La organización Mundial de la Salud ha añadido la adicción a los videojuegos como una enfermedad y así será considerada a partir de ahora. Esto es algo que se veía venir, viendo el tremendo auge de los videojuegos en los últimos años y viendo cómo plataformas como YouTube o Twitch los apoyan de todos los modos posibles. También era de esperar dado que muchos títulos juegan hoy en día con la aleatoriedad del "loot" que te puede tocar en un videojuego, asemejándose de alguna manera a los típicos juegos de casino.
Ya vimos hace un tiempo cómo EA sufría duras críticas por su sistema de loot boxes en el Star Wars: Battlefront II, mediante el cual se adquiría, a cambio de dinero real, objetos y características especiales aleatorias dentro del juego, lo que podía incitar a la ludopatía. Si bien no todos los videojuegos pueden entrar en esta categoría (ni mucho menos), sí es cierto que hay algunos títulos que se asemejan a juegos de azar, lo que indirectamente sugiere que pueden causar adicción.
Claro está que la categoría "videojuego" es bastante más general que esos casos aislados, pero aun así, la OMS así lo ha añadido a su borrador, que será publicado durante este mes de junio, y pasará por la asamblea nacional para, el 1 de enero de 2022, entrar en vigor mundialmente. Seguramente necesitemos una nueva categoría para este tipo de videojuegos, pues englobar todo en dicha palabra no es una decisión muy acertada.
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