Introducción
Introducción. Esta placa es el sueño de cualquier usuario avanzado o de aquellos que busquen maximizar sus opciones con una integración de primer nivel y todo un catálogo de prestaciones a la altura de unos cuantos modelos en el mercado. Toda una maravilla de placa a la que Gigabyte ha puesto todo su empeño y que es difícil que no satisfaga al más pintado.
Prestaciones generales
Prestaciones generales. Este modelo es todo un ejemplo de cómo debe construirse a día de hoy una placa de máximas prestaciones. Todo en la Gigabyte esta mimado al detalle para no defraudar a los usuarios más exigentes. La Z68X-UD7 se conforma sobre un chipset Z68 de Intel, en revisión B3 como es lógico, con los cuatro bancos de memoria habituales para una capacidad máxima de 32GB y de RAM y soporte para procesadores de socket 1155 que engloban a los Sandy Bridge presentados a principios de este año.
En cuanto a la memoria Gigabyte nos garantiza soporte, aunque el procesador no lo ofrezca, para memorias DDR3 de frecuencias de hasta 2133MHz sin necesidad overclocking ni modificaciones añadidas. La integración de componentes es extensa. Como tarjeta de sonido encontramos una Realtek ALC889 HD Audio con soporte para Dolby Home Theater. La tarjeta cuenta con salidas analógicas y digitales. Contamos también con dos tarjetas de red gigabit firmadas también por u chip Realtek, concretamente el RTL8111E con capacidad para trabajar en conjunto en modalidades de “teaming”. La capacidad de expansión es generosa con cuatro slots PEG de los cuales dos son capaces de trabajar a 16x mientras los otros la velocidad máxima es de 8x. La placa base integra un puente PCI Express NF200 de Nvidia para facilitar la instalación de sistemas gráficos SLI de hasta tres tarjetas simultaneas manteniendo los “links” de 16x, 16x y 8x para las tres tarjetas. Por supuesto también podremos montar configuraciones de hasta cuatro tarjetas gráficas y hasta cuatro GPUs ya optemos por SLI o por Crossfire.
La placa añade también un conector PCI Express 1x y dos slots PCI de 32-Bit. Pero esto no es más que el principio de una capacidad conectiva bastante sorprendente. Podemos seguir por ejemplo con el almacenamiento donde encontraremos los seis puertos SATA integrados en el puente sur del Z68, dos de ellos SATA 6Gbp, a los que gigabyte añade dos controladoras Marvell 88SE9128 que completan otros cuatro puertos SATA 6gbps, dos de ellos internos y otros dos colocados en el panel posterior de conectores como puertos eSata. Estos además comparten conector con dos puertos USB 2.0 lo que los convierte en puertos Power-eSATA.
El tema de los USB es algo de lo más llamativo de esta placa base. Cuenta con 8 puertos USB 2.0, cuatro de ellos frontales, y cuatro traseros siendo dos de ellos nos nombrados como Power-Esata. La controladora también incluye dos chips NEC D720200 para USB 3.0 a los que se suman dos hubs integrados VLI VL810 que ofrecen un total de 10 puertos USB 3.0 completamente funcionales de los que cuatro se sitúan como conectores frontales y otros seis como conectores traseros. La placa incluye un módulo para los conectores frontales por si nuestra caja no tuviera suficientes o no estuviera adaptada. Se suman dos conectores Firewire externos y otro interno gracias a un controlador Texas Instruments TSB43AB23. Un portento de placa del que aún no conocemos otros detalles muy interesantes que le hacen ser la placa sobresaliente que esperamos siempre de los modelos UD7 de Gigabyte.
Otros detalles
Otros detalles. La placa disfruta de una calidad de fabricación excelente con componentes y sistemas de alimentación de última generación. Sumamos a los DrMOS un sistema de doble vía de alimentación del procesador con 12 fases por cabeza y tenemos un total de 24 fases reales que se activan de forma automática según las necesidades del procesador logrando más estabilidad y mejor reparto de calor entre los elementos de alimentación del procesador. El diseño térmico de la Z68X-UD7 también centra buena parte de sus esfuerzos en refrigerar los dos chips de la placa, puente sur y puente PCI express, a la vez que proporciona a la zona de alimentación la refrigeración que expele cualquier sistema convencional alrededor de la propia CPU. De este modo se logran temperaturas de trabajo más ajustadas y mayor capacidad de overclocking en situaciones donde el sistema este realmente cargado como puede ser ejecutando juegos con sistemas gráficos avanzados como los que podemos formar con dos, tres o hasta cuatro GPUs simultaneas.
El cuidado diseño eléctrico de esta placa también permite otros funcionamientos secundarios de gran calidad como es el caso de la tarjeta de sonido HD Audio que presenta niveles de señal de ruido superiores a los 100dB. Gigabyte integra también otras prestaciones añadidas, como en casi todas sus placas actuales, como es el sistema de doble bios, el soporte para discos de más de 3TB, el sistema de carga añadida para puertos USB con el que podremos cargar dispositivos más grandes, tipo tablets, sin problema alguno que se suma al sistema de alimentación 3x USB de la marca que a su vez protege a la placa y a los dispositivos de subidas y bajadas de tensión.
Entre otras prestaciones interesantes encontramos también Dolby Home Theater, su Display POST para tener información detallada de cualquier error en el arranque, la posibilidad de que el sistema entre en estado de reposo cuando no tenemos nuestro teléfono móvil Bluetooth cerca del sistema, ajustes dinámicos de consumo mediante Dynamic Energy Saver 2, o el sistema Tubo XHD que permite realizar sistemas RAID 0 de forma automática en cuanto conectamos dos discos idénticos a sus puertos SATA 6gbps. Muchos detalles que se suman a una integración portentosa y a notables posibilidades de overclocking.
Bios y overclocking
Bios y overclocking. Las placas Gigabyte son una buena colección de prestaciones para overclocking. Empezando por su bios que no solo es completa en los ajustes que podemos hacer a cada componente, que son más que detallados, sino también a nivel de información que presenta y que hace las cosas más sencillas.
Esta es una placa diseñada para overclockers y pensada para los usuarios más exigentes que tengan en mente usar sistemas de refrigeración poco convencionales pero sin duda también se adapta bien a otros sistemas ofreciendo un soporte de primera que se traduce en facilidad de overclocking sean nuestros objetivos más o menos ambiciosos.
Controles detallados para cualquier aspecto del rendimiento del sistema.Mas opciones de configuración para el procesador.Configurar el voltaje a milímetro, y para cada componente, tampoco será ningún problema.La placa incluso nos permite guardar perfiles rápidos de overclocking, que se pueden ir cambiando con combinaciones de teclas o incluso un sistema de perfiles de overclocking almacenados en Internet que podemos compartir fácilmente con otros usuarios o manipular desde cualquier lugar de Internet con el único requisito de tener un navegador Web.
Experiencia y resultados
Experiencia y resultados. Esta placa base mantiene la tendencia del modelo UD7 con chipset P67. Buenos niveles de overclocking, excelente calidad de fabricación y una integración de primer nivel. De hecho son hermanas gemelas donde el único cambio es la introducción del nuevo chipset de Intel. Personalmente no creo que sea un cambio significativo, menos aún para alguien que ya tenga la P67, y aunque puede resultar interesante el sistema hibrido RST de Intel lo cierto es que un usuario capaz de pagar los 300 Euros que vale esta placa debería plantearse mejor un disco SSD suelto de gran capacidad con un buen potencial a la hora de escritura aleatoria o incluso un sistema RAID 0 de discos SSD.
5.2GHz completamente estable, aunque a un voltaje elevado. Nuestro mejor resultado con este procesador.Una configuración grafica como es la combinación de una Radeon 6990 y una Radeon 6970 ofrece resultados sorprendentes.La placa es sin duda magnifica y es el soporte perfecto para esas máquinas de ensueño que algunos usuarios tienen la suerte de disfrutar. Grandes niveles de overclocking, capacidad grafica de ensueño y conectividad sorprendente tanto para periféricos como para almacenamiento. Para nuestras pruebas hemos usado componentes Kingston que hemos aprovechado para nuestros análisis del sistema RST de Intel, el que permite combinar un disco SSD y un disco mecánico para lograr un sistema hibrido de notables resultados y memoria Kingston de alta frecuencia que ha sido especialmente testada para esta placa base.
Análisis y Conclusión
Análisis y Conclusión. No se puede decir más de una placa que lo tiene todo. Está bien hecha, es muy completa y hasta es bonito ese PCB negro brillante. Es una placa con un público muy concreto que sabe apreciar excentricidades como su sistema de alimentación o que tenga disponibles 10 puertos USB 3.0 de serie. Excentricidades que es precisamente el salto desde una gama media o media-alta a productos excepcionales como es el caso de la Z68X-UD7 de Gigabyte.
Solo puedo ponerle un par de pegas, por un lado el precio, que ya me gustaría a mi que fuera más asequible y por otro lado se echa en falta un modo mas accesible de resetear la bios, sin tener que manipular en la placa, aunque sus sistemas de corrección de errores cuando ajustamos mal algún parámetro de overclocking la verdad es que funcionan bastante bien. En resumen una placa base muy capacitada, que hereda las prestaciones de uno de las mejoras placas P67 del mercado introduciendo algunas de las mejoras que trae consigo el Z68. Por tanto una apuesta segura de Gigabyte para aquellos usuarios que quieran una de las mejores placas con este chipset.
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