MSI MAG CH130 X Review
Tras unos días probándola, ya tenemos lista la review de la MSI MAG CH130 X, la nueva silla gaming de la compañía con un diseño renovado, ahora con un color negro más elegante y discreto, pero sin renunciar a esas líneas "racing" que comparten muchas de estas sillas destinadas a jugadores.
La MSI MAG CH130 X se sustenta sobre una estructura de acero al carbono y cuenta con un asiento de cuero de PVC con relleno de espuma de alta densidad, además de contar con altura, inclinación y respaldo ajustables y cojines tanto para las lumbares como para las cervicales.
Características técnicas de la silla gaming MSI MAG CH130 X
- Color negro.
- Material de la silla y cojines: Cuero de PVC.
- Relleno de Espuma de alta densidad: 45-48 kg/m³.
- Ruedas de PU (Poliuretano) de 60 mm.
- Base y estructura de acero al carbono.
- Incluye cojines para lumbares y cervicales.
- Pistón de gas de clase 4.
- Mecanismo de inclinación del asiento de 0 a 15 grados con bloqueo por palanca.
- Inclinación del respaldo de 90º a 150º con bloqueo por palanca.
- Altura del asiento: de 45,5 cm a 53,5 cm.
- Medidas del asiento: 52 x 57 cm.
- Altura del respaldo: 87 cm.
- Reposabrazos acolchados con ajustes 2D de 25 x 9 mm.
- Altura del reposabrazos: de 77,6 cm a 84,6 cm.
- Peso de la silla: 21,9 kg (paquete 25,2 kg).
- Medidas: 69 x 70 x 140 mm (paquete 90 x 68 x 34.5 cm).
- Precio: 329 euros.
Como es habitual en este tipo de mobiliario, la MSI MAG CH130 X viene prácticamente desmontada y es necesario montar pieza a pieza para poder tenerla lista para utilizar. Lo único que viene ya montado y atornillado, que no siempre ocurre en sillas, son los reposabrazos.
En total, por tanto, tenemos la base de acero, las ruedas, el pistón, el soporte para inclinación, respaldo y asiento, además de accesorios como los cojines, herramientas y embellecedores. Además, hay un manual paso a paso con el montaje.
Las ruedas de PU se enganchan a presión en la base, tienen dos arandelas para fijarse a ella, además de un tope de plástico para evitar que se puedan salir.
Hay que hacer algo de presión manual para poder meterlas hasta el fondo y que queden fijas.
Una vez tenemos las cinco ruedas colocadas, le toca el turno al pistón de gas, que se coloca en el centro de la base.
Cuenta con un embellecedor de plástico que se le coloca alrededor, es bastante básico y no llega a cubrir toda el recorrido del pistón en su posición más larga.
La base del asiento viene, como decíamos antes, con los reposabrazos ya fijados. Podemos ver que hay cierto margen para regular la distancia lateral de los mismos, pero tendríamos que aflojar los tres tornillos para poder moverlo y luego apretarlo.
Como curiosidad, MSI ha decidido premontar los tornillos para fijar la estructura que fijará el sillón al pistón, por lo que antes de continuar tendremos que desatornillarlos previamente.
Para ello se incluyen dos llaves Allen bastante grandes y robustas, además de un tornillo de repuesto de tres tipos distintos.
Mediante los cuatro tornillos que previamente hemos sacado de la base, podemos fijar ya la pieza con la palanca que permitirá elevar o bajar la silla y controlar la inclinación.
Antes de continuar, paramos un momento para comentar que las instrucciones tienen partes erróneas, el más grave es que se indica que se coloque la base de esta manera. Si seguimos esa instrucción, estaremos montando el mecanismo al revés, por lo que al inclinar la silla nos iremos hacia delante y tendremos que desmontar todo, como nos ha ocurrido, con el consiguiente tiempo extra que necesitamos para el montaje.
Una vez montado el asiento, nos queda fijar el respaldo. De nuevo, tenemos tornillos preinstalados tanto para los embellecedores como para fijar el propio respaldo, así que nos toca retirarlos antes.
La fijación al respaldo se realiza mediante dos grandes tornillos que entran en la estructura a rosca.
Luego ponemos los embellecedores encima. Son de plástico, de un acabado bastante básico, similar al que suelen utilizar gran parte de este tipo de sillas. De hecho, si nos fijamos, son los mismos que pudimos ver en la review de la Drift DR550.
Aunque la forma es la misma y el material también, en el caso de este modelo de MSI, los tapones para los tornillos disimulan mejor el agujero y quedan más discretos.
En ese lado derecho tenemos una palanca con mango de plástico que desbloquea el respaldo permitiendo su inclinación hacia atrás o su recuperación hacia delante.
Al contrario que otras sillas, la MSI MAG CH130 X tiene una única palanca encargada de liberar el pistón para subir o bajar y también para liberar el mecanismo de balanceo que permite inclinar el asiento hacia delante o hacia atrás (moviendo la palanca hacia dentro o hacia fuera).
En la parte inferior hay un tercer control formado por una rueda que regula la dureza del mecanismo de balanceo.
Los reposabrazos permiten solamente dos ajustes, pocas opciones si comparamos con los 4 que ofrecen sillas más económicas. Básicamente, pulsndo esa palanca del lateral podemos subir o bajar la altura.
Si deslizamos hacia delante o hacia atrás el reposabrazos, podemos regular su posición en esa dirección haciendo fuerza, aunque hay un tornillo con el que podemos ajustar la presión necesaria para iniciar el movimiento.
Una vez montada, podemos ver que el diseño de la MSI MAG CH130 X combina una forma similar a la de otras sillas gaming basadas en asientos de coches de carreras, con esos grandes agujeros, pero con un color negro con pequeños toques blancos en el escudo de MSI y en las costuras que le dan un toque más discreto y elegante, alejado de diseños de colorines más estridentes.
Aun así, esos agujeros y el logo, junto con la forma, dejan claro que se trata de una silla gaming y no de una silla para usar en una oficina convencional por ejemplo.
En la parte trasera se repite el logo del dragón de MSI junto con las letras que forman la serie MAG.
La MSI MAG CH130 X tiene detalles de terciopelo en los bordes del asiento y también en la base. Es un material más agradable al tacto que el resto del cuero sintético de PVC, y está colocado en las zonas donde se suelen poner más las manos, ya sea para ajustar la posición o para mover la silla antes de sentarnos.
La polipiel o cuero sintético tiene buenos acabados, no hay bordes sin rematar y la costura blanca de la da un toque distintivo. Además, tiene ese olor a "coche nuevo" que tanto suele gustar.
MSI incluye también dos cojines, uno para la zona lumbar, que se fija con dos tiras elásticas que pasan por los agujeros y por la parte inferior del respaldo, y otro para la zona cervical que se fija a la zona superior con una cinta elástica.
Ambos cojines tienen un acabado que simula fibra de carbono. El de la cabeza es más liso, mientras que el de las lumbares tiene el logo del dragón de MSI integrado.
Generalmente, cuando probamos una silla gaming, gran parte de los mecanismos y diseño general son muy similares y posiblemente incluso se hayan fabricado en el mismo lugar. Los diseños suelen ser parecidos y los cambio que introduce cada marca suelen estar orientados hacia los materiales, relleno y acabados, tipos de ruedas y la adición o no de ciertos mecanismos.
La MSI MAG CH130 X tiene un diseño gaming, de eso no hay duda, pero el uso del negro como color principal sin demasiadas florituras ni colores chillones hace que sea algo más discreta de lo habitual, sin que eso signifique que, al final, no puede disimular que es una silla gaming.
El cuero sintético de PVC está muy bien rematado y le da un toque premium que, aunque no llega al nivel del cuero real, permite uno precio mucho más contenido.
En cuanto a la comodidad, MSI utiliza relleno de espuma de alta densidad de 45-48 kg/m³, es más blando que, por ejemplo, los 65 kg/m³ de la Drift DR550 y se nota. Al sentarse, la CH310 X es más acolchada y cómoda, sobre todo en la zona del asiento.
Los cojines tienen distinto relleno, el de las cervicales para la cabeza y cuello es muy mullido y cómodo, el de las lumbares sin embargo, es más duro y compacto para reforzar esa zona.
El uso de uno u otro, o de los dos, es una elección personal de cada uno. Personalmente suelo tener siempre colocado el de la cabeza, y el de las lumbares lo voy alternando.
En cuanto a los ajustes del asiento, tenemos los típicos de este tipo de sillas. Altura, inclinación del resplado y balanceo.
La altura tiene un buen rango con un recorrido que va desde los 45,5 cm en su posición más baja a los 53,5 cm de la posición más alta. La inclinación del balanceo del sillón puede regularse o bloquearse al gusto.
El respaldo permite también un amplio margen, aunque no se llega a poner en horizontal (ni es algo que realmente vaya a ser necesario)
Donde encontramos una carencia es en los reposabrazos debido a que solamente se permite regular su altura y el desplazamiento hacia delante y hacia atrás. No hay posibilidad de regular el ángulo del reposabrazos ni tampoco la distancia lateral (al menos no sin quitar tornillos de la base para reubicar toda la pieza). Es una decisión un tanto extraña teniendo en cuenta que incluso sillas más baratas suelen integrar controles de 4 direcciones en esta parte.
La columna interior es de metal, pero la pieza que desliza y la estructura del reposabrazos es de plástico junto a goma en la zona superior.
El precio de 329 euros de la MSI MAG CH130 X la coloca a la par que la noblechairs Epic por ejemplo, una silla con al que comparte un diseño muy similar, aunque en el caso de la MSI, como ya hemos comentado, los reposabrazos tan solo permiten subir y bajar, y desplazamiento hacia delante y hacia atrás. Resulta llamativa esta falta de ajustes, cuando sillas más baratas suelen incorporar mecanismos 4D que añaden la posibilidad de mover el reposabrazos lateralmente e incluso variar el ángulo. Aun así, no son mecanismos tan imprescindibles como la altura.
En cuanto a comodidad, la MAG CH130 X destaca por su espuma de alta densidad, pero con unos valores no demasiados altos que rondan los 45 kg/m³ y que hacen que el asiento sea bastante mullido y cómodo. Además, la inclusión de los cojines para lumbares y cervicales junto con los ajustes de inclinación, altura y balanceo hacen que sea sencillo ajustarla a cada usuario.
El montaje, como suele ocurrir con este tipo de sillas, lleva su tiempo y es un poco engorroso, además, el hecho de tener los tornillos ya montados y tener que extraerlos antes junto con unas instrucciones de montaje con esquemas incorrectos en algunas fases, hace que tardemos algo más de lo esperado en montarla.
La MSI MAG CH130 X puede presumir de unos acabados de calidad en los cojines y en el propio sillón. Quizás se ha abusado demasiado del plástico en los embellecedores y en los reposabrazos, pero son estrategias habituales en este mercado cuando se busca un precio más asequible como es el caso. Además, a estos buenos acabados de la polipiel y de los cojines, se le suma un diseño gaming, pero con un color negro y costuras en blanco que la convierten en una opción ideal para los que buscan una silla gaming cómoda pero también elegante y alejada de ciertas estridencias.