OCZ Octane 512GB SSD Drive
Introducción.
Ahora todos se apuntan al carro de Sandforce, incluso después de tantos problemas que han dado su última generación de controladoras, pero OCZ no solo apuesta por la tecnología de Sandforce sino que ahora es capaz de producir sus propias controladoras con tecnología Indilinx. Discos que prometen altas prestaciones sin números tan llamativos pero con rendimiento donde verdaderamente importa.
Prestaciones técnicas.
El Octane de OCZ se caracteriza por costes moderados con una controladora de alto rendimiento capaz de albergar altas capacidades de almacenamiento en un formato tradicional de 2.5”. Lo podemos encontrar en configuraciones de 128GB hasta 1TB de capacidad con prestaciones muy interesantes y no solo en las velocidades lineales sino en la capacidad de proceso del disco que además ha sido potenciada con la firmware 1.13 que es la que hemos usado nosotros para este análisis.
La controladora Indilinx Everest es la primera que OCZ fabrica en exclusiva para discos domésticos. Esta controladora hace hincapié en la reducción de latencias y el aumento de la durabilidad de los discos con tecnologías como Ndurance que permite aumentar la vida útil de la memoria a la vez que se reduce la degradación de rendimiento. La controladora también soporta encriptación AES en tiempo real de forma automática que es una prestación hasta ahora exclusiva de discos empresariales.
El Octane no sorprende tanto por esas velocidades casi simétricas de los discos con controladoras Sandforce pero se defiende muy bien en otros aspectos. Primero es más económico energéticamente rozando los 2w de consumo en activo y 1.2w en reposo. Esto es un 25% menos que la media de discos Sandforce de la propia OCZ que rondan los 2.5w y que no suponen ninguna mejora con respecto a discos mecánicos del mismo tamaño.
Entre las tecnologías que soporta encontramos TRIM, AES, reducción de tiempos de carga, recolección de basura en segundo plano, dispone de 512MB de cache en placa, latencias reducidas de tan solo 0,09ms y un peso reducido de tan solo 98gr.
Cuatro versiones hay hasta el momento con prestaciones variadas en cuanto a velocidades y capacidad de proceso se refiere. Las velocidades van desde los 470-480MB/s de velocidad de lectura (según modelo), 210-330MB/s de velocidad de escritura siendo únicamente el modelo de 128GB el que baja de los 300MB/s. Además potencias de proceso de hasta 35.000 IOPS en lectura de conjuntos de 4KB y hasta 26.000 IOPs de capacidad de proceso en escritura. El modelo mas equilibrado es el de 512GB que hemos podido analizar que ha mejorado de forma notable con la introducción de la nueva firmware.
Experiencia práctica.
Lanzar benchmarks de discos duros SSD no es para mi la mejor forma de ver si un disco es capaz o no. Casi todos los discos SSD ofrecen algo que todos demandamos de la informática moderna, esto es la inmediatez. Queremos que nuestro ordenador inicie aplicaciones y sistemas operativos en cuestión de segundos. Esto es lo que solemos buscar de un disco en primera instancia. Cuando llevamos algunos meses con el esperamos que ese rendimiento sorprendente se mantenga y discos como el Octane lo consiguen.
Lo mejor del disco es que hace verdad eso del “instant on”. Consigue arrancar sistemas en tiempos record y la recuperación de actividad desde modos de suspensión es sorprendente y de verdad responde a esa afirmación de encendido en menos de 1 segundo. Esto se consigue en buena medida gracias a la cache integrada en placa que permite cachear los datos más habituales y por tanto acelerar procesos de carga y arranque. De hecho buena parte de la firmware del disco esta optimizada para este tipo de procesos.
En nuestras pruebas para este análisis, con el interesante modelo de 512GB, conseguimos un rendimiento elevado en las tareas habituales. Cargar aplicaciones pesadas, ejecutar juegos, lanzar el propio sistema operativo,…todo se realiza con agilidad y para nada se echan de menos esas cifras espectaculares de otras controladoras. Su sistema de encriptación en tiempo real también lo hacen ideal para sistemas sobremesa y portátiles profesionales donde el cuidado de los datos sea también una prioridad y no solo la velocidad de acceso.
Pruebas de rendimiento.
Aun así el OCZ Octane es un portento en cuanto a rendimiento aleatorio se refiere. Es su fuerte y es precisamente lo que deberíamos buscar de cualquier disco SSD porque normalmente este es el uso natural que le damos a cualquier disco sea mecánico o solido. El acceso aleatorio es fundamental en todo lo que hemos explicado anteriormente sobre la agilidad de un disco y como este debe comportarse. Estos son los datos que hemos extraído de este disco, con la firmware 1.13, y comparados con algunas de las configuraciones mas elevadas que tenemos a nuestra disposición actualmente.
Resultados de AS SSD en OCZ Octane de 512GB.
Resultados de AS SSD en RAID 0 de discos Agility 3 de 120GB.
Las velocidades en 4K son reseñables. De hecho marcan en buena medida el buen comportamiento de este disco. La puntuación de AS SSD es notable. De hecho mantiene el tipo con la configuración de doble RAID 0 de discos Agility 3 de OCZ con controladoras Sandforce SF-2281 que monta una de nuestras máquinas de análisis.
Las velocidades secuenciales en ATTO son mas moderadas. El Octane oscila sobretodo en velocidades de escritura según aumenta el tamaño de los test. Aun así las velocidades de lectura superan los 500MB/s y los de escritura rondan una media de 300MB/s. En el RAID de discos Sandforce las velocidades lineales son sorprendentes pero como hemos visto luego las diferencias no son tan notables cuando de verdad hacemos un uso intensivo de las verdadera potencia de la controladora.
En Sandra los niveles de rendimiento se mantienen. El Octane se defiende bien contra discos de su misma generación, concretamente bien contra el Vertex 3, que es uno de sus enemigos naturales. Es sin duda una opción a tener en cuenta a la hora de comprar un disco de ultima generación y esta claro que OCZ tiene en Indilinx una arquitectura propia con un futuro prometedor.
Análisis y Conclusión.
El OCZ Octane introduce otra forma de ver la tecnología SSD de sobremesa actual. Buen rendimiento en los factores claves, funciones avanzadas para un disco para usuarios domésticos y amplias opciones de capacidad en un formato tradicional. Su compatibilidad con cualquier sistema y sus precios ajustados lo convierten en una opción a tener muy en cuenta y lo coloca, para mi gusto, por delante de los M4 de Crucial. Todo un logro ya que hasta la fecha, y a pesar de algunos problemas técnicos, los M4 se habían conformado como los discos mas equilibrados de esta generación.