Los nuevos SSD Intel Optane Memory H10 llegan con memorias QLC NAND y 3D XPoint en una misma unidad M.2.

Intel ha añadido una nueva gama de productos a su familia Optane donde podremos ver cómo Intel ha juntado las bondades de las recientemente lanzadas memorias QLC NAND con las de su tecnología Optane basada en memorias 3D XPoint, el corazón del sistema de aceleración de unidades de Intel.

Como podemos ver en la imagen, lo que podremos encontrar realmente en estos Optane Memory H10 es una unidad SSD completa en una mitad del PCB, mientras que la mitad opuesta está ocupada por los componentes del acelerador Intel Optane, proporcionándole así velocidades de hasta 2400MB/s de lectura y hasta 1800MB/s de escritura pese a que ninguno de los dos sistemas por si solo alcanza dichas velocidades, dejando ver cómo ambas partes funcionan al unísono para proporcionar el máximo rendimiento.

Uno de los mayores muros con los que se van a encontrar los usuarios es el de la compatibilidad, la cual es aún menor que la del resto de productos de la gama Optane. Los anteriores aceleradores requerían oficialmente de una placa base que soportase procesadores Kaby Lake o posteriores, mientras que los Optane Memory H10 necesitan de una placa base con chipset de la serie 300 y un procesador Intel Core U-Series de octava generación, en parte por la configuración interna de la unidad.

Estas unidades, además de requerir la octava generación de los procesadores de Intel, así como la versión 17.2 del controlador Intel RST, requieren que el slot NVMe x4 al que estén conectados pueda funcionar como si de dos slots x2 se tratase, por lo que efectivamente se trata de una configuración muy similar a la que conseguiríamos con dos unidades separadas, una QLC NVMe y una Optane, colocadas en una placa base con dos slots NVMe x2.

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