QNAP TS-364 Review

En esta Review del QNAP TS-364 descubriremos un NAS dotado de un procesador de arquitectura x86 como es el Intel Celeron N5105 de 4 núcleos, y acompañado de 3 bahías SATA III de 3,5". Este modelo destaca por ofrecer una solución compacta, pero con posibilidades de expansión gracias al uso de dos slots de memoria SO-DIMM para la RAM, además de  sus dos puertos M.2 NVMe PCIe 3.0 x2 para SSDs que pueden funcionar como unidades convencionales o también como caché y sistema de aprovisionamiento.

Todo ello acompañado por el sistema operativo QNAP QTS 5 y todas las funcionalidades de gestión de archivos, servidores y multimedia que podemos esperar de un NAS actual.

Características técnicas del QNAP TS-364

  • CPU: Intel Celeron N5105 4 núcleos y 4 hilos hasta  2.9 GHz
  • Procesadores gráficos:  Intel® UHD Graphics
  • Motor de cifrado: (AES-NI)
  • RAM instalada: 4 GB SODIMM DDR4 (1 x 4 GB)
  • RAM Máximo: 16 GB (2 módulos de 8 GB)
  • Memoria flash: 5 GB 
  • Bahías: 3 unidades SATA de 3,5" a 6Gb/s, 3Gb/s
  • M.2 Slots: 2 x M.2 2280 PCIe Gen 3 x2 slots
  • 1 x Puerto 2,5 GbE (2,5G/1G/100M)  
  • 1 x Puerto USB-A 3.0   
  • 2 x Puerto USB-A 3.1 (3.2 Gen 2 (10 Gbps))   
  • 1 x HDMI 1.4b (hasta 4096 x 2160 a 30 Hz)
  • Botones   Encendido, Reinicio, copia USB
  • Dimensiones: 142 × 150 × 260 mm
  • Peso:   1,64 kg
  • Alimentación:  Adaptador de 65W, 100 - 240 V
  • Consumo de energía típico (todas las bahías completas): 32.8 W
  • 1 x Ventilador  de 92 mm, 12 V de CC
  • Precio:  509 euros

 

El QNAP TS-364 es un NAS en formato torre convencional, es un formato que podemos ver en la mayoría de NAS domésticos y también en los orientados a pequeños negocios. Este modelo tiene un diseño con acabado en blanco y un frontal dotado de numerosos LED de estado (8 en total), además de un botón de apagado y otro botón que permite copiar contenidos directamente desde un USB.

El color blanco se complementa con el gris del logo de QNAP y de los dos botones. Suele ser el esquema habitual en este tipo de dispositivos de esta gama.

En la parte trasera nos encontramos con la salida de aire del ventilador y la mayoría de conectores físicos. Además del pequeño botón de reset, tenemos dos USB-A de tipo 3.1 (3.2 gen 2 de 10 Gbps), un HDMI, la entrada de corriente y un RJ45 con conectividad de 2,5 GbE, dando un salto considerable desde el típico Gbps que encontramos en la mayoría de NAS domésticos.

El USB del frontal es USB 3.0 de 5 Gbps, por lo que si queremos aprovechar la velocidad de dispositivos compatibles con USB de 10 Gbps tendremos que utilizar los traseros. A día de hoy deberíamos esperar que todos los USB fueran 3.1 o superiores.

El QNAP TS-364 tiene tres tornillos para poder acceder al interior, pero son unos tornillos un poco extraños que se quedan a medias en funcionalidad. A pesar de utilizar tornillos de estrella en el resto del equipo, estos tres tornillos tienen cabezal plano, pero muy ancho, ideal para abrirlos con una moneda. Además, son rugosos para permitir apretarlos y aflojarlos a mano, pero son demasiado pequeños como para hacerlo fácilmente.

En cualquier caso, una vez los conseguimos abrir, tenemos el módulo de las tres bahías para discos duros de 3,5 pulgadas (compatible también con unidades de 2,5" con adaptadores)

Cada bandeja de plástico se extrae pulsando una de las palancas frontales. Son bastante endebles, por lo que QNAP les integra esa barra cilíndrica para darle rigidez cuando no hay ningún disco duro conectado.

Los discos duros se colocan directamente con los cuatro pequeños salientes metálicos sin necesidad de tornillos. Cada saliente tiene una goma para evitar vibraciones, pero son insuficientes y hacen que el QNAP TS-364 sea un NAS bastante ruidoso y propenso a las vibraciones de los discos duros.

Mirando entre las bahías nos encontramos con la placa principal, un disipador para el Celeron N5101 y dos slots SO-DIMM. De serie tenemos solamente 4 GB de memoria RAM DDR4-2666 en un solo módulo, pero es ampliable hasta 16 GB distribuidos en dos módulos DDR4 de 2.666 MHz.

Se agradece la posibilidad de ampliar la RAM en un NAS como este, ya que podemos mejorar su desempeño en ciertas tareas sin tener que adquirir otro NAS.

Otro detalle que hace a este NAS bastante especial es que ofrece dos puertos M.2 PCIe 3.0 x2 para conectar SSD u otros dispositivos compatibles. Esto permite aprovechar la mayor velocidad de esta interfaz para montar un sistema de caché SSD, aprovisionamiento SSD o directamente usar SSD como almacenamiento con las ventajas que eso supone. 

Nosotros hemos colocado un SSD Samsung 960 EVO, que supera con creces el ancho de banda disponible en el puerto M.2 PCIe 3.0 x2.

Otro detalle muy cómodo es el sistema de anclaje. Por lo general, los SSD y tarjetas M.2 se fijan a las placas mediante un tornillo, pero QNAP ha integrado un sistema de palanca que recuerda al de los puertos PCI Express X16 para facilitar la colocación y desenganche de la unidad. En un dispositivo como este no parece que el intercambio de SSD vaya a ser una tarea común, pero en caso de necesitar un cambio, esta pestaña nos facilitará mucho la vida.

 

El sistema operativo de este NAS no es otro que el mítico QTS de QNAP. Durante este análisis ya vamos por la versión 5.0.0 (5.0.0.1986 para ser más exactos). QTS ha evolucionado mucho, y si al principio solía estar un poco por detrás del DSM de Synology, en las últimas versiones sus capacidades y aplicaciones se han multiplicado, al mismo tiempo que su uso se ha simplificado y es mucho más sencilla la configuración.

En este QNAP TS-364 se nos permite iniciar la instalación en la nube mediante un enlace, tan solo deberemos conectar el NAS a una red con Internet, y mediante un código QR o un enlace con clave específica que sale en luna pegatina lateral, comenzar la configuración desde cualquier lugar.

Sin embargo, al menos en nuestro caso, ha sido imposible. Aunque el equipo estaba conectado a la red, con una IP asignada y conectividad a Internet, QNAP Cloud solo mostraba errores, así que nuestro gozo en un pozo. Por suerte, seguimos teniendo la opción tradicional de entrar directamente por http a la ip local del router.

Si no queremos ir a la configuración del router para verla, QNAP ofrece el software gratuito QNAP Qfinder, desde el que se puede escanear la red para encontrar NAS de la marca, e incluso configurar algunos valores de red y acceso.

 

Una vez dentro, la interfaz de QTS ahora es más agradable, con iconos más grandes y un sistema que recuerda al de un SO de un ordenador.

El catálogo de aplicaciones propias de QNAP es enorme y podemos acceder directamente desde el AppCenter, donde las encontraremos clasificadas por categoría. Tenemos de todo, desde cosas básicas como un despertador, hasta sistemas de domótica, descargas, virtualización (no hay que olvidar que tenemos arquitectura x86), bases de datos, servidores. Las posibilidades son muy amplias y permiten que, tanto usuarios que solo quieran usar el NAS para centralizar archivos, como aquellos que vayan a crear distintos servidores, puedan acceder fácilmente a todo.

Aprovechando los slots M.2 con SSD, es posible hacer uso también de la tecnología TPU de Google para reconocimiento de imágenes. Esto nos permite aplicar inteligencia artificial para reconocer imágenes y facilitar la clasificación, pero sin tener que enviar nuestras fotos a los servidores de Google, el propio NAS se encarga a nivel local.

Para ello hay que instalar la app QuMagie, que es encarga de añadir las aplicaciones de AI Core y demás relacionadas, para aplicar reconocimiento facial y de objetos al sistema de clasificación de fotografías.

Precisamente, la potencia de búsqueda que tiene Google Fotos es una de las razones por la que sigo utilizándolo aún con la limitación de espacio y las restricciones que ha aplicado la compañía, pero gracias a esta tecnología de QNAP, es posible sustituirlo al 100% sin necesidad de pagar una suscripción ni regalar tus fotos a Google.

Hay algunos detalles por pulir, como la traducción de los objetos y escenas reconocidas, pero su funcionamiento es muy bueno en general.

Destacan también las aplicaciones de HybridDesk Station, un conjunto de aplicaciones para el sistema que permite convertir al QNAP TS-364 en un pequeño ordenador independiente, ya que aprovechando la salida HDMI y los USB para un ratón y teclado, podemos tener navegadores como Chrome o Firefox, apps de ofimática como LibreOffice e incluso acceso a Facebook.

El centro neurálgico de la configuración de QTS 5.0 es el ControlPanel, desde ahí tenemos acceso a todas las funciones más importantes del NAS, desde la configuración de discos, volúmenes, usuarios, carpetas compartidas, hasta algunos de los servidores básicos como el Web, acceso remoto y energía.

Una de las posibilidades que brinda este NAS al contar con dos M.2 es que podemos utilizar SSD como si se tratada de unidades convencionales de almacenamiento, pero más interesante es poder utilizarlos como caché para el resto de discos.

Si partimos de la base de que un NAS es un dispositivo centrado en ofrecer ciertas capacidades de almacenamiento, utilizar un SSD (tradicionalmente con menos capacidad debido a su coste por GB) a modo de caché nos permite aprovechar en cierto modo las altas velocidades de los SSD sin renunciar a las altas capacidades de los discos duros.

Desde el panel de configuración podemos crear caché SSD directamente de manera sencilla.

Es posible crear caché de lectura, de escritura o de ambas. Naturalmente, si solo tenemos un SSD y lo utilizamos a modo de caché de escritura, si se va la luz o hay algún fallo, podemos perder datos. El propio QTS ya se encarga de avisarnos, e incluso nos pide una contraseña para confirmar que corremos con los riesgos de crear una caché de escritura con un solo SSD. La solución para evitar esto sería montar un RAID 1 de SSD a modo de caché de escritura, algo que también es posible al tener dos puertos M.2.

También podemos configurar un porcentaje de la capacidad del SSD para sobreaprovisionamiento, utilizado para conseguir mejoras de rendimiento en escritura.

 

Para encontrar el porcentaje óptimo, es posible crear una prueba (tarda bastante tiempo) en la que se analiza el SSD en cuestión y se muestran resultados dependiendo de la capacidad utilizada.

Adicionalmente al sistema de caché, podemos realizar pruebas de velocidad de los discos físicos conectados al sistema para poder conocer sus capacidades. Podemos ver que los discos duros utilizados (Seagate) consiguen unas velocidades que rondan los 180 MB/s, mientras que el SSD se queda en 1,66 GB/s (limitado por el PCIe 3.0 x2)

 

Hemos realizado distintas pruebas de rendimiento de transferencia y acceso a los datos desde todas las interfaces que permite el QNAP TS-364, incluyendo la conexión de red a 1 Gbps y a 2,5 Gbps, y también los USB 3.0 y USB 3.1. Cada prueba se ha realizado contra distintas configuraciones de almacenamiento

 

Velocidad Enlace  HDD HDD RAID 0 HDD + Caché SSD HDD RAID 0 + Caché SSD SSD
Ethernet 1 Gbps 112 MB/s 110 MB/s 111 MB/s 112 MB/s 112 MB/S
Ethernet 2,5 Gbps 149 MB/s 275 MB/s 180 MB/s 277 MB/s 289 MB/s
USB 3.0 (5Gbps) 145 MB/s 342 MB/s 183 MB/s 359 MB/s 435 MB/s
USB 3.1 (10 Gbps) 156 MB/s 343 MB/s 179 MB/s 342MB/s 880 MB/s

 

La caché de SSD aplica una pequeña mejora a la hora de acelerar la velocidad secuencial, sin embargo la mejora más llamativa se encuentra en accesos aleatorios, donde se multiplica considerablemente la velocidad de acceso a los datos.

Si bien la conexión de 1 GbE es la limitante a la hora de transferir archivos por red, en cuanto damos el salto a Ethernet de 2,5 Gbps las limitaciones pasan en algunos casos a los discos duros. Los HDD utilizados tienen un límite que ronda los 180 MB/s en pruebas específicas, y nos dan unas transferencias que rondan los 150-160 MB/s como máximo. Si usamos RAID 0 de HDD o el SSD directamente, entonces los 2,5 GbE también limitarán la velocidad máxima.

Con USB 3.1 de 10 Gbps podemos ver las velocidades máximas que se consiguen con RAID 0, que en este caso ronda los 360 MB/s, y con el SSD tenemos 880 MB/s transmitiendo hacia y desde una unidad SSD externa por USB 3.1. En el caso del USB 3.0 de 5 Gbps del frontal, tendríamos un límite de unos 435 MB/s.

 

 

Estamos acostumbrados a que los NAS de este tipo de formatos compactos vengan con 1, 2 o 4 bahías. Disponer de tres bahías como ofrece este QNAP TS-364 lo deja un poco a medio camino entre los de 2 y 4, dependiendo del uso que se le vaya a dar. Hay usuarios que con dos bahías tienen más que suficiente, pero con 3 bahías, sin embargo, podremos obtener algo más de  versatilidad a la hora de configurar otro tipos de RAIDs que combinen rendimiento y cierta redundancia.

No obstante, dentro de las peculiaridades de este NAS, hay dos características que son clave: por un lado, tenemos la posibilidad de ampliar la memoria RAM con el uso de módulos estándar SO-DIMM como los que podemos encontrar en portátiles, esto, unido a un procesador x86, permite que el TS-364 sea un NAS muy versátil con posibilidades de virtualización y que incluso puede funcionar como un pequeño PC gracias a su salida HDMI y al soporte para navegadores y apps de ofimática.

La otra característica a la que nos referimos y que lo hacen tan especial dentro de su gama es la de ofrecer dos puertos M.2 con soporte PCI Express 3.0 X2 para conectar USB u otras tarjetas de expansión que le garantizan una vida longeva. En el caso de conectar USB, podemos tener una unidad con una velocidad muy superior a cualquier disco duro convencional, aunque posiblemente la función de caché para los discos duros sea una opción más inteligente a la hora de combinar tiempos de acceso rápidos con mayores capacidad. También se puede aprovechar para la aceleración IA de reconocimiento de imágenes, un sistema que permite prescindir de servicios como Google Fotos y mantener las posibilidades de reconocimiento facial sin comprometer la privacidad.

Se hubiera agradecido que los puertos fuera PCIe 3.0 x4 para aprovechar mejor SSDs de alto rendimiento, pero también hay que tener en cuenta las limitaciones del formato y del hardware del propio NAS. También, un sistema de aislamiento más eficaz evitaría el ruido que genera toda la vibración cuando se están usando los discos duros.

Su precio de 509 euros, al que hay que sumar el de los discos duros y SSD que le coloquemos, o los módulos de RAM si queremos ampliar los 4 GB que trae de serie, lo colocan unos cuantos peldaños por encima de las gamas más asequibles para usuarios domésticos, pero a cambio recibiremos un NAS muy capaz, con un hardware avanzado como el que nos tiene acostumbrados QNAP en la mayoría de sus NAS y aderezado con todas las posibilidades de QTS 5.0