Intel Core i9-13900K Review

Introducción a las características del Intel Core i9-13900K

La segunda generación de procesadores basados en estructuras combinadas de núcleos de alto rendimiento y núcleos de eficiencia, muy utilizada en entornos ARM desde hace años, ya está aquí y viene con una punta de lanza representada en este nuevo modelo Core i9-13900K, el de esta review, que no solo aumenta el número de núcleos, o sus capacidades de consumo, sino también las frecuencias de trabajo acercándose a la barrera psicológica de los 6GHz.

Este nuevo procesado aumenta sus hilos de proceso de 24 unidades de su antecesor el Core i9-12900K hasta los 32 hilos gracias a que dobla su número de unidades Eficientes de 8 a 16 unidades. Un cambio importante que potencia el rendimiento del procesador especialmente en aplicaciones capaces de aprovechar todo esta potencia de proceso en paralelo. Se mantienen, eso sí, los 8 núcleos de rendimiento, ahora mejorados, que presentan dos hilos de proceso por núcleo y una cache renovada de segundo nivel de 2MB de cache por núcleo.

El rendimiento hibrido combinando P-Core y E-Cores se ve gestionado de la misma forma que la generación anterior, en un soporte de software ya muy extendido en los principales sistemas operativos del mercado incluyendo las últimas versiones de Windows 11 y Windows 10 así como cualquier Linux con una compilación de kernel reciente. Mediante las tecnologías “Branch Predictor” y “Thread Director” Intel no solo consigue mejorar el rendimiento combinado sino también mejorar la eficiencia del procesador usando los núcleos más adecuados para cada tarea, más potencia, pero también menos consumo en uso normal.

Especificaciones y caracteristicas técnicas del Intel Core i9-13900K

• Frecuencia base P-Core: 3.0GHz
• Frecuencia base E-Core: 2.2GHz
• Frecuencia Intel Max Turbo: 5.8GHz
• Frecuencia Turbo en todos los núcleos:  5.4GHz
• Frecuencia Max Turbo: 5.7GHz
• Núcleos: 8 P + 16 E
• Hilos de proceso: 32
• Socket: FCLGA1700
• Diseño Térmico: 125w TDP, PL2 253 w
• Tamaño del Smart Cache: 36MB
• Tamaño del caché L2: 32MB
• Multiplicador interno desbloqueado: Si
• Número de Lineas PCI Express 5.0: 16 
• Numero de Líneas PCI Expres 4.0: 4
• Configuración de memoria: Doble Canal 128-Bit DDR4-3200MHz, DDR5 5600MHz
• Gráficos: Intel® UHD Graphics 770 1.65Ghz
• Soporte Intel Optane: Si
• Otros: VT-x, VT-x EPT, VT-d, VPro, Intel AES, AVX-512, Intel® Deep Learning Boost

Algunos chipsets nuevos, pero soporte en los antiguos

Esta renovación de la gama domestica de procesadores de sobremesa de Intel mantiene el socket LGA1700 y las placas base con chipset de sexta generación son completamente compatibles con estos modelos y no habrá impacto en el rendimiento por usarlos. Aun así, Intel introduce nuevos chipsets de séptima generación con ligeras mejoras, pero sobre todo con nuevas placas base que serán capaces de dar mejor soporte de almacenamiento PCI Express 5.0 para igualar las tornas con respecto a las nuevas plataformas Ryzen 7000 de AMD.

Este socket trajo consigo novedades conectivas, introducidas en algunos de los nuevos chipsets tanto de esta generación 7 como de la anterior generación 6. En este caso el patillaje mayor viene más de la mano de la introducción del PCI Express 5.0 y del Bus DMI 4 que a la nueva controladora capaz de soportar tanto memoria DDR4 como memoria DDR5. Para acomodar esta mayor capacidad conectiva, que prácticamente dobla a la anterior generación, hacen falta muchas de esas patillas extra que añade el LGA1700.

Entre los nuevos chipsets encontramos el nuevo Z790, el H770 y el B760, pero tendremos también compatibilidad en los anteriores como el Z690, H670, B660 y en el H610 que se mantendrá como el chipset de gama más baja para dar soporte a los procesadores Core 12 y Core 13 de Intel.

El Intel Z670 hereda muchas de las prestaciones conectivas del Z690 y solo añade la posibilidad de integrar un puerto más de tipo USB 2.2 Gen2 2x2 de 20Gbps, conserva por tanto la PCI Express 4.0 con líneas propias integradas en el chipset, que fue una novedad introducida en el Z690, o el cambio al bus DMI 4 con el procesador que también transforma sus 8 líneas PCI Express 3.0 en PCI Express 4.0 doblando el ancho de banda a 16GT/s.

La conectividad SATA sigue igual, con hasta 8 puertos disponibles, y el total de líneas PCI Express se mantiene en las 28 (12 de tipo 4.0 de las cuales 8 ya están asignadas al bus DMI, quedando 4 libres y 16 de tipo 3.0) que el integrador de la placa puede balancear según las prestaciones y necesidades de su montaje.

Soporta hasta 5 puertos USB 3.2 Gen2 2x2 de 20Gbps de ancho de banda, o hasta 10 puertos USB 3.2 Gen2 2x1 con hasta 10Gbps de ancho de banda, eso sin contar con los 14 puertos USB 2.0 de legado. Esta configuración, una vez más, debe ser balanceada por el integrador de la placa base para ofrecer la combinación más versátil para sus clientes.

Este chipset también da soporte a todo el abanico de oportunidades de overclocking de los procesadores K, desde memoria hasta buses pasando, por supuesto, por el cambio de multiplicadores y modos turbo de los núcleos de rendimiento y de eficiencia. Todo es absolutamente controlable por el usuario, también los consumos máximos en modo turbo.

Este chipset también mantiene otras mejoras de la anterior generación como el soporte nativo para Thunderbolt 4.0 y USB 4.0 lo que la convierte en la plataforma domestica con un más amplio catálogo de conectividad externa.

Las prestaciones del Intel Core i9-13900K

Ya hemos dado algunas claves fundamentales de este procesador, que ahora se convertirá en la opción más potente que Intel puede ofrecer en el mercado doméstico para sistemas de sobremesa (y algún portátil de tamaño descomunal que sin duda lo adoptara como propio) y tiene detalles muy interesantes que ahora intentare detallar adecuadamente.

Uno de los cambios fundamentales de este procesador, en mi opinión, es que ahora hay más margen de potencia consumida además de nuevos modos sin limitación que potenciaran nuevos niveles de overclocking sobre todo en entornos con refrigeraciones muy por debajo de temperatura ambiente.

Ya centrándonos en lo que es habitual en un entorno domestico este nuevo procesador tiene un modo PL1, el clásico TDP, de 125W y un modo PL2, en su modo turbo más agresivo mediante la tecnología Thermal Velocity Boost de Intel, que alcanza los 253W, con una frecuencia máxima, a un solo núcleo de hasta 5.8GHz. Es un 5% más de consumo que la generación anterior, pero también un margen superior de overclocking con frecuencias hasta 600MHz más rápidas que la generación anterior en este modo super especifico, pero también hasta 500MHz en el modo turbo más tradicional que si podemos ver aplicado a más de un solo núcleo al mismo tiempo.

Este procesador está compuesto por 8 P-Cores de alto rendimiento, con dos hilos de proceso por núcleo, con una velocidad base de 3GHz, 200MHz menos que la generación anterior, y un modo turbo de 5.7-5.8GHz. Luego veremos en la experiencia con el procesador como estabiliza con todos sus núcleos en uso. Los núcleos E-Core se doblan, pasando de 8 a 16 unidades y eso hace que el conteo total de hilos de proceso aumente de 24 hasta los 32 hilos.

La cache también se ve muy potenciada con 36MB de cache de tercer nivel, 6MB más que la generación anterior, y hasta 32MB de cache de segundo nivel gracias a los 2MB de cache de este tipo por P-Core combinado con los 2MB por cada conjunto de dos núcleos E-Core. Esta cache de segundo nivel además es más rápida y recibe mejores algoritmos de prefetch para su gestión. Intel aumenta también la frecuencia del tejido comunicativo entre núcleos logrando alcanzar una frecuencia de 5GHz en estos modelos.

Los núcleos E-Core de este modelo son más rápidos también que los de la generación anterior. La frecuencia turbo de estas unidades alcanzan los 4.3GHz, 400MHz más que en el Core i9-12900K, aunque la frecuencia base se reduce también 200MHz. Esta frecuencia base, que veremos pocas veces en uso, sin duda se compensa con creces gracias a la presencia de muchos más núcleos.

La gráfica integrada, inexistente en la variante KF de este mismo procesador, no evoluciona demasiado sobre la generación anterior, es una Intel UHD Graphics 770 con 32 unidades de proceso, como la generación anterior, y solo mejora, y poco, la velocidad de proceso alcanzando hasta 1.65GHz frente a los 1.55GHz de la generación anterior, alrededor de un 5% de mejora de rendimiento y un 10% más sobre otras configuraciones de procesador de esta generación como en el caso del Core i5-13600K. Soportan también elementos de proceso de video importantes como los nuevos modos de QuickSync Video con soporte para HDR y ultra alta definición en formatos de gran calidad como el HEVC/VP9.

Esta generación sigue soportando hasta 128GB de RAM, en doble canal y con un máximo de 4 slots, tanto de memoria DDR4 como DDR5. Esto los hace muy versátiles, pero también los hace más rápido porque ahora están certificados oficialmente para usar memorias más rápidas, de hasta 5600MHz (mucho más en placas con overclocking mediante perfiles XMP) con lo que Intel presume de un aumento del ancho de banda teórico en DDR5 pasando desde los 75.8GBps hasta los 89.6GBps. Adicionalmente estos procesadores mantienen el soporte para memoria ECC con corrección de errores por hardware.

En cuanto a conectividad PCI Express no hay novedades con respecto a la generación anterior. Seguimos contando con 16 líneas PCI Express 4.0 con hasta 128Gbps de ancho de banda y otras 4 líneas PCI Express 4.0 que normalmente están orientadas a la gestión de unidades de almacenamiento, aunque esto lo veremos balanceado en las placas base de nueva generación que permitirán a Intel aprovechar más fácilmente unidades de almacenamiento de nueva generación basadas en esta tecnología conectiva.

La competencia directa del Intel Core i9-13900K

Aunque toda la promoción de Intel se ha basado en sacar pecho con respecto al rendimiento del AMD Ryzen 9 5950X lo cierto es que hay nuevos competidores en el mercado que ahora mismo son elementos mucho más amenazantes para este nuevo gama alta de Intel. Concretamente los AMD Ryzen 9 7900X y AMD Ryzen 9 7950X deberían ser, por precio y prestaciones, los modelos en los que fijarnos.

La diferencia ahora es que podemos acceder a la plataforma de Intel a un precio bastante más económico puesto que las placas base con chipsets de sexta generación tienen precios más económicos que cualquier placa base que soporte procesadores Ryzen 7000 de AMD y además también tenemos opciones para DDR4 lo que abarata aún más el acceso a esta nueva plataforma.

Su propio hermano menor, el Core i9-12900K o en su variante Core i9-12900KS, son alternativas interesantes, que además ahora bajaran de precio mientras estén disponibles, pero ciertamente, como veremos ahora, son sensiblemente menos potentes tanto en capacidad de overclocking como en rendimiento tanto a un solo núcleo como en paralelo. Este nuevo modelo es un gran procesador y por fin Intel tiene una entrada de gama alta al mercado sensiblemente más económica que su competencia y se defiende de maravilla en todas nuestras pruebas de rendimiento hasta el punto de nos ha sorprendido mucho y muy gratamente.

Capacidad de overclocking, temperaturas de trabajo

Ojo con estos procesadores que tienen núcleos muy eficientes, de bajo consumo, pero combinados con sus núcleos “P” son auténticas bestias que tenemos que poder gestionar adecuadamente. Mi consejo seria utilizar disipadores de gran tamaño, de dos o tres ventiladores en formato torre o mejor aún kits de refrigeración líquida con radiadores de 280 o 360mm con ventiladores diseñados específicamente para entornos de refrigeración líquida donde la presión estática sea elevada.

Aun así, este es un procesador difícil de gobernar con sistemas tradicionales y una generación más la temperatura será nuestro peor enemigo para sacar lo mejor de él. En su estado natural ciertamente los 5800MHz aparecen de vez en cuando pero cuando presionamos a todos los núcleos a la vez tenemos una grata sorpresa al ver que estabiliza todos los P-Core alrededor de los 5400-5500MHz y los E-Core desarrollan todo su potencial con 4.3GHz. A estas frecuencias el procesador consume algo más de 260W reales y su temperatura ronda los 83 grados centígrados.

Si buscamos más overclocking podemos empezar a balancear este equilibrio, aumentar voltajes si queremos, pero difícilmente conseguiremos estabilidad en esas frecuencias establecidas para el procesador sin suficiente refrigeración y creedme que no es una tarea sencilla. Nosotros hemos probado ajustando un solo núcleo, dos o incluso balanceando las frecuencias entre P-Core y E-Core para beneficiar a unos y a otros. Ciertamente todo lo que hemos hecho, incluso con frecuencias estables en dos núcleos de hasta 6GHz no se ha traducido en una mejora de rendimiento sensible. Al final nuestro mejor resultado ha sido 5700MHz para los nucleos P-Core y 4500MHz para los E-Core. No es una gran cifra, pero el rendimiento mejora en torno al 5%.

El procesador, al menos nuestra muestra de análisis parece venir calibrado perfectamente de fabrica para su uso con un sistema de refrigeración estándar, como el que montaríamos la mayoría de nosotros en casa. Y aunque no nos ofrece muchas capacidades de overclock lo cierto es que este procesador vuela y lo hace en todas nuestras pruebas. Es una autentica bestia que sinceramente no nos esperábamos porque, entre nosotros, no suelo hacer mucho caso a las filtraciones de rendimientos que van surgiendo con cada generación, me suelo creer lo que veo cuando los procesadores están en mis manos y esto no me lo esperaba.

Consumo en reposo

Consumo en carga

Temperatura en reposo

Temperatura en carga

Resultados de rendimiento del Intel Core i5-13900K

Todas las pruebas que veis en estas tablas, como hacemos habitualmente salvo excepción que solemos documentar adecuadamente, son a frecuencias de fabrica con todos los modos de frecuencia en automático y los perfiles de energía habituales con los que la bios de turno reconoce al procesador instalado. Hemos acompañado a este procesador de algunas de las mejores memorias del mercado, como son las G.SKILL Trident Z5 DDR5 6800C34, y la combinación es simplemente perfecta.

Este procesador de algo más de 600 euros pone en aprietos al nuevo AMD Ryzen 9 7950X de 16 núcleos y 32 hilos de proceso y lo supera en computo en un solo núcleo. No solo lo supera en muchos de nuestros test, sino que lo hace también en las pruebas de juegos convirtiéndose en una de las mejores opciones del mercado para montar este tipo de PCs. Intel tiene una plataforma ya establecida en el mercado, con precios bastante más amigables de los que podemos encontrar para la plataforma AM5 de AMD.

Máquina de pruebas:

• Procesador: Intel Core i5-13900K
• Placa base: ASUS ROG MAXIMUS Z790 HERO
• RAM: GSKILL Trident Z5 XMP 3 6800C34
• Fuente: Seasonic Primer TX 1600
• Disco duro: GoodRAM IRDM PRO 2TB
• Refrigeración: Be Quiet! Pure Loop 2 FX
• Tarjeta gráfica: NVIDIA GeForce RTX 3070 FE

Sisoft Sandra. Aritmética

Sisoft Sandra. Multimedia

Sisoft Sandra. Ancho de banda memoria

Cinebench R20 CPU

Cinebench R23 SMP

Cinebench R23 1xCPU

Cinebench R15 SMP

Cinebench R15 1xCPU

Handbrake. Menos es mejor.

Geekbench 5 Single

Geekbench 5 SMP

Geekbench 4 Single

Geekbench 4 SMP

Pruebas en juegos. 1080 con Geforce RTX 3070. Battlefield 1

Pruebas en juegos. 1080 con Geforce RTX 3070. Doom Eternal

Pruebas en juegos. 4K con Geforce RTX 3070. Battlefield 1

Pruebas en juegos. 4K con Geforce RTX 3070. Doom Eternal

Análisis y conclusión

Intel se ha sacado de la manga, sin cambiar de proceso de fabricación, un procesador con una mejora de rendimiento más que notable, en apenas un año de vida de los Core 12 han sido ampliamente mejorados por Intel para no solo poder competir con los magníficos Ryzen 7000 sino para llegarlos a superar en muchas de nuestras pruebas, incluidas a un solo núcleo.

Estos nuevos procesadores de Intel parten con la ventaja de soportar dos tipos de memorias, de tener una gran cantidad de chipsets y placas base en el mercado y es una migración rápida y sencilla para los usuarios. Hoy en día, en este momento, Intel gana y este Core i9-13900K se convierte en el procesador domestico de sobremesa más equilibrado que el dinero puede comprar.

Fin del Artículo. ¡Cuéntanos algo en los Comentarios!