Toshiba tendrá problemas para abastecer chips de alimentación al menos hasta septiembre de 2022

Las tarjetas gráficas vuelven a incrementar su precio consecuencia de la pandemia mundial que ha dejado sin materia prima a todos los fabricantes de los principales componentes electrónicos. Entre ellos se encuentra Toshiba, que se dedica a la fabricación de chips de alimentación para dispositivos electrónicos, automoción y maquinaria industrial. Desde Bloomberg nos cuentan que Toshiba no podrá hacer frente a la demanda actual.

Además, también nos cuenta que este ajustado inventario puede demorarse un año más, y algunos clientes no podrán completar sus pedidos hasta 2023. Aunque este componente no requiere de tecnología avanzada, es una parte imprescindible de los componentes electrónicos actuando como regulador de la potencia para que estos aparatos funcionen.

Toshiba también planea invertir 60.000 millones de yenes, unos 460 millones de euros al cambio, para aumentar la producción de estos componentes. Tampoco descarta la construcción de una nueva planta que ayude en la tarea. Toshiba confía en el crecimiento del mercado para poder amortizar la nueva planta y que sus líneas de producción se vendan en los próximos años.

La situación no parce mejorar con continuos retrasos y escasez en los principales componentes electrónicos, veremos si en el 2022 mejora la situación y los fabricantes son capaces de satisfacer la demanda de componentes electrónicos, aunque Toshiba ya ha dicho que no podrá ponerse al día hasta al menos septiembre del próximo año.

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