Sin embargo, disponer de antenas en el monitor puede no ser una mala idea. Generalmente, muchos ordenadores de sobremesa con WiFi integrada cuentan con las antenas en la parte trasera, y si colocamos la torre en el suelo, la recepción de la señal del router u otros dispositivos se verá perjudicada.
Como el monitor es un elemento que se encuentra generalmente mucho más elevado que la torre, integrar la antena WiFi en él puede ayudar a mejorar la recepción de la señal.
En concreto, el ASRock Phantom Gaming PG34WQ15R2B integra la antena en la parte trasera de la columna que sujeta al monitor. La señal se transmite desde la tarjeta WiFi del PC mediante dos cables de antena que se enroscan en la parte inferior.
La propia compañía hace una comparación entre antenas situadas tras la torre y su antena integrada, asegurando que la señal pasará de "Débil" a "Fuerte", con picos de ganancia de 7 dBi contra los 2 o 3 dBI que consiguen con la antena del sobremesa situado bajo la mesa.
En cuanto a las especificaciones del monitor, que al fin y al cabo es lo más importante, tenemos un panel IPS con 165 Hz de frecuencia de actualización y la tecnología AMD FreeSync Premium, junto a un tiempo de respuesta de 1 milisegundo con MPRT.
Cuenta con soporte para DisplayHDR 400 de la VESA y un brillo típico de 500 nits. Su resolución es de 3.440 x 1.440 píxeles y tiene un radio de curvatura de 1800R.
Para la conectividad, tenemos dos HDMI 2.0, un DisplaYport 1.4 y un minijack. Su precio es desconocido.
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