La instalación de Windows 10 May 2019 Update presentará problemas si tenemos un SSD de 32GB o unidades USB conectadas

La próxima actualización de Windows 10, llamada ya “May 2019 Update”, está pasando por un proceso de testeo más extensivo de lo que estábamos acostumbrados, proceso que ha permitido sacar a la luz algunos problemas más que de otro modo, habrían salido durante el despliegue al público.

Este proceso ha permitido descubrir que además de que los juegos que no tengan actualizada su protección anticheat provocarán cuelgues graves, instalar Windows 10 en un equipo con una unidad de 32GB será tarea casi imposible dados los nuevos requisitos del sistema, además de que no podremos realizar la actualización del sistema si tenemos una unidad USB conectada al equipo.

Por un lado, el problema de las unidades SSD afectará principalmente a aquellos equipos, sobretodo portátiles pequeños de bajo coste, que incorporen una eMMC de 32GB en su interior, la cual va soldada a la placa base y no se puede actualizar ni sustituir en ningún caso. Si bien en algunos equipos el almacenamiento es expandible mediante SATA, muchos de ellos carecen de esta posibilidad.

Por otro lado, Microsoft ha salido a hablar respecto al hecho de que no se pueda actualizar el equipo si tiene una unidad USB conectada, y su razonamiento es que realizar la actualización con una unidad USB de cualquier tipo que requiera de una letra de unidad puede causar problemas reasignando las letras durante la actualización y provocando que algunos programas dejen de funcionar.

Microsoft alerta que esto puede ocurrir incluso con las unidades internas del equipo, por lo que es de esperar que esto se solucione antes del despliegue en vez de hacer recaer la responsabilidad sobre los usuarios.

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