Intel X25-V 40GB. SSD medianamente asequible, altamente eficiente

Introducción

Introducción.

La revolución SSD llevara tiempo, mas del que nos creemos. Los discos duros mecánicos son rápidos, tienen mucha capacidad y su ratio de precio por GB es prácticamente ridículo. Un SSD tardara muchos años en competir a este nivel pero hay algo donde ya puede haber ganado mucho terreno. Me refiero precisamente al terreno del ordenador domestico me medio y alto rendimiento. En un ordenador de sobremesa montar dos o más discos duros no suele ser un problema y uno de esos huecos puede ser fácilmente ocupado por un disco SSD donde no almacenaremos gran cantidad de datos pero donde si podemos poner a buen recaudo el sistema operativo.

Intel X25-V 40GB. 34nm y TRIM.

Actualmente aunque no precisamente económicos, los discos SSD de diversos fabricantes han reducido su precio de entrada a unos 100€ y con esos nos ofrecen entre 30 y 40GB de capacidad. Espacio suficiente para un sistema operativo moderno pero que obliga, si o si, a compartir escenario con discos mecánicos que nos compensen esa falta de capacidad. Lo bueno es que nos llevamos las últimas tecnologías y sobretodo unos tiempos de acceso que harán volar a nuestro sistema operativo.

Este nuevo modelo de Intel, nacido precisamente para entrar en precio, integra memorias flash MLC (multi level Cell), que suelen ser de mayor calidad, de 34nm. Monta una controladora ultrarrápida con casi 25000 operaciones de entrada y salida de datos por segundo (25000 IOPs) en lectura y casi 2500 IOPS de escritura. Sus latencias se reducen a 65 microsegundos, comparado con los 8ms de un disco mecánico convencional, en modo de lectura y de 110microsegundos en modo de escritura.

Su velocidad sostenida alcanza los 170MB/s de lectura, que es una velocidad media bastante interesante para los discos que tenemos en la actualidad, y una más moderada de 35MB/s en modo de escritura. Es un disco expresamente pensado para escribir archivos pequeños donde lo más importante no sea su velocidad sostenida sino sus tiempos de respuesta ultrarrápidos. Es ideal para lo que está indicado que es montar el sistema operativo en el y otros tipos de archivos y programas en un disco duro más convencional.

Otra que nos ofrece un disco SSD es seguridad. No seguridad del tipo evitar que nuestro sistema operativo se degrade, aunque no requieran de desfragmentación, sino mas bien que sufra alguna falla mecánica o reciba un golpe o tenga vibraciones en su uso que vayan causando un fallo progresivo. La memoria NAND de estos discos tiene una vida media útil de 1.200.000 horas lo que se traduce en 136 años de uso continuado las 24 horas del día. Este tipo de seguridad es la que nos permite, por ejemplo, montar un disco duro en el lateral de una caja sin tornillos como nosotros en nuestra Antec Skeleton, este tipo de seguridad nos permite tener discos externos móviles mucho más fiables donde poder llevar nuestro sistema operativo o datos importantes. En definitiva es una plataforma que tiene ventajas notables a la hora de albergar nuestro sistema operativo y ahora son más accesibles gracias a estos precios.

Los discos SSD son más versátiles, no producen ruido

y no les afectan tanto la exposición a vibraciones o golpes.

Formato y versiones

Formato y versiones.

Este nuevo disco, como su nombre sugiere, tiene el chasis de un disco duro cualquiera de 2.5”. Tiene un espesor inferior al habitual de 9.5mm que vemos en casi todos los discos mecánicos con este factor de forma pero Intel lo “corrige” con un adaptador superior que evitara problemas en el montaje en cualquier ordenador portátil del mercado.

Su interfaz es SATA y su compatibilidad es SATA 2.6. Esto indica que su velocidad máxima de transferencia es la del SATA 2, 3gbps, pero tiene algunos avances que se integraran de forma definitiva en SATA 3 o SATA 6gbps. Se alimenta como un disco duro SATA cualquiera y por su factor de forma está preparado para funcionar únicamente con 5v consumiendo en carga menos de 150mW. Esto significa que lo podemos montar en cualquier caja externa de este formato sin mucho problema en cuanto a su consumo.

Intel vende este disco en dos formatos, OEM y Retail, siendo este ultimo el que debería llegar al usuario final que decida ampliar su ordenador personal. Este formato incluye un CD con algunas utilidades, de las que luego hablaremos, y también un adaptador para montar en bahías de 3.5” que son las habituales en cajas de ordenador sobremesa. Este adaptador, que no es más que un molde metálico que no compatibilizara el disco con sistemas backplane ya que los conectores de alimentación y datos no quedan exactamente a la altura de donde deberían estar en un disco duro de 3.5”.

Hemos dicho que este disco ofrece durabilidad y seguridad pero es importante conocer los datos que Intel ofrece después de sus pruebas de laboratorio. Este disco esta certificado para una vida útil mínima de 5 años (calculados en base a un movimiento de datos de unos 20GB al día), con un total de 50000 ciclos de apagado y encendido de la unidad y su conector se puede sacar físicamente unas 250 veces de media antes de dañarse. Me quedo con los cinco años de vida útil de media y con los 3 años que nos cubre la garantía oficial de Intel siempre y cuando se trate de una unidad Retail.

TRIM y recolector de basura

TRIM y recolector de basura.

Algo muy importante que nos debemos exigir a la hora de comprar un disco duro SSD es que disponga de las últimas tecnologías y que nos ayude con procesos más o menos automatizados a mantener sus prestaciones en el tiempo.

Hemos hablado de que los discos SSD no requieren de desfragmentación, ya que para él lo mismo es buscar datos correlativos que en posiciones completamente opuestas físicamente ya que sus tiempos de acceso serán los mismos, pero no están exentos de problemas más aun si no es de última generación.

Windows 7 detecta los discos SSD y los elimina de la programación

de la desfragmentación automática.

El problema de los discos SSD es que no dejan de ser unidades con memorias Flash y por tanto cada vez que quieren escribir en una celda de memoria esta debe quedar despejada antes de la escritura. Si no hay datos en la celda, la escritura es directa, si hay datos, sea cual sea su estado, antes se deberá eliminar esa información para poder grabar nueva en ella. Esto hace que los discos que no están preparados con ciertos mecanismos sufran de una perdía progresiva de rendimiento según van siendo ocupados.

Los discos duros modernos, de la mano de sistemas operativos modernos como Windows 7, introducen mejoras y automatismos en el mantenimiento adecuado del disco. Uno de los mecanismos se conoce como TRIM, OCZ fue el primero en implementarlo, pero ahora hasta los discos económicos como este X25-V lo montan de serie. El TRIM permite al sistema operativo decirle a la controladora del disco duro SSD que bloques de memoria ya no están en uso y por tanto están disponibles para su reutilización. Esto le permite a la controladora del disco y a su software integrado ir eliminando los datos de esos bloques cuando, por ejemplo, el disco está en reposo. Con esta medida el propio disco va manteniendo sus bloques limpios y listos para su uso directo manteniendo las prestaciones del disco intactas en el tiempo.

Otro mecanismo muy útil, sobretodo para los que no tenemos el PC encendido todo el día, es programar o forzar limpiezas manuales. A estas utilidades se las conoce como recolectoras de basura y permiten de un modo manual borrar esos bloques en desuso. Este tipo de utilidades son útiles si no usamos un sistema operativo como Windows 7 y también se puede usar en combinación con TRIM.

Aplicaciones de Intel

Aplicaciones de Intel.

Intel ofrece soporte TRIM en esta generación de discos duros. Este modelo, el más económico, no es menos y soporta esta tecnología por lo que no tiene nada que envidiar a modelos más caros y de mas capacidad salvo en las velocidades sostenidas.

Intel si ha sabido dar sencillez a su soporte de estas tecnologías y también a la aplicación de técnicas de mantenimiento del disco duro. Para ello han creado el “SSD Toolbox” donde se incluye el SSD Optimizer. Detrás de estos llamativos nombres encontramos lo que hemos hablado antes. Una aplicación que nos permite fácilmente identificar nuestros discos SSD instalados y realizar las tareas de mantenimiento de una forma muy visual y sencilla para el usuario.

Si utilizamos Windows 7, que sería lo lógico sobretodo si vamos a optar por uno de estos discos, esta aplicación nos permitirá realizar un mantenimiento de recolección de basura completamente programado. Intel recomienda pasarlo todas las semanas, apenas dura unos segundos si lo llevamos al día, y además la aplicación permite programa la tarea para que se ejecute en el periodo que veamos conveniente sin necesidad alguna de intervención por parte del usuario.

Pruebas de rendimiento

Pruebas de rendimiento.

En estas pruebas de rendimiento hemos querido comprobar el rendimiento de estas nuevas unidades de Intel tanto en una configuración convencional como en un montaje RAID 0 de dos discos. Hemos añadido también un disco duro mecánico de 1TB para tener un contraste sobre ambas tecnologías. La plataforma de pruebas que hemos utilizado es la siguiente:

Placa base: Asus Maximus III Formula (Intel P55)

Procesador: Intel Core i7 870

Memoria: 2x2GB OCZ DDR3 1600.

Disco duro: 2x Intel X25-V 40GB, 1 Maxtor 1TB 7200rpm.

Fuente de alimientacion: PC Power & Cooling 910W.

Sistema operativo: Windows 7 64-Bit.

ATTO Disk Benchmark 2.46.

Mas lento que el mecánico escribiendo pero bastante más rápido en lectura.

Sandra Physical Disk Benchmark. Latencia. Menos es Mejor.

La latencia del disco mecánico es 100 veces superior a la del disco SSD. Así de sencillo.

Sandra Physical Disk Benchmark. Índice de disco.

El índice de disco de Sisoft Sandra también marca diferencias evidentes.

PCMark Vantage. Pruebas de disco.

Impresionante el rendimiento de PCMark Vantage. Las dos unidades en RAID 0 demuestran

un potencial que deja en ridículo al disco mecánico.

¿Y que hay del espacio?

¿Y que hay del espacio?

Es una pregunta interesante que he querido dejar para el final. 40GB no es mucho espacio, es el espacio que tenían nuestro ordenadores hace fácilmente 8 años pero la pregunta que realmente nos debemos hacer es si es suficiente para su objetivo lógico que es la de dar cobijo al sistema operativo. La respuesta la responde el propio Windows. Recién instalado tenemos 20GB de capacidad libres y podemos eliminar algo de uso traspasando la memoria virtual a un disco mecánico y también eliminando otros factores de gran uso directo como es la memoria que se reserva el sistema para la hibernación o el sistema de restauración. Si nuestro PC monta 4GB esa memoria el sistema de hibernación se comerá 4GB del disco y la memoria virtual prácticamente 2GB, la recuperación del sistema serán otros 4GB ya que va a una media del 10% del total del disco protegido.

Antes....

Con estos tres pequeños puntos habremos recuperado 10GB de capacidad en un ordenador que monte 4GB de memoria. Con esto ya superamos los 30GB de espacio dejando el porcentaje consumido por el sistema operativo en apenas un 25% y encima habremos liberado al disco principal de tareas que le restarían rendimiento.

... y después.

Análisis y Conclusión

Análisis y Conclusión.

A mí me convence. Me convence tener un disco duro para el sistema operativo con la velocidad de respuesta de esta unidad y me convence el montaje general que le da a sus discos Intel con una calidad de memorias excelente, una controladora ultrarrápida, con soporte de las últimas tecnologías para que nuestro disco se mantenga siempre en forma,…en definitiva se ve un disco bien fabricado y con el respaldo del más grande detrás.

Cierto es que apenas tienen espacio, son caros para la capacidad que dan, pero por 100€ podemos tener a nuestro sistema operativo como un rey y dejar el tema de datos y archivos voluminosos a un disco duro mecánico convencional. Por 100€ podemos disfrutar del próximo nivel de rendimiento no cuando sean económicos sino ahora.

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