AMD Radeon RX 6900 XT Review
Durante las últimas semanas hemos probado tanto las versiones de referencia de AMD como algunas de las tarjetas personalizadas basadas en esta nueva arquitectura RDNA 2 de AMD que han conseguido al menos igualar en potencia gráfica a las propuestas de Nvidia con la generación Ampere en sus modelos de gama más alta.
La Radeon RX 6900 XT es de momento lo mejor que puede ofrecer AMD con su proceso de fabricación de 7nm FinFET fabricados en TSMC. Un proceso de fabricación con el que AMD se siente plenamente cómodo como ya hemos visto con las otras gráficas presentadas de la arquitectura Navi 21 y también con las últimas generaciones de procesadores AMD Ryzen que tan buenos resultados están dando a la marca.
Este modelo profundiza en el aprovechamiento de este proceso de fabricación y en sacar lo máximo, salvo sorpresa, que puede ofrecer esta nueva generación de tarjetas gráficas basadas en la arquitectura RDNA 2 de AMD. Esa es al menos la teoría y sobre el papel lo cierto es que la tarjeta pinta bien, como veremos ahora en nuestr review, también comprobaremos por nosotros mismos si del papel a la práctica esta tarjeta se merece el sustancial aumento de precio sobre la Radeon RX 6800 XT.
Esta segunda generación de la arquitectura RDNA de AMD vienen del mismo proceso de fabricación FinFET de 7nm del que ya disfrutaban las Radeon RX 5700 y Radeon RX 5700 XT, de hecho, usan también el mismo interfaz de comunicación, el PCI Express 4.0 estrenado con el RDNA.
Ahora AMD tiene mucha más experiencia en este proceso, de hecho, acaban de sorprender con mejoras importantes en los procesadores Zen3 con este mismo proceso de fabricación, así que esta generación saca mucho más partido del proceso con mejoras importantes que yo he definido como los tres pilares del RNDA 2.
La familia reunida, Radeon RX 6800, Radeon 6800 XT y Radeon 6900 XT.
Estos tres pilares en los que se fundamenta la arquitectura RDNA 2 de AMD son el aumento de unidades de cómputo, el aumento de la frecuencia de trabajo y la introducción de la Infinity Cache. En este análisis de mis compañeros podéis encontrar mucho más detalle sobre los cambios de arquitectura de esta generación, yo me centrare en los cambios fundamentales para poneros en situación de los resultados que encontrareis en este análisis.
El aumento de las unidades de computación del RDNA 2 permite no solo aumentar la capacidad de proceso de la tarjeta en técnicas clásicas de sombreado, sino que además introduce también unidades específicas para el RayTracing por cada unidad de cómputo, pero siempre dentro del estándar DXRT que Microsoft introdujo hace ya algún tiempo en el API DirectX 12 y que ya usan muchos juegos en el mercado. El aumento de unidades de computo (CU) es de un 30% en el modelo más básico de esta nueva generación y del doble en el modelo más potente de esta nueva gama.
El segundo pilar importante de mejora de rendimiento lo encontramos en la capacidad de estas tarjetas de desarrollar mayores frecuencias de trabajo en juego con consumos similares a los de la generación anterior, concretamente entre 250 y 300 vatios TDP. Podemos encontrar hasta 400MHz más de frecuencia turbo en algunos de los modelos con respecto a la generación anterior y esto se fundamenta, en buena medida, en las temperaturas que es capaz de soportar esta nueva arquitectura.
Esta generación de chips gráficos de AMD puede soportar temperaturas “T-junction”, antes de throttling, de hasta 110 grados centígrados. Ahora una matriz de sensores de temperatura permite conocer la temperatura de los diferentes puntos del encapsulado y forzar frecuencias hasta ahora imposibles. Este mejor control y aumento del soporte de temperaturas se traduce en mayores frecuencias sostenidas, de hasta 2200MHz en modo turbo, con una refrigeración activa más controlada y por lo tanto menos ruido general.
El tercer pilar de esta arquitectura lo encontramos en la tecnología AMD Infinity Cache que son 128MB de memoria ultrarrápida que se han instalado en la GPU para maximizar el ancho de banda en operaciones repetitivas dentro de la tarjeta. Funciona del mismo modo que la cache de tercer nivel de los procesadores más modernos y su gran capacidad permite multiplicar por 3 veces el ancho de banda efectivo de la tarjeta, que ahora detallaremos en nuestro análisis del modelo de referencia.
Estos tres pilares fundamentales hacen que toda esta nueva gama alta de AMD, desde la Radeon RX 6800 hasta la Radeon RX 6900 XT, pasando por la Radeon RX 6800 XT, permitan juego 4k y hasta juego 2k con funcionalidad RTX activa.
La Radeon RX 6900 XT no es una tarjeta muy diferente a sus hermanas de la gama Radeon RX 6800, de hecho, tiene el mismo tamaño y disipador de la Radeon RX 6800 XT (en el modelo de referencia de AMD, claro), y el mismo consumo TDP, y las mismas frecuencias de trabajo y la misma conectividad.
La gran diferencia entre este modelo y las de gama más baja, que tampoco es que sean muy bajas de gama, ni baratas, es que saca el resto de todo el poder de computación de las Navi 21. Las unidades de computación pasan a 80, desde las 72, así como las unidades de RayTracing que también aumentan hasta las 80 unidades.
El nuevo de unidades de sombreado también aumenta, en misma relaciona las unidades de computación, desde las 4608 unidades hasta las 5120 unidades. Las frecuencias siguen siendo las mismas, 2250MHz en modo Boost, con tres perfiles de funcionamiento accesibles desde el Radeon Adrenaline que nos permitirán escoger ajustes rápidos que van desde un modo silencioso a otro “rage” donde podemos ver picos en este modelo de hasta 2300MHz.
Esta tarjeta mantiene el TDP, de 300w, también el tamaño de VRAM con 16GB de memoria GDDR6 en un bus de 256-Bit capaz de generar hasta 512GBps de ancho de banda que se complementan con los 128MB de Infinity Cache que consigue que el bus de datos tenga hasta 3.5 veces más de rendimiento en operaciones cacheadas.
La Radeon RX 6900 XT también usa un bus PCI Express 4.0 y con la arquitectura AMD adecuada (Procesadores Ryzen 5000 y chipsets de quinta generación PCI Express 4.0) y la bios de placa base adecuada, acceso a la tecnología Smart Memory Access que permite aumentar el BAR de uso de memoria del bus hacia la GPU desde los 256MB habituales hasta todo la VRAM completa de la tarjeta lo que también aumenta el rendimiento del interfaz logrando otro extra de rendimiento en la tarjeta sobre todo en resoluciones bajas.
Se alimenta mediante dos conectores PEG de 8 contactos por lo que tenemos un total disponible de 450w para alimentar la tarjeta. Son 150w por conector y 150w extra del conector PCI Express 4.0 de 16x. AMD recomienda una fuente de al menos 850w para mover esta tarjeta gráfica con el resto del hardware que se espera para una tarjeta de gama alta.
Hay otros números que aumentan con el aumento de unidades de computación, pasamos a las 320 unidades de texturización, frente a las 288 unidades de texturización de la Radeon RX 6800 XT, se mantienen las 128 unidades ROP y su potencia de cálculo aumenta hasta los 46 TFlops en precisión simple y hasta los 23 TFlops en precisión doble.
La conectividad es de última generación con dos puertos Displayport 1.4 con resolución 8k, 1 conector HDMI 2.1 VRR (Variable Refresh Rate) y un puerto USB-C con funcionalidad completa que incluye soporte Displayport Alternate Mode (1.4), USB 3.1 y USB-C PD con hasta 30w de potencia de carga. Este conector nos permitirá dar vida a los monitores Freesync de última generación y también a sistemas de VR HMD con datos, vídeo y alimentación mediante un solo cable USB-C.
La Radeon RX 6900 XT usa exactamente el mismo diseño de la Radeon RX 6800 XT y es lógico puesto que ambos modelos comparten el mismo desempeño a nivel de consumo y respuesta térmica. Se trata de una tarjeta de 120mm de alto, 267mm de largo y 2.5 slots de ancho que la hace sensiblemente más compacta que la otra alternativa de gama alta, la GeForce RTX 3090, que alcanza los 320mm de largo y tres slots de grosor.
Los 300w TDP de esta tarjeta están gestionados por un disipador de cámara de vapor de grandes dimensiones que se refrigeran mediante tres ventiladores axiales de velocidad variable que además tienen modo de parada completa cuando la tarjeta esta por debajo de los 60 grados, que es su temperatura de reposo.
La Radeon RX 6800 es algo más estrecha, pero la Radeon RX 6800 XT y la Radeon 6900 XT son "heramanas gemelas".
En el diseño de esta tarjeta, como en el resto de la gama, AMD ha utilizado un PCB de 14 capas donde encontramos 16 fases de alimentación para la GPU. El diseño incluye thermalpads de alta transferencia de calor para MosFETs y memorias, además de una chapa de intercambio basada en grafito.
La tarjeta esta diseñada para expulsar el aire por el lateral, de hecho, no hay rejilla frontal, lo que nos obligará a mejorar la ventilación dentro del chasis del PC pero que es perfectamente compatible con un montaje de múltiples tarjetas en el mismo ordenador. Hay que pensar que este modelo será también una buena alternativa, por su potencia de proceso, para profesionales que quieran sustituir modelos antiguos, menos potentes, como la Radeon VII para tareas profesionales.
El diseño es bastante más elaborado que modelos del paso, como las Radeon RX 5700, mucho más silencioso y eficiente, con un comportamiento general que incluso hace sombra a los mejores modelos personalizados de los fabricantes más afamados por sus soluciones gráficas potentes y silenciosas.
La sorpresa, como ya predije en mi artículo de la Radeon RX 6800 XT, y prometo que no tenía ninguna pista al respecto, viene de la mano de una nueva aplicación que AMD pondrá en manos del usuario con el que se puede personalizar la iluminación del logo lateral de Radeon, que por defecto se ilumina en el rojo clásico de la marca. Ahora lo podremos personalizar desde Windows. De momento no ofrece muchos efectos, el más llamativo el modo MORSE, donde podemos configurar mensajes personalizados que serán reproducidos en parpadeos codificados en MORSE.
Ya tuvimos una gran experiencia con el desempeño del modelo de referencia de la Radeon RX 6800 XT. Es un diseño de tarjeta que combina un buen margen de frecuencia, que la tarjeta aprovecha por encima de sus propias especificaciones, con un buen comportamiento térmico y sonoro. No he hemos encontrado en ella un desempeño muy diferente, con algo más de calor, pero ciertamente cercano a su hermana pequeña, lo que parece sugerir que el aumento de unidades de computo no afecta mucho al diseño, es más cosa de frecuencias sostenidas.
Hemos visto la misma mejora que en su hermana pequeña, con 2350MHz de pico de frecuencia sosteniendo bien las frecuencias de Boost en juegos, rondando los 2200MHz, generando un rendimiento extraordinario y diría que casi inesperado, aunque AMD lleve ya semanas presumiendo de su alternativa a la poderosa GeForce RTX 3090.
Las temperaturas de trabajo son también las esperadas con temperatura global estabilizada sobre los 70 grados, con temperaturas de punto caliente de en torno a los 86 grados, solo un poco más que su hermana de formato, la Radeon RX 6800 XT, que nos dio una media de 85 grados. Los ventiladores se mantienen también en los 1400-1450rpm en estrés lo que no supone más que unos 35-36dBA de ruido generado por la tarjeta. Además, nos deja un buen margen para overclocking.
Temperatura en reposo
Temperatura en carga
En el caso de la Radeon RX 6900 XT vemos también la misma mejora de frecuencias gracias al aumento de refrigeración y TDP disponible que vimos en la Radeon RX 6800 XT, a la hora de la verdad son tarjetas muy parecidas seguramente por sus frecuencias de trabajo compartidas. Esto nos ha llevado a resultados muy similares con aumentos de frecuencia, sin necesidad de tocar voltajes, de hasta 2500MHZ en pico más de 2350MHz estables en juegos, lo que se traduce en una mejora de rendimiento, sobre sus propios resultados, en torno al 4% de media.
No es mucho, sin duda, pero la tarjeta tiene sus temperaturas de trabajo muy establecidas, mucho más conservadoras que los 110 grados de los que habla AMD en sus especificaciones, lo que hace que el rendimiento general no aumente mucho, por suerte tampoco lo hace el ruido, que se mantiene siempre por debajo de los 40dBA en nuestras pruebas. Eso es comportamiento normal, los ventiladores pueden soportan frecuencias de 3000rpm donde el ruido supera los 55dBA, por suerte no tendremos que jugar a estas frecuencias salvo que nuestras condiciones ambientales sean realmente adversas o hayamos diseñado mal la ventilación de nuestro PC (Nosotros siempre hacemos las pruebas de nuestras gráficas montadas en cajas normales, como las que puede tener cualquiera de vosotros en casa).
Máquina de pruebas:
- Placa base: Gigabyte Aorus Master X570
- Procesador: AMD Ryzen 3950X
- Memoria: 16GB DDR4 3600
- Fuente: Seasonic Connect 750w
- Disco duro: Corsair MP600
Para conocer las prestaciones de esta tarjeta con algunos de sus nuevos y no tan nuevos trucos hemos cogido algunos juegos concretos capaces de aprovechar estas prestaciones y hemos hecho una breve comparativa de resultados. La mejora del Boost ya la conocíamos, pero ahora tenemos tambien la opción de usar el Ray Tracing en algunos juegos, con muy buenos resultados hasta 1440p de resolución y tambien hemos podido comprobar la ligera pero efectiva mejora de rendimiento usando el modo de acceso completo a la memoria a través de PCI Express 4.0. En estas pruebas podemos ver una mejora de en torno al 3-4% dependiendo de la resolución con respecto a la Radeon RX 6800 XT, no mucho teniendo en cuenta la diferencia de precio.
Ashes of the Singularity (DX12) 1080
DOOM (Vulkan) ultra 1080
Halo Wars 2 (DX12) ultra 1080
Ghost Recon Wildlands (DX11) ultra 1080
Total War: Warhammer (DX12) ultra 1080
Battlefield 1 (DX12) ultra 1080
StarWars BattleFront 2 ultra (DX12) ultra 1080
Battlefield V (DX12) ultra 1080
Doom Eternal ultra 1080
Flight Simulator Ultra 1080
Ashes of the Singularity (DX12) 1440
DOOM (Vulkan) ultra 1440
Halo Wars 2 (DX12) ultra 1440
Ghost Recon Wildlands (DX11) ultra 1440
Total War: Warhammer (DX12) ultra 1440
Battlefield 1 (DX12) ultra 1440
StarWars BattleFront 2 ultra (DX12) ultra 1440
Battlefield V (DX12) ultra 1440
Doom Eternal ultra 1440
Fight Simulator Ultra 1440
Ashes of the Singularity (DX12) 2160
DOOM (Vulkan) ultra 2160
Halo Wars 2 (DX12) ultra 2160
Ghost Recon Wildlands (DX11) ultra 2160
Total War: Warhammer (DX12) ultra 2160
Battlefield 1 (DX12) ultra 2160
StarWars BattleFront 2 ultra (DX12) ultra 2160
Battlefield V (DX12) ultra 2160
Doom Eternal ultra 2160
Fight Simulator Ultra 2160
3DMark Firestrike
3DMark Firestrike Ultra
VRMark Orange Room
VRMark Cian Room
Gameplay Doom Eternal 4k en calidad Ultra:
La Radeon RX 6900 XT es una tarjeta extraordinaria en rendimiento que está a la altura de la GeForce RTX 3090, pero por otro lado tiene las mismas carencias que el modelo de Nvidia. Entiendo que ambas son modelos exclusivos que buscan al cliente más exigente que no le importa pagar un extra importantes para tener esa mejora de FPS en cualquier juego y cualquier resolución.
Ahora es cuando tenemos que hacer nuestra propia valoración si queremos pagar esos 240 Euros más que cuesta este modelo de referencia con respecto a otros modelos de referencia de la Radeon RX 6800 XT. Bueno, eso si consigues encontrar alguna a estas alturas de la historia. Se como sea a mi me parece mucho pagar, aunque por otro lado está claro que de tu a tu con respecto a la RTX 3090 es tarjeta es sensiblemente superior, aunque no lo sea en todos los juegos.
Comparada con la tarjeta a la que intenta destronar esta tarjeta es más compacta, mucho más económica, consume menos, tiene una conectividad más variada y a la hora de la verdad se defiende mejor que bien de este importante contrincante. Ahora si que vemos una diferencia importante de prestaciones-precio con respecto a la competencia, la Radeon RX 6900 XT es la verdadera competencia de Nvidia, el problema es que no se si realmente compensa con respecto a la Radeon RX 6900 XT, aunque también es verdad que esta misma pregunta nos la podemos hacer entre la GeForce RTX 3080 y la RTX 3090.