Gigabyte Z97X Gaming G1 Wifi Black Edition
Introducción Esta placa base de Gigabyte es todo un portento. La punta de lanza de su nueva gama G1 para “gamers”. De hecho puedo directamente enumerar el único, no defecto pero si falta, que he encontrado. Simplemente no cuenta con un slot M.2 integrado en placa. A partir de aquí ya estamos liberados para analizar el resto de sus amplias prestaciones. No deja de ser una placa Z97 pero Gigabyte ha mezclado esta solución con una placa base bien fabricada, un nuevo diseño de bios, una buena organización de sus componentes y sin duda un potencial elevado para montar máquinas de altas prestaciones ya sean orientadas al gaming o al overclocking, o a las dos cosas. Prestaciones básicas Ya hemos dicho que esta placa no deja de ser una placa con chipset Z97. Esto nos indica que está preparada para esta generación de procesadores Core de Intel, incluido el refresco que se hizo oficial ayer mismo, pero también lo será para la próxima generación de procesadores Core, de quinta generación, que vendrán de la mano de una reducción importante en el proceso de fabricación. Intel prepara sus fábricas para producir estas nuevas CPU a 14nm y estas placas base, las que montan el Z97 y H97, serán compatibles con estos procesadores que están por llegar durante 2015. Cuatro bancos de memoria nos ofrecerán la máxima capacidad que soportan estos procesadores con hasta 32GB de memoria DDR3 a la que Gigabyte ha ampliado el soporte de frecuencias para superar los 3200MHz. Al igual que destacábamos de la MSI Z97 Gaming 7 su simplicidad y sencillez de este modelo cabe destacar todo lo contrario. Es una placa ATX que destaca por su gran soporte para tarjetas gráficas. Gigabyte ha introducido un puente PCI Express 3.0 dedicado para poder repartir conexiones de 8x hasta para cuatro tarjetas simultaneas. Cuenta por tanto con cuatro slots PEG, donde uno tiene enlace 16x y el resto 8x, con doble separación para poder montar hasta cuatro tarjetas de doble slot ya sea mediante tecnología AMD Crossfire o Nvidia SLI. Tres puertos PCI Express 1x cubren los huecos restantes entre los conectores para tarjetas gráficas. Uno de ellos estará ocupado por el modulo añadido de Wifi-AC + Bluetooth 4.0 con el que cuenta esta tarjeta. Si montamos cuatro tarjetas gráficas tendremos, lógicamente, que prescindir de esta tarjeta inalámbrica. El almacenamiento de esta placa base es casi perfecto, pero solo casi. Y lo digo con verdadera pena porque le ha faltado ese plus para ser una de las mejores placas base que podamos comprar con los nuevos chipsets. La placa cuenta con 10 puertos SATA 6gbps de los que dos forman parte de un conector Express SATA con ancho de banda de 10gbps. Solo cuenta con este conector, uno solo, así que no podremos tan siquiera montar un sistema RAID de alto rendimiento con unidades de más de 800MB/s. Tampoco encontraremos conectores M.2 con conectividad PCI Express, bueno ni conectado a SATA tampoco.
Gigabyte ha tenido que repartir muchas lineas PCI Express y parece que eso les ha limitado a un sólo y único conector Express SATA en este modelo. La conectividad de puertos es de una calidad notable. Destacan sus puertos USB 2.0 dedicados a carga o conexión de DACs externos, con potencia dedicada y controlada para evitar picos o falta de potencia, o sus 8 puertos USB 3.0 repartidos entre la zona trasera de puertos y el frontal. La placa cuenta con tres conexiones de video digital (DVI, HDMI 1.4 y Displayport 1.2), que podemos aprovechar con la gráfica integrada en el procesador. Dos puertos Ethernet, uno de ellos un Killer E2200 y otro un Intel 218 para que cada usuario pueda elegir la solución Gigabit de alto rendimiento que prefiera. La pena es que al usar diferentes “vendor” no podremos acceder a tecnologías como el teaming, balanceo o redundancia que si podemos tener con dos chips Ethernet de la misma marca. La placa también cuenta con algunos conectores de legado, como puerto PS2, para los gamers que usan periféricos de este tipo. La tarjeta inalámbrica va a slot de ampliación así que no nos ocupara espacio en la zona posterior. Para el frente de la caja del PC ya hemos nombrado los dos puertos USB 3.0 pero también encontraremos HD Audio y como no múltiples conectores para puertos USB 2.0.Diseño y disposición El diseño de Gigabyte es mucho más ambicioso en las formas que otros modelos que hemos analizado de esta generación, modelos de otras marcas básicamente. Es el modelo más elaborado de la gama “gaming” de Gigabyte y eso se deja notar. Desde su sistema de disipación con opción a refrigeración líquida, de hecho podemos ver perfectamente las conexiones para los racor (1/4 pulgada), hasta la conexión por heatpipe entre el disipador del chipset y el resto de disipadores del sistema de alimentación de procesador y memoria. El sistema de alimentación es muy elaborado, con componentes de excelente calidad e incluso se añade una conexión de 12v auxiliar para maximizar la estabilidad de la corriente en toda la placa base. La disposición de los elementos es buena, me encanta como sus cuatro puertos PEG nos dan rienda suelta a la imaginación, pero tiene algunos defectos para mí importantes. Por ejemplo la disposición de los conectores de los ventiladores principales de la GPU que están bajo el socket y que pueden significar, en caso de que usemos refrigeración líquida, más cables por medio de la placa base. El resto del trabajo es impecable como no puede ser de otro modo en una placa base de más de 300 Euros. El rojo está de moda en el universo gaming y estos son los colores fundamentales también en la gama de gigabyte. La construcción, hasta el peso de la placa, es realmente bueno y está muy claro que Gigabyte sigue sabiendo cómo hacer algunas de las mejores placas base del mercado. Para los amantes del overclocking, y de las mesas de pruebas, gigabyte ha dispuesto toda una combinación de switches, botones, display POST, y otros elementos como los puntos de medición de voltaje directamente en línea. Casi todos están centrados en la esquina superior derecha de la placa aunque otros están en la zona más al “sur” de la placa junto al reto de conectores frontales. Es también una placa base muy colorida, casi tanto como la MSI con ese detalle que me encanta de la iluminación en la separación de PCB que aísla la tarjeta de sonido integrada. Ahora hablaremos de ella.
La iluminación de la separación de pistas en el PCB de la placa le da un colorido espectacular a esta placa. Prestaciones especiales Gigabyte fue pionera en los sistemas de sonido en placa con algo más de elaboración. Elaboración que tipo su clímax en la generación pasada con la posibilidad de cambiar los amplificadores integrados en sus conexiones analógicas para auriculares. También fueron los primeros en crear ese aislamiento en el PCB que ahora vemos coloreado mediante leds en muchas placas base de cierta gama. Gigabyte ha integrado en esta placa base uno de los mejores sistemas de sonido que hemos visto montado en una placa base. El nuevo sistema de sonido se denomina G1 Audio y es una solución para audiofilos montado en una placa base. Esto sin duda puede levantar dudas, a mí inclusive, pero al menos las especificaciones y mi experiencia personal con la tarjeta hablan de la mejor solución de audio que podemos encontrar integrada en una placa base. Cuenta con un DSP Creative Core3D que ya es suficiente para garantizar potencia de proceso y rendimiento de calidad en el proceso de audio. Además integra capacitadores solidos japoneses especialmente diseñados para sistemas de sonido de alta fidelidad. Se mantiene el diseño de DAC intercambiables donde se incluye de serie un DAC de calidad notable como es el Texas Instruments Burr Brown OPA2134. Además se ha integrado dos amplificadores electrónicos en línea que podemos ajustar manualmente entre ganancias de 2.5 y 6 veces más potencia. Este modo nos garantiza un buen funcionamiento con altavoces y auriculares de alta impedancia. La tarjeta Creative también nos da acceso a todo el software de códec de la marca que incluye su versión más avanzada: el SBX ProStudio. Los conectores analógicos son chapados en oro para una conductividad superior y también una durabilidad más amplia. También se ha protegido el DSP de Creative con un escudo también chapado en oro para eliminar interferencias electromagnéticas. El sistema de doble tarjeta de red de esta placa base es una buena forma de contentar a todo tipo de usuarios. Algunos confiamos más en las soluciones de Intel, con bajos niveles de consumo de CPU y otros prefieren el avanzado sistema de priorización de paquetes de los chips Killer de Qualcomm. Sea como sea ambas soluciones están presentes y cada usuario podrá usar la que crea más conveniente para él. La tarjeta de red inalámbrica es una solución Intel 7260AC. Tiene capacidad para acceder a redes de 2.4 y 5GHz y modos AC de hasta 867mbps. El Bluetooh es de tipo 4.0. El sistema de antenas múltiple y la fiabilidad de este chip nos garantizan velocidades por encima de los 40MB/s de transferencia sostenida con latencias de conectividad por cable. Bios
La bios de la Z97X Gaming G1 Black Edition es una nueva evolución en las bios UEFI de Gigabyte que eran de lejos las más básicas del sector. No digo que fueran las peores en opciones sino que su interfaz gráfico era bastante básico. Esto por otro lado es bueno porque los usuarios se manejaban mejor en ella sobre todo si tenías ya experiencia en las bios de este fabricante.
Ahora se introduce un nuevo interfaz pero lo cierto es que no trae ninguna mejora interesante con respecto al panel principal de los anteriores modelos gaming. En cualquier caso mejor juzgad por vosotros mismos en el video que hemos capturado con un paseo completo por la bios.
Análisis y conclusión Gigabyte tiene una placa base en su catálogo para aquellos que no piensan en dos graficas sino en tres o hasta cuatro unidades. Capaz de mover los procesadores más punteros de esta generación, al menos de hasta cuatro núcleos, y con bastante futuro por delante ya que será compatible también con la próxima generación. Lo mejor para mi es su sublime montaje sonoro, el mejor que podemos encontrar una placa base y sin duda su capacidad grafica es portentosa. Gigabyte está claro que conoce que buscan sus usuarios e incluso ofrecen dos tarjetas de red diferente para cubrir todos los espectros de usuario. Un trabajo fino al que, como dije desde el principio, solo echo de menos el interfaz M.2.