Muchos equipos de sobremesa y portátil de ASUS, desde la salida de Windows 8 al mercado, han cambiado sus métodos de arranque para adaptase a las últimas tecnologías. Esto no afecta tanto a las placas base puesto que siempre se da más libertad que a un equipo completo donde el fabricante siempre busca la mejora y la estandarización que le simplifique el soporte post-venta.
Este truco os funcionará en casi todas las máquinas ASUS donde ya no podáis arrancar desde unidades USB o similares con arranque BIOS o de legado. Digo en casi todas porque no siempre será posible, pero sí hay un alto grado de posibilidades de que la BIOS de vuestro equipo ASUS tenga los ajustes necesarios para volver a un arranque más lento, pero más compatible con sistemas menos adaptados.
Lo primero es entrar en la BIOS. ASUS suele usar la tecla de “escape” como método de seleccionar el dispositivo de arranque y suelen ofrecer también una opción para entrar en la configuración de la BIOS UEFI. Una vez dentro solo necesitamos dos sencillos pasos.
El primero paso es desactivar el “Secure Boot”. Esto lo encontraremos en la pestaña de seguridad de la BIOS (Security en inglés). Lo dejaremos deshabilitado. Esto no dañará el arranque de nuestra unidad de sistema principal, podemos desactivarlo sin miedo.
El segundo paso es habilitar el lanzador CSM (CSM Launcher). El CSM solo lo podemos activar si el “Secure Boot” está desactivado. Es paso indispensable. Lo encontraremos en la pestaña “boot” de la bios. Lo habilitaremos. Con esto ya podemos salvar la bios y salir.
Si volvemos a iniciar el menú de arranque, o entramos en la BIOS para fijar una configuración de arranque, ya tendremos disponibles también las unidades que requieren arranque de legado o arranque BIOS.
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