Hace un tiempo hablábamos de cómo los Intel Core de duodécima generación con arquitectura Alder Lake estaban sufriendo de problemas relacionados con su funcionamiento con contenido protegido. Esto llegaba principalmente por culpa de los DRM que, siendo anteriores a los propios procesadores, no estaban preparados por alguna razón para funcionar sobre esta arquitectura.
Denuvo volvía a ser uno de los protagonistas que causaba problemas a los usuarios de los juegos comprados legítimamente, y poco después aparecían herramientas como la de Gigabyte, que junto a parches por parte de los desarrolladores de juegos que aún estuviesen en periodo de soporte, consiguieron que los juegos volviesen a funcionar.
Ahora, tal como podemos ver en este artículo de soporte de Intel, la compañía ha estado trabajando tanto con Microsoft como con los desarrolladores de videojuegos, de forma que en un sistema totalmente actualizado a Windows 10 o Windows 11, deberíamos dejar de sufrir problemas relacionados con DRM.
Asimismo, si nos encontramos en una versión anterior de Windows, se nos recomienda instalar las últimas actualizaciones del sistema igualmente, de modo que se pueda comprobar si con los parches de Microsoft para su sistema operativo, los contenidos puedan volver a funcionar independientemente de la versión de Windows.
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