Corsair MP700 Elite 2TB Review

El nuevo Corsair MP700 Elite trae, sobre todo, una baja importante de precio, con unidades de 2TB de capacidad por menos de 285 euros, que puede no parecer muy económico pero supera en prestaciones a cualquier unidad PCI Express 4.0, como veremos a lo largo de esta review, y es sensiblemente más económica que otros modelos de la marca que tienen precios, para prestaciones similares, de no menos de 320 euros para la misma capacidad.

Corsair además integra esta unidad con dos variantes, con o sin disipador, siendo la primera muy interesante porque por cinco euros más podemos tener una unidad perfectamente disipada y con una estética impecable. Estas nuevas unidades, con controladoras más eficientes, gestionan mejor la energía y requieren de menos disipación para comportarse dentro de sus parámetros de funcionamiento perfectos.

Características técnicas del Corsair MP700 Elite 2TB

• Factor de Forma: M.2 2280
• Interfaz: NVMe PCIe 5.0 x4
• Controlador: Phison PS5031-E31T
• NAND: 3D TLC
• Tamaño de Caché DRAM: - (HMB)
• Tamaño de Caché NAND: SLC Dinámico
• Encriptación: No soportada
• Soporte Trim: Soportado
• Soporte S.M.A.R.T: Soportado
• Recolección de Basura: Soportado
• Valoración TBW: 1200
• MTBF: 1,600,000 horas
• Consumo en Suspensión: < 3.5 mW
• Consumo Activo Promedio en Lectura: 5.9 W
• Consumo Activo Promedio en Escritura: 5.9 W
• Temperatura de Operación: 0° C a 70° C
• Temperatura de Almacenamiento: -40° C a 85° C
• Humedad de Operación: 90% RH (a 40° C)
• Humedad de Almacenamiento: 93% RH (a 40° C)
• Resistencia a Impacto: 1500 G
• Vibración:
  • 20Hz-80Hz/1.52mm
  • 80Hz-2000Hz/20G
• Dimensiones:
  • 22mm x 80mm x 2mm
  • 24mm x 80mm x 9mm
• Lectura Secuencial (CDM): Hasta 10,000 MB/s
• Escritura Secuencial (CDM): Hasta 8,500 MB/s
• Lectura Aleatoria 4KB: Hasta 1.3M IOPS
• Escritura Aleatoria 4KB: Hasta 1.4M IOPS

Más económica pero no tan rápida, aquí está otra parte de las claves de esta generación que se conciben alrededor de controladoras más económicas, eficientes pero, por desgracia, no tan rápidas. La MP700 Elite de Corsair es una unidad PCI Express 5.0 con enlace 4x que produce su máximo rendimiento en este tipo de interfaz reservado para los procesadores más recientes de AMD e Intel.

Esto significa que tienen un ancho de banda más rápido, de 128Gbps, con velocidades máximas reales de unos 14000MBps de ancho de banda en lectura y escritura secuencial. Para lograr estas cifras, sin embargo, hace falta algo más que una interfaz compatible; hace falta capacidad de proceso y memorias adecuadas para lograr estos niveles de rendimiento.

Es una unidad totalmente normal, en formato Socket 3 con 22mm de ancho y 80mm de largo que podemos montar tanto en interfaces PCI Express 5.0 como anteriores, como el 4.0 o el 3.0. Es totalmente compatible con las carencias propias de las velocidades de acceso de cada interfaz. Podemos encontrarla con disipador o sin disipador, y la que incluye disipador se puede desmontar fácilmente si tenemos que instalarla, o queremos, con el disipador integrado en nuestro portátil o placa base.

Podemos encontrarla en dos capacidades, 1 y 2 terabytes (antes de formateo), reservándose Corsair las capacidades mayores para sus unidades de gama más alta dentro de esta misma familia MP700 de unidades PCI Express 5.0. El rendimiento de esta unidad viene marcado por dos factores: la memoria utilizada y la controladora, y precisamente ahora vamos a analizar ambas.

A diferencia de la otra unidad Corsair MP700 Pro SE que probamos, con 4TB de capacidad, que montaba memorias Micron TLC de 232 capas, este modelo opta por otro fabricante de primer orden, como es Kioxia, con una de sus variantes de última generación basada en memorias de BICS 3D TLC de 218 capas.

Presentadas en este mismo 2024, estas memorias de Kioxia son de lo mejorcito que podemos encontrar en memorias TLC de última generación. En esta unidad bastan dos “chips” de 1TB cada uno de esta memoria para lograr una unidad de alta densidad con una sola cara, que facilita su montaje en sistemas muy compactos como ordenadores portátiles u otros formatos de factor de forma muy reducida.

Esta octava generación de memorias 3D de Kioxia ofrece diferentes mejoras sobre sus unidades anteriores, de 162 capas. Por ejemplo, dispone de un ancho de banda superior, hasta 3.6Gbps por canal, hasta un 20% de mejora en escritura, un 10% menos en latencias de lectura, un 50% más de densidad y un 30% en la mejora de consumo de energía. Al ser memorias TLC significa que almacenan 3 bits por celda, lo cual es un equilibrio bueno entre durabilidad y reducción de costes.

Estas memorias permiten a Corsair desarrollar todo el potencial de esta unidad con un control importante de los costes. Tiene además la ventaja de que logran más eficiencia, sumada a la nueva controladora, devolviendo a las unidades PCI Express 5.0 a valores de consumo de generaciones anteriores, sobre los 6 vatios en carga, muy lejos de los 15 vatios que hemos visto consumir en algunas unidades de alto rendimiento basadas en este mismo interfaz.

La Phison E31 es una solución capaz y eficiente para dar vida a nuevas unidades PCI Express 5.0 más eficientes energéticamente hablando y también más económicas porque no necesitan caché de escritura con DRAM. Está fabricada con un proceso TSMC de 7 nanómetros, así que hablamos de una controladora puntera y presentada hace tan solo unos meses.

Su rendimiento más modesto se debe a su configuración de tan solo 4 canales. La Phison E26, por ejemplo, desarrolla hasta 8 canales simultáneos y los Chip Enables también se quedan en la mitad, con un total de 16. No hay limitaciones en la capacidad, así que podremos ver unidades de hasta 8TB con esta controladora, y soporta memorias TLC y QLC sin necesidad de caché en formato DRAM dedicada.

Está basada en una arquitectura ARM Cortex R5 y soporta tecnologías como RAID ECC y Phison 7Gen LDPC. También da cobertura a encriptación por hardware para estándares como AES256, TCG Opal y Pyrite. Solo la encontraremos en unidades con factor de forma M.2 Socket3 2280.

En cuanto al rendimiento de esta controladora, que soporta instrucciones NVME 2.0, podemos encontrar hasta 10800MBps de lectura, igual para la escritura, en velocidad secuencial y capacidad de proceso de hasta 1500K IOPs también en lectura y escritura.

Como no usa caché en forma de memoria DRAM dedicada, lo que hace esta unidad es reservar memoria y acceder a ellas en formato SLC, un bit por celda, para la escritura temporal antes de almacenar en las celdas definitivas ya en formato TLC. De este modo se logran velocidades de escritura muy rápidas y bastante bien sostenidas en el tiempo, como veremos luego. Todo ello con un consumo muy reducido, por debajo de los 3W en carga.

Centrándonos en los datos técnicos de esta unidad, que de momento se limita a unidades de 1 o 2 terabytes, podemos ver reflejada mucha de la información que ya hemos visto en el análisis de sus memorias y controladoras. Es una unidad muy estándar, con un tamaño de 2280 mm que podemos montar en cualquier placa base o portátil compatible; su diseño de una cara facilita todo esto. Como no podía ser de otro modo, todos los componentes principales están en la cara posterior, directamente al disipador en la zona superior.

El disipador no es especialmente grande, pero está bien trabajado y es una buena pieza de aluminio macizo con algunas puntas para mejorar la disipación. Los componentes conectan al disipador con thermal pads de gran calidad. Podemos encontrar esta unidad solo con una pegatina térmica, en una versión más económica destinada a que nosotros facilitemos la disipación para sus 6W en carga. La vida útil de esta unidad es de alrededor de 1.6 millones de horas, aunque está datada en 1200 TBW (Terabytes Written) y se reserva unos 48GB para provisión de celdas fallidas.

En cuanto a datos de rendimiento, para la muestra de 2TB, podemos ver velocidades de lectura de hasta 10800MBps en modo secuencial, mientras que la escritura se queda en 8500MBps. Ambos datos son más rápidos que la mejor de las unidades PCI Express 4.0 que podamos encontrar en el mercado. La potencia de proceso es de 1300K IOPs en lectura, y hasta 1400K IOPs en escritura. Datos muy similares al potencial real de la controladora.

Los consumos son muy inferiores a otras unidades PCI Express 5.0 que hemos analizado, algunas de las cuales llegaban a los 15W, quedándose alrededor de los 6W en carga. Datos muy interesantes que nos hacen pensar que pronto veremos unidades PCI Express 5.0 rápidas y económicas que podemos montar en casi cualquier ordenador que disponga de esta velocidad de interfaz.

El software gratuito que Corsair incluye con todas sus unidades de almacenamiento SSD se llama Corsair SSD Toolbox y ofrece a los usuarios de Windows una serie de herramientas prácticas muy interesantes, aunque quizás es el momento de darle un lavado de cara; recuerdo este interfaz de los tiempos de OCZ, compañía que quedó absorbida por Corsair hace ya años.

Permite la monitorización del estado del SSD, supervisando métricas esenciales como la temperatura, el número de errores y la vida útil restante del SSD, lo que facilita a los usuarios el seguimiento detallado del estado operativo de la unidad y la anticipación de posibles problemas.

Facilita la actualización del firmware de los SSD Corsair a las versiones más recientes, que pueden incluir mejoras de rendimiento, correcciones de errores y parches de seguridad, y esta actualización se realiza desde Windows de forma muy segura en estas unidades.

También incluye herramientas avanzadas para maximizar el rendimiento del SSD, como la gestión de TRIM, la alineación de particiones y la administración de la caché, ayudando a mantener un funcionamiento eficiente y prolongando la vida útil del disco, asegurando así que su desempeño sea siempre el esperado.

Ofrece opciones de borrado seguro de datos mediante la función Secure Erase, asegurando que los datos borrados no puedan ser recuperados, ya que todas las celdas quedan completamente limpias. Muchas placas base cuentan también con esta funcionalidad, que no daña el disco, pero tampoco repara celdas perdidas.

Además, permite realizar diagnósticos exhaustivos del SSD y acceder a registros de eventos importantes del sistema, lo que facilita la identificación y resolución de problemas relacionados con el rendimiento y la fiabilidad del dispositivo.

La última unidad que probamos de Corsair es su modelo más avanzado y rápido, con la controladora Phison E26 y memoria configurada en 16 canales para desarrollar un rendimiento cercano a lo máximo que admite el propio interfaz.

Esta unidad es diferente: más económica, más eficiente, consume casi tres veces menos y su disipador es sencillo y manejable. Incluso podemos comprarla sin él para instalarla en nuestro MiniPC, portátil u ordenador de sobremesa tradicional con la solución de disipación que nos ofrezca cada uno de estos entornos.

El rendimiento es menor, como se ve en las pruebas, pero más rápido que cualquiera de las unidades PCI Express 4.0 en la comparativa, y con consumos en muchos casos inferiores, entre un 30 y 40% menos de consumo. De hecho, con su propio disipador apenas roza los 50 grados de temperatura en carga, durante nuestros benchmarks. 

 

Máquina de pruebas:

• Procesador: AMD Ryzen 7 9700X
• Placa base: MSI MPG X870E CARBON WIFI
• RAM: G.Skill Trident Z5 Royal DDR5 48GB-8000MHz CL40
• Fuente: Seasonic Primer TX 1600
• Refrigeración: VALKYRIE SYN 360

Temperatura en reposo, con disipador

Temperatura en carga, con disipador

Atto Lectura Secuencial

Atto Escritura Secuencial

AS-SSD Lectura secuencial

AS-SSD Escritura secuencial

Crystal DM Lectura secuencial

Crystal DM Escritura secuencial

IOMeter QD32 Lectura (KIOPs)

IOMeter QD32 Escritura (KIOPs)

Anvil Storage Pro 1.0 lectura x10

Anvil Storage Pro 1.0 Escritura x10

3DMark Storage Benchmark

PCMark 10 Drive Performance Consistency Test

Cuando vemos avances en memorias, siempre podemos observar cómo cada vez son más rápidas y eficientes, con menor consumo y mayor densidad. Es la evolución natural. Sin embargo, estas mejoras no siempre llegan al producto final, ya que el integrador y el usuario esperan otra cosa.

En el caso de las unidades PCI Express 5.0, lo que el usuario esperaba y lo que el fabricante quería ofrecer es algo más rápido que lo anterior, sin considerar necesariamente el coste o el consumo. Esto es comprensible, porque al prometer mayor velocidad, esa promesa debe cumplirse.

Ahora viene el tiempo en que el interfaz se estandariza: más máquinas y procesadores compatibles, más entornos y necesidades que cubrir, y unidades como estas, no tan rápidas pero sí más rápidas que las anteriores y con consumos incluso menores, son precisamente lo que necesitamos. Aún más si vienen con una bajada de precio consistente de alrededor del 20%, como es el caso de esta nueva y magnífica unidad de almacenamiento de Corsair.