Parece ser que, a diferencia de Apple con sus intentos de realizar un acuerdo con alguna empresa automotriz para lanzar su coche eléctrico, Xiaomi estaría teniendo algo más de suerte con sus negociaciones, y es que después de anunciar en marzo de 2020 que se invertirían unos 10.000 millones de dólares para entrar en el mercado de la movilidad eléctrica con algo más que patinetes, Xiaomi estaría considerando comprar SAAB.
Esto contrasta con la información que previamente teníamos, donde Xiaomi iba a encargar su coche eléctrico a Great Wall, una empresa que funciona viento en popa y que ya cuenta con plataformas eléctricas sobre las que basar un vehículo para Xiaomi, por lo que es posible que igualmente el primer coche de Xiaomi llegase en 2023 de la mano de Great Wall mientras la marca desarrolla su vehículo.
Esta información proviene de Reuters, donde podemos leer que Xiaomi está en conversaciones con Evergrande, quien cuenta con severos problemas económicos y está considerando vender su división automotriz, algo que Xiaomi podría aprovechar para saltar al ruedo de los coches eléctricos con el guiado de una empresa con experiencia en la fabricación de automóviles.
Una de las cosas más importantes que recibiría Xiaomi con esta compra serían las propias fábricas de coches eléctricos, una inversión millonaria que ya no tendría que ser realizada, además de que probablemente con la marca y las instalaciones, se encuentren con la disponibilidad de miles de operarios e ingenieros que ayuden a Xiaomi a cumplir su meta.
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