La European Processor Initiative (EPI) ha completado la primera fase del proyecto y ha ofrecido los resultados logrados. Los resultados ofrecidos son de pruebas de propósito general realizadas al procesador (GPP), de Acelerador (EPAC) y Automoción. Hace algunos meses ya nos mostraron las primeras pruebas realizadas.
El procesador tiene 29 núcleos RISC-V basados en la arquitectura ARM Neoverse V1. Para realizar estas pruebas GPP se ha utilizado un prototipo virtual que han podido aprovechar las universidades europeas y los líderes de la industria.
El procesador ha realizado con éxito las pruebas de memoria utilizando HBM2E con un gran ancho de banda. También se han añadido elementos de seguridad de última generación añadiendo incluso un módulo de seguridad por hardware desarrollado por la universidad de Pisa. En cuanto a consumo, también se ha desarrollado un controlador de energía basado en RISC-V utilizando algoritmos de IA para la gestión eficiente del consumo.
En cuanto a las pruebas de Acelerador, RISC-V ha demostrado tener potencial para prescindir de otras arquitecturas con licencias y de transformar el sector de la alta computación. Es capaz de ofrecer un alto rendimiento con un bajo consumo.
También se han realizado pruebas en el sector de la automoción junto con Infineon. Se ha adaptado este procesador, junto con otro procesador principal de reducido tamaño y adaptado al vehículo donde se ha obtenido todo el potencial necesario que demandan los vehículos más recientes y del futuro. Además, la plataforma es escalable y abierta a otras tecnologías.
Todo esto se ha logrado gracias al proyecto común con 28 socios y 10 países en solo 3 años. Se espera que esté disponible para el 2023.
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