ACER Predator X45 OLED Review

Anunciado en el CES del pasado año, el Predator X45 OLED supone la renovación de la gama más alta de monitores gaming de ACER con un nuevo panel OLED a 240 Hz y en formato 21:9 para colocarse por encima de aquel ACER Predator X35 que tan buenos resultados ofreció en su día.

En esta review del ACER Predator X45 OLED descubriremos de lo que es capaz este monitor ultra panorámico dotado de las últimas funciones gaming, con hasta 1.000 nits de brillo pico, una curvatura muy marcada de 800R y lo último en conectividad. Veremos si cumple con las expectativas y cómo se sitúa en este competitivo mercado.

Características Técnicas del ACER Predator X45 OLED

• Panel OLED de 44,5 pulgadas.
• Formato 21:9.
• Resolución de 3.440 x 1.440 píxeles.
• 240 Hz de frecuencia de actualización.
• Panel curvado 800R.
• 0,03 ms de tiempo de respuesta.-
• Brillo máximo de pico 1.000 nits.
• AMD FreeSync Premium.
• Soporte HDR10
• Altavoces de 5W.
• Conectividad:
  • 2 x HDMI 2.0 (limitado a 100 Hz).
  • 1 x DisplayPort 1.4.
  • 1 x USB-C 90W DisplayPort Alt Mode.
  • 2 x USB-A.
  • 1 x minijack audio.
• Tamaño: 457 x 992,2 x 78,4
• Peso: 13,10 kg.
• Precio: 1.999 euros.

Aunque en los últimos años la presencia de monitores "super ultrawide" con formatos de 32:9 ha aumentado, dentro de los formatos con más ancho que los típicos 16:9, los "ultrawide" de 21:9 siguen siendo una opción más arraigada en el mercado.

A pesar de que su tamaño no llega a ser equivalente al de dos monitores convencionales, no son tan largos como los 32:9 y son una solución intermedia que permite cubrir una mayor área de pantalla sin llegar a ser demasiado molesto a cortas distancias. Además, si lo aderezamos con un radio de curvatura muy marcado como el de este ACER Predator X45 OLED, podemos tener un enorme monitor de 44,5 pulgadas 21:9 inmersivo que no nos hará girar la cabeza para abarcarlo entero.

Esta curvatura, junto al enorme panel, es lo que más llama la atención al verlo por primera vez. A nivel de pantalla, el panel está integrado en unos marcos finos en el frontal. Al ser negros y el panel OLED, cuando lo encendemos con un fondo negro, el acabado es muy uniforme y hay muy poca diferencia entre el marco y este. 

Un detalle que nos ha gustado mucho es que no se requiere ningún tipo de montaje: El ACER Predator X45 OLED viene ya montado en la caja y solamente hay que enchufarlo y disfrutar de él. No es algo habitual en el mercado de monitores, donde, como poco, suele ser necesario atornillar la columna y la peana.

Esta peana permite regular altura, inclinación y giro. Tan solo le falta poder rotar el panel para ponerlo en vertical, pero para ello debería ser bastante más alto de tal forma que el panel no toque en la mesa.

En la parte trasera nos encontramos con un diseño metálico con una zona central de plástico, todo ello en negro. He de reconocer que me ha llamado la atención la ausencia de RGB o toques más agresivos de diseño. Si tenemos en cuenta modelos anteriores como el Predator X35, parece que ACER ha evolucionado esta gama hacia un diseño más sobrio.

Realmente, lo importante del monitor es el panel, y la parte trasera en muchos casos ni se ve, pero quizás los que amantes de los diseños gaming agresivos se decepcionen un poco.

Desde la parte trasera y la parte superior es donde se aprecia mejor el radio de curvatura del Predator X45 de 800R. Para hacernos una idea, un monitor curvado estándar suele rondar los 1500R de radio, con modelos de 1200 y 1000R haciendo curvaturas ya más marcadas. En este caso, los 800R dejan una curvatura muy marcada.

En un monitor 16:9 convencional no tendría sentido, pero en este modelo de 21:9 permite tener más zona de pantalla a la vista, sobre todo teniendo en cuenta las 45 pulgadas del panel. 

Esta perspectiva también nos deja ver un grosor considerable de la zona donde se esconde el hardware del monitor. Este grosor contrasta con lo fino que es el propio panel.

Bajo este módulo tenemos la conectividad del monitor en una posición un poco incómoda para colocar los cables. Aquí tenemos dos puertos HDMI 2.0, un DisplayPort 1.4, un USB-C con DP 1.4 y carga de 90W, un hub de dos USB-A y un conector minijack para los auriculares. De serie el monito cuenta con dos altavoces de 5W con un sonido bastante potente y de buena calidad.

Echamos de menos la inclusión de un HDMI 2.1. Los puertos HDMI 2.0 están muy limitados y no se puede sacar todo el provecho a esta pantalla, tan solo podremos hacerla funcionar a 100 Hz.

 

En la parte inferior del panel tenemos un joystick encargado de facilitar la navegación de los menús para  personalizar las configuraciones y distintas opciones del monitor. Es una de las mejores maneras de gestionar una interfaz y se agradece el uso de este sistema en vez de los típicos botones separados.

Además, el ACER Predator X45 OLED también permite la configuración mediante software, tal y como veremos en la siguiente sección.

Tenemos dos maneras de gestionar las opciones del Predator X45 OLED. Por un lado, si conectamos a través del USB-A, o mejor aún, si utilizamos el USB-C para vídeo, carga y también datos, podremos utilizar el programa Acer Display Widget desde Windows.

Es una aplicación bastante sencilla que nos deja cambiar entre los distintos modos, personalizar los valores del monitor y también utilizar algunas funciones extra como GameView Sync, Split Screen o Gaame Assistant entre otros. Es posible configurar teclas de acceso rápido desde este menú.

Cada uno de los modos permite configurar niveles de luz azul baja, el sistema de reducción de luz azul del monitor, tocar el brillo, contraste, gamma y un gran número de opciones adicionales.

La pestaña de Game Assistant, por ejemplo, permite activar funciones gaming como el punto de mira, ajustando estilo, posición y color. También incluye un "modo francotirador" que hace zoom en la zona central del monitor para darnos cierta ventaja en juegos.

Desde el OSD, utilizando el joytick inferior para gestionarlo, podemos activar los distintos modos. Como curiosidad, comentar que si activamos HDR en Windows, será necesario activarlo en el menú, ya sea en este modo especial del menú rápido, o desde el menú de opciones, de lo contrario no se activará la función y veremos unos colores bastante apagados.

Más allá del menú rápido, tenemos los típicos menús de funciones para activar funciones gaming como temporizador, francotirador o el punto de mira superpuesto que ya hemos visto en el software de windows. Opciones para juegos, con tecnologías como Freesync, modos de imagen, realce de zonas oscuras, etc.

Los paneles OLED ya no son una rareza en el mercado de monitores gaming, y su abaratamiento en los últimos años ha hecho que podamos verlos integrados en, cada vez más, un mayor número de modelos y con frecuencias más elevadas.

Los contrastes que tienden hacia el infinito, esos negros puros y la capacidad para regular el brillo de manera independiente para cada pixel, son algunas de las ventajas más conocidas del OLED. Sin embargo, para jugadores, también es muy importante su reducido tiempo de respuesta, en este caso con 0,03 milisegundos, o la posibilidad de alcanzar frecuencias de actualización altas como los 240 Hz de este modelo.

Con una diagonal total de 44,5 pulgadas, el ACER Predator X45 OLED es un monitor grande, incluso para tener formato de 21:9. Cuenta con 3.440 x 1.440 píxeles de resolución, una cantidad que suele ser perfecta para modelos de tamaños más contenidos como los de 35 pulgadas, pero que en este modelo puede quedarse algo corta si nos acercamos bastante a la pantalla. A fin de cuentas, este modelo tiene un precio de 1.999 euros, por lo que ya estamos hablando de gamas muy altas.

El acabado mate del panel y la tecnología OLED hacen que la calidad de imagen del Predator X45 sea impresionante. Y si activamos HDR los resultados son espectaculares.

 Pruebas de Ghosting 

Con esos tiempos de respuesta tan rápidos, el ACER Predator X45 OLED no muestra ningún signo apreciable de ghosting. Aun con el inmenso contraste que tiene, los cambios entre las zonas más oscuras y claras de la imagen son muy limpios, y no hay ninguna estela ni artefacto. No es necesario el uso de ninguna tecnología adicional

 

 Brillo y contraste

En cuanto al brillo, ACER promete un brillo máximo de 1.000 nits con "truco". Aunque es capaz de llegar a esta cifra, lo hace únicamente en contenidos HDR y de manera puntual en zonas que supongan menos de un 3% de la pantalla.

Con SDR, el brillo máximo que hemos medido en manual es de 341 nits, mientras que con HDR en pantalla completa podemos ver un brillo de 434 nits. El brillo mínimo es prácticamente 0, de hecho nuestro equipo de pruebas no es capaz de captar luz, los que nos da un contraste teórico infinito.

• Brillo Máximo SDR :   341,4 cd/m².
• Brillo Máximo HDR:   434,2 cd/m².
• Brillo mínimo negro: 0  cd/m².
• Contraste: "infinito".

Cobertura de Color

El ACER Predator X45 es capaz de cubrir la práctica totalidad de las tres principales gamas de color: sRGB, Adobe-RGB y DCI-P3.

 

Espacio de Color	Cobertura de gama
sRGB	100 %
Adobe-RGB	96,3 %
DCI-P3	99,9 %

 

Si hacemos una media de las tres coberturas, el Acer Predator X45 OLED se coloca como uno de los monitores con mayor cobertura que ha pasado por nuestro laboratorio, justo por debajo del ASUS Proart OLED PA32DC orientado a usos profesionales.

 

Pruebas de color y calibración

Tenemos una calibración de serie con una desviación media de grises y colores de 3,68 puntos, lo que lo coloca en la zona media de nuestras pruebas. No es una desviación excesiva, sobre todo teniendo en cuenta que es un monitor gaming.

El equilibrio en la escala de grises es bueno, y la temperatura de color ronda los 7.000K. Con una calibración rápida obtenemos valores considerablemente mejores, y hay margen para ajustarlo a las necesidades de cada usuario. En cualquier caso, los valores de serie son más que suficientes para el público gaming.

Pruebas de color vs SRGB de fábrica

 

Pruebas de color vs SRGB tras calibración

 

 

Los monitores ultrapanorámicos de 21:9 nos parecen una de las opciones más equilibradas para dar el salto desde los típicos 16:9, consiguiendo una mayor superficie útil de pantalla e inmersión sin irse a formatos demasiado amplios. Mi monitor de trabajo y ocio tiene un formato de 32:9, pero reconozco que no es una elección para todo el mundo y puede hacerse demasiado largo para muchos, siendo los 21:9 mucho más versátiles.

Estos formatos más largos son donde tiene sentido tener un panel curvo, y en el caso de Predator X45 OLED lo lleva al extremo, de hecho, a pesar de sus 44,5 pulgadas, es un monitor fácilmente abarcable, incluso de cerca. No obstante, precisamente por su gran tamaño, la resolución de 3.440 x 1.440, que generalmente es más que suficiente para la mayoría de monitores 21:9, se queda algo corta en un panel tan grande cuando estamos demasiado cerca.

Por otro lado, quedarse en esos 1440p y no dar un salto a mayor resolución no exigirá tanto a la tarjeta gráfica, por lo que puede ser un equilibrio interesante.

Si a todo ello le sumamos un panel OLED a 240 HZ, con unos tiempos de respuesta ridículos y tenemos un monitor gaming que hará las delicias de prácticamente todos los usuarios, independientemente de si vayan a jugar con él o simplemente utilizarlo para multimedia.

Su precio es de 1.999 euros, una cantidad considerable y por la que deberíamos exigir lo último de lo último. Esos dos puertos HDMI 2.0 que integra no están a la altura, ya que no permiten pasar de 100 Hz a su resolución nativa, por lo que tendremos que decantarnos por el DisplayPort 1.4 o por el versátil USB-C (que también carga a 90W) para sacarle todo el partido.

Eso no evita que el ACER Predator X45 OLED se coloca como uno de los mejores monitores gaming que han pasado por nuestras manos, y uno de los referentes en esta nueva hornada de pantallas OLED de gran formato para jugadores.