Review SSD GoodRAM IRDM Pro SATA 240GB
Las unidades SATA SSD, mas con la vuelta a los precios razonables que estamos viendo en las últimas semanas, están volviendo a retomar el papel de almacenamiento masivo relativamente económico que empezaban a desempeñar con la entrada de las unidades de mayor rendimiento en formato M.2 con interfaz PCI Express y compatibilidad con protocolo NVMe.
Este tipo de unidades se han quedado estancadas en el interfaz SATA 6Gbps, que es lo que limita en buena medida su rendimiento, pero son una alternativa económica, para la que están preparados muchos portátiles y la gran mayoría de ordenadores sobremesa actuales y con precios como los de esta unidad, lo cierto es que son una buena forma de añadir almacenamiento de alta velocidad a precios razonables que acompañen, siendo la configuración ideal, a un disco más rápido donde ejecutemos el sistema operativo y nuestras aplicaciones principales.
El GoodRAM IRDM, que como sabéis es su división gaming y profesional, en esta versión Pro no ofrece novedades a lo que ya conocemos en este formato de 2.5” con 7mm de altura, pero sí que tiene esos estándares claves que esperamos en una unidad de calidad.
La carcasa, por ejemplo, es ligera pero fabricada en chapa con una pintura negra de calidad con un cierre perfecto que protegerá las sensibles memorias MLC de que se compone. Son unidades que se fabrican en la Unión Europea, concretamente en Polonia y eso las convierte en algo bastante exótico acostumbrados a que toda esta electrónica nos llegue de china u otros países del sureste asiático. 7
Este modelo podemos encontrarlo en tres configuraciones diferentes, siempre con memoria NAND Flash en formato MLC (que en teoría y en la practica resulta mas fiable y duradera que otros modelos más económicos con TLC) impulsadas por una potente controladora Phison S10 (PS3110) de cuádruple núcleo. Es una controladora muy capacitada y seguramente de lo mejor que podemos encontrar para unidades de formato SATA en este formato o en otros mas recientes como el M.2. Es un referente y la podemos encontrar en las mejoras unidades del mercado, incluida esta. Esta controladora incluye la posibilidad de disponer de cache en forma de memoria DDR3L de hasta 1GB de capacidad, que en esta serie solo esta disponible en el modelo de 960GB.
GoodRAM nos ofrece con este modelo hasta 5 años de garantía con una vida útil de 2 millones de horas que nos garantizan una capacidad de grabación de hasta 500GB/día durante esos 5 años de garantía. Las configuraciones son de 240, 480 y 960GB así que como podéis imaginar hay un 7-8% de reserva de memoria que la unidad utiliza para aislar celdas que hayan quedado dañadas manteniendo, con esa reserva, toda la viabilidad del disco durante mas tiempo.
Esta controladora y estas memorias de primera calidad nos ofrecen las prestaciones que esperamos de una unidad SATA de gama alta. Nos permiten desarrollar velocidades lineales de hasta 560MBps de velocidad de lectura sostenida y hasta 530MBps de velocidad de escritura. Estas características son iguales para toda la gama, descubriéndonos que sin duda la limitación esta en el interfaz y no en la configuración de la memoria NAND o en la controladora de la unidad. Estas velocidades se trasladan también cuando trabajamos con archivos compresibles tanto como no compresibles (que no admiten más compresión como archivos precompactados tipo .zip, .rar, .img, .esd, etc.).
En cuanto a la potencia de proceso, lo realmente importante en una unidad SSD, las prestaciones se mantienen también en los tres modelos con hasta 100.000 IOPs de lectura y hasta 88.000 IOPs de escritura con la única excepción del modelo de 960GB que alcanza 90.000 IOPs de escritura. Son datos que parecen cortos comparados con las mejores unidades SSD del mercado, todas en formato M.2 NVMe, pero para una unidad SATA es sin duda una serie de especificaciones realmente notables y es que esta controladora de Phison nunca defrauda.
Por nuestro laboratorio han pasado en los últimos meses algunas de las unidades SSD mas capacitadas del mercado, unidades veloces como los últimos modelos de la gama 960 y 970 de Samsung, el Intel 905P o el impresionante MP510 de Corsair.
Captura térmica en carga conectado como unidad externa, usado en caja sube la temperatura en torno a los 7 grados, unos 36 grados de media.
Esta unidad está lejos de las capacidades de estos modelos, pero nos ha sorprendido por sus temperaturas de trabajo en carga de menos de 40 grados, en reposo de tan solo 33 grados y por unos consumos en reposo de 0,1w y en carga de tan solo 2.6w que es bastante reseñable teniendo en cuenta la potencia de la controladora con la que cuenta. Parece mucho ya que hay unidades mecánicas con consumos medios muy inferiores, pero no es nada comparado con los 7-10w que consume una unidad M.2 NVMe de altas prestaciones.
En las pruebas podemos ver perfectamente como es capaz de vencer a una de las unidades SATA más compententes del mercado, el Samsung 860, que lleva siendo años una de las mejores unidades SATA que podemos comprar. La mejora en todas las pruebas y lo hace en algunas con contundencia.
GoodRAM también cuida con detalle el software de soporte de esta y todas sus unidades de almacenamiento SSD. El GoodRAM IRDM Pro viene de serie con un “Toolbox” sencillo, pero con todas las características necesarias que esperamos de una unidad de calidad y de un fabricante de prestigio. Su software de herramientas nos permite monitorizar el estado de la unidad con datos concretos de uso que incluyen la viabilidad del disco, GB grabadas, horas de uso, arranques de la unidad, temperatura, etc.
También nos permite mantener el firmware de la unidad actualizada en caso de mejoras a nivel de software. Todo desde Windows lo que nos permite estar siempre al día Si echamos de menos que no tenga alguna función extra como el “Secure Erase” pero esto es algo que ahora encontramos en todas las placas base mas o menos modernas.
Phison ha demostrado que sus controladoras son garantes de rendimiento y fiabilidad tanto en este tipo de unidades, mas veteranas, como en unidades mas recientes en formato M.2 PCI Express. Ya nos sorprendió hace unos días en nuestro análisis de la Corsair MP510 y ahora lo vuelve a hacer recordándonos que las unidades SATA son a día de hoy una gran alternativa por precio y capacidad y mas aun cuando se acompañan de memorias de calidad y de una controladora que es un referente en este tipo de unidades.
Es evidente que en nuestras pruebas esta unidad queda lejos de sus competidores PCI Express, el interfaz es el que es, pero también nos ha mostrado una unidad que trabaja a bajas temperaturas, con consumos muy controlados y un rendimiento sostenido de gran calidad. Se completa con un formato y unas calidades de fabricación elevadas, incluyendo incluso el adaptador para zocalos de 9.5mm de alto y con una garantía de 5 años que es siempre algo de agradecer.
Es sin duda una de las mejore unidades SATA de 2.5” que he probado, aunque está claro que queda lejos de las alternativas actuales en otros formatos que son capaces de doblar en potencia de proceso y ser hasta seis veces más rápidas que esta unidad en transferencia secuencial.