistema cuando vamos a jugar, y su magnifico Live Update 6.
Además de estos clásicos, este modelo también incorpora un gestor de priorización de red, que funciona perfectamente con sus dos tarjetas Ethernet Intel y una aplicación para generar unidades RAMdisk. Estos procesadores, con tanta capacidad para montar RAM, aprovechan muy bien este tipo de aplicaciones.
Una cosa de las que hablamos en nuestro análisis del AMD Ryzen Threadripper 2990WX es que abarata de forma notable, a pesar de su precio elevado, lo que es una estación de trabajo de altas prestaciones. Cuesta 1800 Euros, si, pero ofrece el rendimiento de un procesador de servidor que cuesta varios miles más. De hecho, el mejor procesador de sobremesa de Intel, que cuesta 2000 Euros, le queda bastante corto.
Si combinamos este procesador con una placa base sencilla, pero efectiva, donde el almacenamiento sea de primer orden, donde tengamos gran capacidad de RAM, donde podamos montar dos o mas de las mejores gráficas del mercado, quizás estemos delante de la estación de trabajo de nuestros sueños y, como no, también con la maquina para jugar con la que hemos soñado todos.
La verdad es que no le encuentro fallos. Hemos hablado de su capacidad de almacenamiento, de su rendimiento, hemos visto de lo que es capaz con el mejor procesador del mercado y con memorias de alta velocidad. Tiene también un excelente montaje de red, tanto cableada como Wifi, y una conectividad USB que no termina nunca.
De todos modos, esta placa no será barata, Threadripper no es una plataforma económica, así que deberemos preparar unos 500 Euros para hacernos con los favores de esta placa base. Es una cifra elevada, para un rendimiento elevado.