Hoy mismo ha tenido lugar el lanzamiento del coche de Xiaomi, un sedán de 5 metros de largo, 664CV, hasta 800km de autonomía e HyperOS integrado que no ha dejado indiferente a nadie, pero esta no es la única compañía “extraña” que se va a poner a fabricar coches, pues Amazon también está interesada en hacer avances sobre este terreno.
Concretamente, Amazon no va a fabricar vehículos, pero sí que va a crear sus propias “hidrolineras” diseñadas específicamente para hacer funcionar los vehículos a hidrógeno que la compañía utiliza en sus centros, una flota que actualmente se compone de 225 toros a hidrógeno.
Según Plug, la compañía de hidrógeno con la que Amazon se ha aliado, las instalaciones que planean instalar en las plantas de Amazon serán capaces de generar hidrógeno para 400 de estos toros, así que no solo podrán alimentarse todos los vehículos, sino que habrá margen de expansión.
Este es un paso adelante para dar vida a otro de los métodos de movilidad alternativa, que es el uso de hidrógeno para “parchear” algunos de los inconvenientes que tienen los vehículos eléctricos a batería, como serían los largos tiempos de recarga en comparación a un repostaje de hidrógeno, que también puede alimentar a una pila eléctrica para, a fin de cuentas, seguir contribuyendo a la movilidad eléctrica.
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