Las primeras medidas de la administración de Trump, en cuanto a la tecnología se refiere, ya está teniendo efecto en Estados Unidos en forma de críticas. Los aranceles impuestos por este nuevo gobierno dejarán una subida que se estima en un 20% a los PCs, donde los fabricantes de PCs premontados se llevarán la peor parte. Esto se debe al aumento en los aranceles que cobrará Estados Unidos a los productos que provienen de China, y que ya ha entrado en vigor.
Pero China no es la única que ha visto incrementado este impuesto, que desde el 20% ha subido al 54%. También se cobran aranceles a la importación desde otros países significativos como Taiwán, Vietnam y Corea del Sur, que son proveedores de RAM, SSD o incluso tarjetas gráficas. Según el director de Maingear, una compañía que vende PCs premontados, este incremento del coste debido a los aranceles se verá reflejado en el precio final que pagarán los consumidores. Este directivo estima que la subida puede está entre el 20 y el 25%.
Pero no es el único, desde Puget System también estiman subidas en los productos, aunque la compañía incluso costeará parte de esta subida. En ste caso las subidas se estiman entre el 20 y el 45% que comenzarán para el próximo mes de junio. Esto se debe en mayor parte a que no hay proveedores alternativos en Estados Unidos que suministren muchos de los componentes de un PC, a pesar de que los semiconductores es un producto que está exento de pagar impuestos, ya que la mayoría proviene de China y otros países que han visto nuevos y más elevados aranceles.
Esto puede provocar una recesión en la economía estadounidense y eliminará puestos de trabajo a nivel mundial, ya que los fabricantes están quitando su producción en china ante esta situación. Una ya complicada situación ante la escasez de gráficas, a la que se puede sumar unos desorbitados precios que como siempre pagará el consumidor.
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