Según podemos leer en Twitter, la última filtración que concierne a los procesadores Intel Alder Lake tiene que ver con su compatibilidad con memoria DDR5, y es que tal como veremos en las imágenes más adelante, parece ser que a partir de hardware de desarrollo de Dell se ha podido ver el rendimiento de estas memorias RAM de nueva generación en la próxima generación de procesadores de escritorio de Intel.
A nivel preliminar, se han utilizado memorias con unas latencias bastante altas para lo que estamos acostumbrados, con cifras CL40-40-40-85 pero que, del mismo modo, han sido capaces de obtener una latencia real de 92.5 nanosegundos, una latencia relativamente baja teniendo en cuenta la enorme magnitud de las cifras con las que trabajan las memorias sobre el papel, y que muy seguramente serán recortadas conforme la tecnología avance alrededor de los módulos de memoria DDR5.
En cuanto a velocidad, podemos ver como las memorias DDR5 consiguen acercarse peligrosamente a los 100GB/s de velocidad, con cifras de 90GB/s en lectura, 88GB/s en escritura y 77GB/s en copia, además de una frecuencia de 3200MHz en el bus de memoria, que equivaldría a 6400MT/s.
Se trata de interesantes resultados que nos muestran hacia donde se dirige el mercado con las memorias DDR5 que están por llegar y que llegan en un cambio de generación donde tanto Intel como AMD cambiarán de socket, una coincidencia que no se resume solamente a la memoria RAM, como cabe esperar, pero que no deja de ser interesante.
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