Review Ratón Gaming Corsair Harpoon RGB Wireless
Hace poco más de un año Corsair comenzó una ambiciosa apuesta por lo inalámbrico lanzando nuevos periféricos gaming como ratones y teclados que prescindían de cables.
Ratones y teclados inalámbricos los ha habido desde hace bastantes años, sin embargo, en el ámbito gaming la mayoría de usuarios siempre ha preferido opciones con cables para conseguir las mejores latencias y tiempos de respuesta.
Ya con el Dark Core RGB SE y el K63 Wireless , Corsair demostró que podía crear versiones inalámbricas de sus ratones y teclados gaming sin pérdidas de rendimiento, aunque con un precio que, en ambos casos, superaba los 100 Euros.
El Corsair Harpoon RGB Wireless es un ratón que hereda toda esa tecnología inalámbrica de baja latencia de 2,4 GHz de Corsair pero con un precio mucho más contenido que lo sitúa ya en el rango de ratones gaming cableados.
Este ratón está dotado de un sensor PMW3325 de 10.000 DPI y cuenta con un triple sistema de conectividad: SlipStream de 2,4 GHz y alto rendimiento, Bluetooth y también USB con un ingenioso sistema de enganche.
- Sensor Óptico PMW3325
- 10.000 DPI de resolución máxima ajustable
- 1000 Hz (USB y Slipstream 2,4 GHz)
- 6 botones programables
- Interruptores principales Omron: 50 millones de pulsaciones
- Diseño diestro
- Tipo de agarre: Claw (garra)
- Conectividad USB
- Conectividad inalámbrica SLIPSTREAM 2,4 GHz
- Conectividad inalámbrica Bluetooth
- Iluminación RGB configurable
- Batería de litio recargable
- Autonomía Bluetooth: 60 horas sin RGB, 40 horas con RGB
- Autonomía Slipstream 2,4 GHz: 45 horas sin RGB, 30 horas con RGB
- Peso: 99 gramos.
- Compatible con iCUE.
Externamente el diseño del Corsair Harpoon RGB Wireless no se distingue de un ratón gaming cableado normal. La compañía ha escogido una forma redondeada y agradable al tacto con un diseño diestro que se adapta a la mano y que se orienta a los jugadores que sujetan el ratón en modo garra gracias a un diseño compacto. Aún así, se puede utilizar apoyando la palma sin ningún problema.
El ratón es negro en su totalidad con un acabado listo de plástico en la parte superior y rugoso en goma en los laterales para facilitar su agarre.
Tenemos acceso a seis botones, es decir, tres adicionales a los tres botones que la mayoría de ratón ya integran (clic izquierdo, clic derecho y rueda central con pulsador). Los tres adicionales están formados por dos botones en el lateral izquierdo para pulsar con el pulgar con las funciones avanzar y retroceder por defecto, y un tercer botón en la parte superior que permite cambiar la sensibilidad del dispositivo.
Este botón, además, cuenta con un LED RGB que nos sirve para indicar elementos como el modo de sensibilidad en el que estamos, el estado de la batería e incluso el modo de conectividad y estado de la conexión. Para ello puede cambiar de color y de modo de parpadeo para indicar distintas cosas con una única luz.
Aunque estos botones vienen con unas funciones predefinidas, los seis se pueden modificar al gusto o asociarle macros como veremos más adelante.
En la parte inferior del ratón nos encontramos con el sensor en la zona central, cuatro almohadillas deslizantes y un botón selector que permite cambiar entre los tres modos de conectividad: 2,4G para la conectividad inalámbrica de alto rendimiento slipstream, OFF para utilizarlo con cable, y la última posición del interruptor para el modo bluetooth.
En modo bluetooth el ratón funciona con cualquier dispositivo compatible. Si queremos utilizar Slipstream deberemos conectar al PC el adaptador USB que trae escondido el Harpoon RGB Wireless en una pequeña tapa situada en la parte inferior.
Resulta bastante ingenioso y llamativo el sistema de conexión USB del ratón. Generalmente los fabricantes suelen poner un micro USB para carga, algunos permiten utilizar el ratón por cable de manera normal pero, en muchos casos, el conector microUSB no es suficiente para sujetar firmemente el cable y ante movimientos bruscos se puede soltar. Para solucionar eso, Corsair ha diseñado un cable con un microUSB con una clavija que integra un sistema de raíles que se acopla al ratón y deja completamente fijo el cable.
De hecho, si no te fijas demasiado, al conectar el cable parece que no es un ratón inalámbrico en absoluto.
Aparte de la luz de los DPI y otras funciones que mencionamos, el Harpoon RGB Wireless también cuenta con el logo de Corsair iluminado mediante un LED RGB configurable mediante el software iCUE. El logo está situado justo donde se coloca la mano, por lo que durante su uso no se ve. Parece que el ansia por poner iluminación RGB a todo lo que lleve la coletilla "gaming", al menos en este caso, es un punto en contra ya que, a parte de su colocación, usar la iluminación RGB reduce considerablemente la autonomía de uso.
El peso del ratón es de 99 gramos, una cifra bastante contenida tratándose de un ratón inalámbrico que cuenta con su batería integrada y que permite movimientos fluidos que se requieren en juegos tipo FPS. Eso sí, no hay opción a configurar su peso ya que no se incluye un sistema de pesas adicional.
Corsair delega la tarea de configurar todos los aspectos del Harpoon RGB Wireless a su software iCUE, un software que ha ganado enteros con los años y que se ha convertido en una opción muy potente para personalizar todo tipo de periféricos y componentes de la marca.
Cuenta con un potente sistema de perfiles para configurar varios dispositivos y personalizable, además de permitir vincular perfiles a programas o juegos directamente. El nivel de personalización es tal que podemos incluso cambiar la imagen de fondo del programa según nuestros gustos.
iCUE es también el software de gestión del RGB, por lo que podremos configurar multitud de efectos y colores entre los distintos efectos predefinidos o crear los nuestros propios combinándolos.
Es posible, desde cualquiera de los menús, acceder al sistema de iluminación instantánea que permite cambiar el color de manera rápida entre una pequeña selección
Desde iCUE podremos también definir varios valores predeterminados para el nivel de sensibilidad (DPIs) del ratón. Tenemos 5 configuraciones posibles además de un modo Sniper que reduce la sensibilidad aún más para apuntar mejor en juegos FPS o, simplemente, cuando necesitemos más precisión en algún programa. Aunque el Harpoon no tiene botón sniper, podremos asociarlo manualmente a cualquiera de sus 6 botones.
Cada uno de los 5 niveles de DPI se puede configurar tanto en el valor de DPI como también en el color que mostrará el botón superior del ratón. De esta manera podremos saber en qué modo estamos simplemente mirando el color del LED. Además, si no necesitamos tantos modos, se pueden desactivar o hacer que el que queramos sea predeterminado.
iCUE incluye un potente sistema de macros y acciones. Desde este modo podremos hacer de todo, desde asignar el modo sniper a uno de los botones laterales hasta configurar una macro con múltiples opciones, retardos, pulsaciones continuas, desactivación de teclas, etc. Tanto de manera manual como grabando distintas acciones que realicemos con el propio teclado y el ratón
A nivel de rendimiento, es posible activar o desactivar mejoras de posición y el nivel de la velocidad del cursor.
Además, en la configuración del dispositivo es posible modificar la tasa de sondeo o polling rate (el número de veces por segundo que el ratón envía al procesador la posición del cursor). En modo bluetooth no es posible configurarlo porque el software no reconoce el ratón, pero tanto con cable como por conectividad de 2,4 GHz es posible variar entre 1000 Hz, 500 Hz, 250 Hz o 125 Hz.
En la siguiente sección medimos el rendimiento del ratón con distintas configuraciones.
Lo que hace especial al Corsair Harpoon RGB WiFi sobre otros ratones gaming es, sin duda, su sistema de triple conectividad. Podremos utilizarlo tanto con cable USB como con la tecnología inalámbrica SLIPSTREAM de 2,4 GHz y también como un ratón bluetooth.
La duda que asaltará a los amantes de los ratones por cable será si se puede conseguir el mismo rendimiento que se consigue con cable sin utilizar ningún tipo de conectividad física.
Este ratón tiene un polling rate o frecuencia de muestreo máxima de 1000 Hz / 1 ms, es decir, es capaz de enviar su posición 1000 veces cada segundo, un envío cada milisegundo. Aunque es posible limitarlo a 500, 250 y 150 Hz hemos realizado las pruebas a 1000 Hz que es su capacidad máxima para ver si hay pérdida al utilizarlo de manera inalámbrica.
Conectar el ratón mediante SLIPSTREAM de 2,4 GHz solo requiere conectar el dispositivo USB integrado y seleccionar ese modo en la palanca inferior del ratón. Para bluetooth no necesitaremos ningún USB y solo hay que añadirlo al PC (si este dispone de Bluetooth)
Como podemos ver en las pruebas, con el ratón conectado mediante cable se consigue una media de 1,04 ms muy cercano al milisegundo teórico.
Al realizar el test de manera inalámbrica con el modo SLIPSTREAM de 2,4 GHz conseguimos unos resultados idénticos, con 1,04 ms.
En modo bluetooth el Polling rate ya se queda por debajo de los 500 Hz con unos tiempos de 2,02 ms.
Hay que tener en cuenta que todos estos test se han realizado con un campo de visión abierto y libre entre el ratón y el receptor USB, hemos probado distancias entre 15 cm y 1 metro y los resultados son similares tanto con 2,4 GHz como con Bluetooth.
Sin embargo, si colocamos elementos entre el receptor USB y el ratón podemos hacer que se pierda señal y aparezca LAG, por eso es recomendable no colocar mesas o elementos entre el dongle USB y el ratón, al menos si queremos utilizarlo para juegos.
A la hora de jugar a juegos FPS donde los reflejos son cables, no hemos notado diferencia ninguna entre utilizar el Corsair Harpoon RGB Wireless mediante USB o mediante conectividad de 2,4 GHz. Con Bluetooth si que aparecía algún que otro retardo que no hacía la experiencia todo lo fluida que debería, pero esto es algo dentro de lo normal.
Sea como sea, con 2,4 GHz podemos olvidarnos de una vez por todas de los molestos cables. Eso sí, a cambio deberemos añadir una variable más a la ecuación que es la batería. Aún así, como se puede cargar mientras se usa, la única molestia que podremos sufrir es la de tener que conectar el cable USB cuando se nos acabe la batería.
Corsair promete una autonomía de 30 horas con iluminación RGB con Slipstream de 2,4 GHz y de 45 horas sin iluminación RGB. En nuestras pruebas, con iluminación RGB hemos conseguido algo más de 24 horas de autonomía, por lo que los valores son bastante acertados y dan para varios días de uso sin preocuparnos.
Cuando probamos el Corsair Dark Core RGB SE ya nos sorprendió el buen desempeño del sistema inalámbrico de 2,4 GHz de Corsair, un sistema que permitía prescindir de los cables y que no añadía latencias o retardos y que ofrecía la misma experiencia que un ratón conectado por cable. Sin embargo, ese modelo tenía un precio que superaba los 100 Euros, lo que lo alejaba de un gran número de consumidores que ve esa cantidad algo excesiva para adquirir un ratón.
Con este Harpoon RGB Wireless, Corsair nos ofrece la misma tecnología pero con un precio mucho más contenido de 59 Euros, una cantidad por la que podemos disfrutar de un ratón gaming que ofrece lo mejor de la conectividad por cable junto con lo mejor de la conectividad inalámbrica de alto rendimiento, además del extra y versatilidad que supone disponer también de bluetooth para utilizar con algún portátil o tablet.
La tecnología SlipStream de 2,4 Hz funciona realmente bien y hace que nos olvidemos de los cables, además, si alguna vez queremos utilizar el cable, el excelente sistema de anclaje nos permite utilizar el Harpoon RGB Wireless como si de un ratón con cable convencional se tratara, sin que el cable se mueva lo más mínimo.
Más allá de la tecnología de conexión, los 10.000 DPI son más que suficientes para cualquier usuario, de hecho lo habitual es moverse en cifras mucho menores (mis preferidas andan entre 1.500 y 2.000 DPI). Su diseño es muy cómodo y ligero, sobre todo teniendo en cuenta que cuenta con batería interna, y los botones son también cómodos y accesibles. Aún así, se echa de menos el boton de Sniper y quizás algún botón extra más.
Si bien el RGB del botón superior es muy útil para conocer el perfil de DPIs seleccionados, estado de la conexión o la batería, el logo RGB de la parte trasera es completamente prescindible en un ratón inalámbrico. Es cierto que parece que la moda actual dicta que todo "lo gaming" tiene que llevar iluminación multicolor, pero en este caso el RGB se encuentra tapado por la mano la mayor parte del tiempo y lo único que hace es consumir batería.
Por suerte, el Corsair Harpoon RGB Wireless permite configurar absolutamente todo, así que si queremos apagar la iluminación RGB, solo deberemos pulsar un botón. El Software iCUE es una solución muy potente y sencilla de usar, tanto para configurar cosas básicas como la iluminación o los DPI, como para crear complejas macros adaptadas a cada juego.
Con todo ello, posiblemente el Corsair Harpoon RGB Wireless sea uno de los ratones gaming inalámbricos con la mejor relación prestaciones/precio del mercado. Un modelo que ofrece un buen desempeño tanto por cable como de manera inalámbrica y que definitivamente es capaz de hacer que nos olvidemos de los cables a la hora de jugar