Recientemente Microsoft hacía una de las compras más grandes de la historia de los videojuegos, algo que hizo que incluso las acciones de Sony se tambaleasen en cierta medida como respuesta. Ahora, según podemos leer en el blog de la propia Bungie, parece ser que Sony ha replicado con otra compra, habiéndose quedado con la desarrolladora por un importe de 3600 millones de dólares.
Bungie es responsable de títulos como Destiny y Halo, y en principio debería seguir siendo igual de responsable, ya que el estudio será una subsidiaria independiente de Sony, conservando tanto a su presidente como al resto de trabajadores de la compañía que dan vida tanto a la calidad de los juegos como a su dirección artística.
Se hacen varias referencias al futuro de Bungie, como que “Continuaremos publicando de forma independiente y desarrollando creativamente nuestros juegos.”, además de hacer referencia a que no abandonarán ninguna plataforma, indicando que “Nuestros juegos seguirán estando donde está nuestra comunidad, donde sea que elijan jugar. ”
Sin duda, el panorama en cuanto a videojuegos está siendo de lo más interesante, aunque para muchos es preocupante que entre pocas compañías cuenten con el relativo control de una buena parte de la industria.
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