Cajas de ordenador y su importancia
En esta guía os mostraremos cómo elegir una buena caja para nuestro equipo, además de resaltar su importancia en distintos escenarios en los que quizá podríamos no pensar, ya que generalmente se considera a la caja de nuestro equipo como un mero lugar en el que colocar los componentes a salvo de agentes externos.
Entre las funciones que podemos encontrar en las distintas cajas del mercado, se encuentran obviedades como el de permitirnos instalar unos componentes u otros, dependiendo de las características de la caja y su aprovechamiento, pero tambien podemos encontrarnos con casos en los que una caja cuente con un diseño totalmente pasivo o esté insonorizada para evitar ruidos.
Del mismo modo, lo que para unos usuarios puede estar bien puede ser un problema para otros, por lo que la variedad en la oferta de cajas nos permite ver varios ejemplos de cajas pensadas para usos especificos, incluyendose nichos como el de montar un equipo en la parte trasera de una pantalla para ocultarlo por completo, o de ser lo suficientemente compacto para usarlo de mochila VR.
¿Por qué es importante elegir una buena caja de ordenador?
Existen varios factores por los que es importante realizar una elección correcta de nuestra caja, pero los principales factores son bastante obvios; por una parte, debemos asegurarnos que nuestra caja cuenta con suficiente espacio para los componentes que queremos montar en su interior, mientras que por otro lado, la caja debe proporcionar suficientes entradas y salidas de aire para refrigerar los componentes montados.
Sin embargo, otros aspectos de nuestra caja pueden tener que ver, por ejemplo, con su colocación en nuestro escritorio, pues por ejemplo una caja ATX de gran tamaño puede ser más problemática si tenemos un escritorio pequeño o vamos a colocar varios equipos en un mismo espacio, mientras que cajas muy pequeñas pueden terminar siendo un estorbo si solemos trastear con nuestro equipo o vamos a montar componentes de gran tamaño en su interior.
Características a tener en cuenta para elegir una caja de PC
En este apartado vamos a ver las características a tener en cuenta a la hora de elegir una caja para nuestro nuevo ordenador, pues van a depender principalmente de nuestras necesidades, así como de las necesidades de refrigeración del sistema –a día de hoy podemos introducir hardware muy potente en equipos minúsculos, así que no es un problema tan grave como antaño—.
Tamaño y formato
La primera elección va a ser la del tamaño general de la caja. Existen varios formatos de placas base que van a dictar el tamaño de la misma, pero por lo general nos encontraremos con cajas compatibles con placas Mini ITX, Micro ATX y ATX, con algunos modelos más grandes compatibles con placas base E-ATX y EEB.
En la mayoría de casos, elegir una placa base Micro ATX nos permitirá contar con un equilibrio entre un tamaño contenido y todo lo que podemos necesitar en nuestro equipo, pero si optamos por plataformas entusiastas, donde encontramos características como cuatro canales de memoria y múltiples slots para tarjetas gráficas, tendremos que dirigirnos a una caja ATX o superior.
Del mismo modo, si por alguna razón queremos montar un equipo con dos procesadores, probablemente necesitemos una caja, como mínimo, compatible con placas base E-ATX, mientras que en el extremo opuesto, si queremos sacrificar en cierta medida la comodidad de trabajo en el interior de la caja y algunas posibilidades de ampliación del sistema, un equipo Mini ITX puede ser muy interesante.
Algunos de los sacrificios que realizaremos con una reducción del tamaño del equipo será un mayor precio de los componentes, ya que la miniaturización llega a un precio, una reducción en el número total de discos duros que podremos instalar, así como limitaciones en el tamaño de los sistemas de refrigeración que podremos instalar en nuestro procesador y gráfica.
Siendo específicos, cuanto más compacta –o peor aprovechada—sea nuestra caja, más a menudo nos encontraremos con límites dictados por otros componentes. Por ejemplo, la instalación de una fuente de alimentación ligeramente más larga puede impedirnos la instalación de uno o dos discos duros, mientras que si optamos por utilizar todas las bahías de almacenamiento, podemos tener que optar por una fuente de alimentación de menor potencia o de mayor eficiencia, que suelen contar con tamaños más reducidos y precios mayores.
Capacidad de refrigeración
Enlazando con este último punto, nos encontramos con la capacidad de refrigeración dependiendo de la caja que queramos comprar. A pesar de las modas de diseño actuales, un frontal sólido, ya sea de cristal o simplemente de plástico no deja pasar el aire, de modo que comprar una caja con un frontal de rejilla, o que al menos cuente con grandes entradas de aire, será literalmente un soplo de aire fresco para nuestro equipo.
Del mismo modo, si bien un ventilador trasero funciona bastante bien a la hora de sacar aire caliente del interior de la caja, es bastante importante que nuestra caja cuente con al menos una salida de aire superior, ya que no solo funcionará por acción de los ventiladores instalados en el equipo, sino que por convección el calor tiende a salir de la caja por las salidas superiores.
Una salida doble superior también nos permitirá colocar un radiador doble para una refrigeración líquida, algo que permitirá que el calor de los componentes asociados a ella salga directamente fuera del equipo, en vez de pasar por otros componentes. Sin embargo, todo esto es asumiendo una caja cerrada, ya que en el caso de las cajas abiertas como la Thermaltake Core P5, su naturaleza impide que se acumule aire caliente en su interior, pues no existe un interior del que hablar.
Si tenemos pensado montar una refrigeración líquida personalizada con radiadores de grandes dimensiones, tendremos que tener en cuenta que nuestra caja deberá poder albergar no solo la extensión de los mismos, sino su grosor, ya que podemos encontrar opciones de varios fabricantes con grosores de más del doble de lo habitual, algo que puede significar que no podamos montar los ventiladores al mismo, por ejemplo.
Calidad de construcción
Si bien no deberíamos confiar en nuestra caja como un seguro a todo riesgo contra impactos, sí que es cierto que una caja con una buena calidad de construcción nos proporcionará sobre todo muchas facilidades a la hora del montaje y desmontaje de componentes, incluso en formas en las que normalmente no pensaríamos.
Por ejemplo, una caja con malas tolerancias o materiales muy finos tenderá a provocar desviaciones entre componentes que pueden dificultar su instalación. Todos hemos visto alguna vez en nuestras vidas como los agujeros de anclaje de una tarjeta PCI no terminaban de alinearse con las tarjetas, o sus roscas estaban dañadas o con pintura en su interior, así como chapas internas sin rematar que pueden cortarnos durante el montaje.
Si tendemos a colocar otros elementos sobre nuestro equipo, como sería una impresora de oficina, también podemos ver en muchas ocasiones como retirar la tapa lateral de una caja de mala calidad hará que la forma de la propia caja se distorsione, en ocasiones dificultando o impidiendo la reinstalación de la tapa.
Por lo general, podemos evitar esto evitando comprar la caja más barata que podamos encontrar, pues en ese rango de precios no solo estaremos ante cajas de mala calidad, sino que sus capacidades de refrigeración serán más bien limitadas, algo que para equipos de oficina o baja potencia puede estar bien, pero definitivamente puede ser un problema en equipos gaming.
Aislamiento acústico
Si bien actualmente es más complicado encontrarnos con ordenadores tan ruidosos que nos veamos en la necesidad de insonorizarlos, la lucha por un equipo totalmente silencioso tiene distintas formas de ser ganada. La más obvia es la de optar por una configuracion sin partes móviles, pero esto no es siempre posible, ya sea por precio, conveniencia, o potencia.
De este modo, la siguiente forma de reducir al mínimo el ruido generado por nuestro equipo es la de optar por las piezas con menores emisiones sonoras posibles. Esto se puede hacer en base a distintos componentes, como sería eligiendo unidades SSD en vez de discos duros tradicionales, tarjetas gráficas con disipadores sobredimensionados, y en el ámbito de las cajas, podemos elegir modelos insonorizados.
Cabe destacar que las actuales cajas con paneles de cristal templado hacen un sorprendentemente buen trabajo eliminando ruidos, especialmente cuando son agudos como en el caso del coil whine, pero se trata de una ventaja que llega por accidente. En cambio, podemos ver modelos de Fractal Design o de be quiet! que cuentan con paneles insonorizados con materiales diseñados especificamente para ello, donde podemos ver tambien otras técnicas de reducción de ruido como amortiguación para ventiladores y discos duros.
Esto, combinado con una cuidadosa selección de componentes, nos permitirá terminar con un equipo totalmente silencioso, algo especialmente interesante si queremos montar un servidor casero que no nos moleste con un ruido excesivo.
Diseño y estética
Por último, y para variar, quizá sí menos importante, nos encontramos con el diseño, y es que esto es algo muy personal que dictará qué caja queremos para empezar, pero tiene que ser de los menores condicionantes a la hora de hacerlo, pues no son pocos los usuarios que han elegido una caja bonita para posteriormente cambiarla por una caja que no sofoque sus componentes, o incluso permita su instalación.
Sin embargo, sí que existen diferentes líneas de diseño que pueden acompasar todo lo expuesto arriba, de modo que sea lo que sea que nos guste, no deberíamos encontrarnos con problemas al respecto, siempre y cuando tengamos un presupuesto suficiente.
Una tendencia de diseño importante a tener en cuenta es la de colocar la tarjeta gráfica de forma vertical, pues entre otras cosas, puede ser perjudicial para la refrigeración de la misma. Sin embargo, algunos fabricantes han tenido este detalle en cuenta, añadiendo una separación adicional entre el frontal estimado de la tarjeta gráfica y el cristal de la caja para mejorar la ventilación en tarjetas con ventiladores axiales.
Una caja bonita no siempre es buena, pero una caja buena puede ser bonita
La moda actual suele provocar que muchas cajas del mercado cuenten con problemas de entrada de aire fresco al abusarse del uso de cristal templado, algo que permite mostrar nuestros componentes al mundo –al menos a quien dejemos entrar a nuestra habitación— peo impide la entrada de aire fresco en muchas ocasiones, por lo que debemos buscar alternativas adecuadas a nuestras necesidades, dejando la estética en un segundo plano que, si bien va a dictar nuestras decisiones, no debería condicionarlas en exceso.
Tal como os hemos mostrado en la guia, la gran oferta de cajas para PC que existe en el mercado nos permite comprar con la seguridad de que, sean cuales sean nuestras necesidades, probablemente existe una caja que encaje con ellas además de parecernos bonita, pues atrás quedan los años en los que una caja de ordenador era sencillamente eso, una caja de metal con poca o nula diferenciación más allá de la imprescindible.
Fin del Artículo. ¡Cuéntanos algo en los Comentarios!