ASUS ProArt PZ13 Review con Snapdragon X Plus X1P-42-100
Hoy os traemos la Review del ASUS ProArt PZ13, un tablet convertible con Windows 11 perteneciente a la familia de equipos ProArt para creadores de contenido. Se trata del primer dispositivo que probamos con el nuevo Snapdragon X Plus X1P-42-100, el más modesto de los procesadores Snapdragon X de Qualcomm.
Pantalla de 13,3 pulgadas 3K con tecnología OLED, stylus y funda con teclado y una gran batería de 70 WHs son algunas de las sorpresas que repasaremos a lo largo de este análisis.
Características Técnicas del ASUS ProArt PZ13 con Snapdragon X Plus X1P-42-100
- Pantalla OLED 13,3· 2.880 x 1.800 píxeles a 60 Hz.
- Soporte táctil, y HDR True Black 500.
- Procesador Snapdragon X Plus X1P-42-100
- 8 núcleos.
- 30 MB Caché.
- 3,2 GHz de frecuencia máxima y 3,4 GHz de Boost.
- GPU Adreno X1-45. Versión recortada a 1,7 TFLPS.
- NPU Hexagon 45 TOPS
- TDP~20W
- Memoria RAM 16 GB LPDDR5x 8.448 MT/s.
- SSD 1 TB M.2 NVMe PCIe 4.0.
- Conectividad:
- 2 x USB 4.0 tipo C de 40 Gbps.
- Lector de tarjetas SD Express 7.0.
- WiFi 7 + BT 5.4
- Batería de 70 WHs.
- Cámara frontal de 5 MP y trasera de 13 MP.
- Funda trasera con stand, funda frontal con Teclado y Stylus ASUS Pen 2.0.
- Medidas. 29,75 x 20,29 x 0,9 cm.
- Peso de 0,85 kg.
- Precio: 1,599 euros.
Un diseño en color negro mate es lo que destaca de la parte trasera de este ASUS ProArt PZ13 . Llaman la atención, y no especialmente para bien, todas las pegatinas que deslucen el acabado en esta zona. Por suerte, se incluye una funda trasera magnética con estand que ocultará toda esta parte.
Su grosor de 0,9 cm no lo convierte en un tablet precisamente fino, pero hay que destacar las buenas sensaciones en cuanto a calidad de construcción y materiales que desprende.
En la parte delantera la pantalla OLED es la protagonista. Tiene una diagonal de 13,3 pulgadas con un panel OLED y unos marcos bastante contenidos, sobre todo en los lados más cortos. El acabado es "glossy", y tenemos un formato 16:10. Con 0,85 kg de peso, tampoco es un tablet especialmente ligero.
Como decíamos, el grosor no es de lo más fino que hayamos visto en un tablet, pero la calidad de construcción es alta y, además, hay buenas opciones de conectividad. Además de los sitemas de salida de aire, botones de volumen y encendido, tenemos un total de dos USB-C 4.0 de 40 Gbps.
Uno de ellos se encuentra escondido bajo una tapa, al lado del lector de tarjetas. Es un poco incómodo tenerlo oculto, ya que los USB-C sirven tanto para cargar como para conectar cualquier periférico.
En la parte inferior tenemos un conector POGO de 8 pines que enlaza directamente con el teclado magnético.
El teclado magnético tiene un borde con un acabado suave verde, igual que el de la funda magnética trasera. En ambos casos se unen de manera bastante sólida mediante el uso de imanes y permanece fija aun moviendo la tablet.
La parte inferior se puede desplegar para regular la inclinación y utilizar de soporte. Es funcional con o sin el telcado acoplado.
El teclado destaca por el buen recorrido de la tecla y tener un tacto agradable. Incluye retroiluminación LED, y es muy similar al que podemos encontrar en portátiles de gama alta. De hecho, su recorrido es algo mayor a lo habitual. Con este accesorio, que se incluye de serie, el ASUS ProArt PZ13 se convierte en un portátil a todos los niveles, e incluso tenemos la tecla dedicada de Copilot.
Finalmente, ASUS incluye también su ASUS Pen 2.0, un Stylus activo con puntas intercambiables y hasta 4.096 niveles de presión con el que se puede escribir o dibujar.
La pantalla es uno de los elementos clave del ProArt PZ13, ya no solo por el hecho de ser un tablet y ser, básicamente, la interfaz de entrada por defecto, sino porque en un equipo destinado a la creación de contenidos, un panel de calidad es prácticamente obligatorio.
ASUS sigue apostando por la tecnología OLED en muchas de sus gamas de productos, una tecnología que consigue unos negros puros, con un contraste excelente y tiempos de respuesta muy rápidos.
En esta ocasión tenemos un panel de 13,3 pulgadas con 2.880 x 1.800 píxeles de resolución, más que suficiente para esta diagonal. De hecho, lo único que echamos en falta es algo más de frecuencia de actualización, ya que volver a los 60 Hz, incluso en el uso del escritorio o tareas más básicas, es un paso atrás.
La cobertura de color es muy buena, con prácticamente la totalidad de las gamas sRGB y DCI-P3, quedándose muy cerca del 93% de Adobe-RGB.
El brillo máximo de la pantalla en modo SDR al 100% se queda en 290 nits. Podemos subir a unos 382 nits en zonas más pequeñas, quedando los 500 nits reservados para picos concretos en áreas muy localizadas y solo bajo contenido HDR.
Incluso la calibración de fábrica es bastante buena si lo miramos en perspectiva. Hay margen de mejora, pero con esa cobertura de color, con una pequeña calibración rápida obtenemos valores de 0,5 AE.
Ya os adelantamos que el Snapdragon X Plus X1P-42-100 nos ha decepcionado un poco, no por el desempeño del SoC en sí, que se podía intuir viendo las especificaciones, sino por la combinación con este equipo. Es un dispositivo pensado para creación de contenido con un precio bastante elevado, y las capacidades de la GPU de este procesados se quedan lejos de cumplir con lo que debería ser un equipo para estos menesteres.
Sin embargo, es cierto que el SoC cumple con el cometido para el que fue creado: ofrecer unas autonomías muy altas en equipos económicos. Si aquí la parte del precio no la cumplimos, la de la autonomía está más que cubierta.
15 horas y 39 minutos en el test de ofimática con la suite Microsoft Office. Supera sin demasiado problema a Lunar Lake y deja muy atrás al Snapdragon X Elite 78-100 y al Snapdragon 8 cx Gen 3.
Y esos son resultados con el brillo al máximo. Si lo regulamos a valores más convencionales y bajamos a ahorro de energía, podemos estar más de dos jornadas de trabajo.
El PZ13 se carga con un adaptador USB-C típico de ASUS de 65W.
Aun con el descenso de rendimiento considerable de esta versión de 8 núcleos del Snapdragon X Plus, consigue superar al Intel Core Ultra 7 256V "Lunar Lake" en multicore. Nada mal para un procesador que ronda un TDP de unos 20 W (según especificaciones, ya que no hemos podido medirlo, aun así en cuanto a autonomía está por encima del resto de procesadores).
En 1 núcleo queda por debajo de la solución de Intel o AMD, sin embargo, soporta e incluso gana el pulso con el Snapdragon X Elite X1E-78-100 debido a la falta de Boost en estas dos variantes, las más modestas de cada gama.
La GPU sí que no tiene nada que hacer, es una versión muy recortada de la Adreno, con tan solo 1,4 TFLOPS. Es una solución muy limitada tanto en potencia como en soporte, a bastante distancia de las variantes de los modelos más potentes de la familia Snapdragon X.
Teniendo en cuenta que el ASUS ProArt PZ13 es un equipo, supuestamente, para creadores, la elección de este SoC con esta GPU le penaliza en toda tarea que requiera de algo de aceleración gráfica. Eso sí, la autonomía que ofrece es envidiable.
Es un equipo que puede mover sin muchos problemas software ofimático y algunos no muy exigentes de creación multimedia, siempre y cuando no tengamos problemas de compatibilidad como ocurre con Davinci Resolve 19. Windows 11 se maneja de manera fluida, pero esperábamos mucho más de un equipo de la gama ProArt con un precio de 1.599 euros.
Test de Rendimiento CPU Multi Núcleo
Cinebench 2024 MP
GeekBench 6 Multi Core
Test de Rendimiento CPU 1-Núcleo
Cinebench 2024 SP
GeekBench 6 Single Core
Ofimática
En la suite de Microsoft Office, automatizada por PCmark 10 Applications, vemos que hay una mejora de rendimiento respecto del Snapdragon X Elite básico, posiblemente debido a optimizaciones en la suite y en el propio Windows 11 ARM:
Benchmarks Sintéticos GPU
3DMark Solar Bay Raytracing
No es compatible con Raytracing bajo Vulkan, al contrario que el modelo más capaz de los Snapdragon X Elite.
3DMark Steel Nomad - Vulkan
3DMark Steel Nomad Light - Vulkan
3DMark TimeSpy DX12
3DMark FireStrike
SSD
CrystalDiskMark SSD
Hasta que llegue la gran actualización de Windows 11 en octubre, los equipos con Snapdragon X Elite y Snapdragon X Plus son los únicos compatibles con la plataforma Copilot+PC de Microsoft.
Copilot+PC incluye distintas funciones aceleradas por inteligencia artificial en local, haciendo uso de la NPU de los chips compatibles. Desde que analizamos el ASUS VivoBook S 15 con el Snapdragon X Elite, no ha habido ninguna novedad ni función extra destacable, ya que todavía no ha llegado Recall.
Por tanto, tenemos efectos de distinto tipo en las cámaras, generación de imágenes con Paint, reconocimiento de texto con la app recortes, clasificación y edición ligera de vídeo con ClipChamp, etc.
También hay soporte para apps de terceros como ya pudimos ver, sin embargo hay algunos "peros".
Uno de los grandes retos a los que se enfrenta Qualcomm es a conseguir la compatibilidad total de los programas disponibles para Windows en sus Snapdragon X basados en arquitectura de ARM.
Muchos programas funcionan, y cada vez más es habitual ver versiones compiladas para ARM. Sin embargo, hay ciertos programas y controladores que siguen si funcionar y parece que el problema se agrava con el Snapdragon X Plus. Por ejemplo, el editor de video Davinci Resolve 19 Studio fue de los primeros en anunciar la compatibilidad con el Snapdragon X Elite y su NPU en su versión para ARM. Sin embargo, no soporta el Snapdragon X Plus de 8 núcleos y su GPU, lo que imposibilita su utilización. El requisito mínimo es un Snapdragon X Elite y, naturalmente, tampoco podemos ejecutar la versión x86.
Es un campo donde Qualcomm y los desarrolladores deben trabajar más si quieren que estos equipos sean una alternativa, porque aquí estamos hablando de un equipo pensado para creadores de contenido que no puede ejecutar uno de los programas de edición de vídeo más famosos.
Inteligencia Artificial - Procyon NPU
Inteligencia Artificial - Geekbench AI - ONXX CPU
Inteligencia Artificial - Geekbench AI - NPUs
Inteligencia Artificial - Geekbench ML - GPU ONNX
Inteligencia Artificial - Geekbench ML - CPU ONNX
A nivel externo, las máximas medidas han rondado los 41 ºC y se concentraban en la parte superior izquierda de la pantalla en el lugar correspondiente al SoC. No son temperaturas molestas, aunque se pueden notar si lo cogemos sin funda. Con la funda puesta no se nota la diferencia de temperatura.
A nivel sonoro, cuando se le exige rendimiento se escucha claramente el ventilador. No es demasiado exagerado, pero estamos acostumbrados a que un tablet sea más silencioso.
Cuando Qualcomm presentó los Snapdragon X Plus de 8 núcleos, una versión aún más básica de los X Plus, lo hizo prometiendo la llegada de equipos económicos con precios que incluso podrían estar por debajo de los 700 dólares. Lo cierto es que este ASUS ProArt PZ13 tiene un precio de 1.599 euros, muy lejos de esas cantidades.
Es cierto que no es un equipo pensado para la gama más económica. A fin de cuentas, tenemos un formato convertible compacto, con una pantalla OLED de buena calidad y alta resolución, junto a Stylus y teclado incluido. No obstante, si se pretende orientarlo a la gama premium y con la coletilla "ProArt", con un precio así debería integrar al menos un Snapdragon X Elite con mejores capacidades y no es de recibo que venga con el SoC más modesto de la familia.
El Snapdragon X Elite que probamos en el ASUS Vivobook S 15 entraba a competir con Intel y AMD, pero desde aquel entonces hay nuevas familias de ambas compañías (Lunar Lake y Strix Point), y el Snapdragon X Plus de 8 núcleos queda bastante por detrás. En CPU tenemos menos núcleos, menos velocidad, y si bien la NPU es la misma, la GPU es mucho más básica, con 2,7 veces menos potencia que la más potente de los Snapdragon X Elite.
Además, está el problema de la compatibilidad. Es cierto que cada vez hay más software compatible o con versiones para ARM. El problema es que el ProArt PZ13 está orientado para creadores, y estos se encontrarán con el uno de los programas más usados de edición de vídeo, como es Davinci Resolve Studio, no funciona con el Snapdragon X Plus de 8 núcleos ni en su versión nativa ARM. El Snapdragon X Elite, o las soluciones Lunar Lake de Intel o Strix Point de AMD encajarían mucho mejor con la filosofía de un convertible así.
El Snapdragon X Plus X1P-42-100 es un SoC muy válido para equipos que busquen la máxima autonomía con precios ajustados, pero desde luego no para un dispositivo de 1.600 euros orientado a creadores de contenido.
De hecho, este ASUS ProArt PZ13 es un excelente convertible para todos los que busquen poder estar más de una jornada de trabajo (incluso dos) sin acercarse a un cargador, con la versatilidad que da Windows 11 sobre cualquier sistema operativo móvil. La calidad de la pantalla, o la inclusión de un stylus y un teclado son detalles que redondean un equipo que, no obstante, por su hardware interno no debería pertenecer a la familia ProArt para creadores.