El procesador es la pieza central de cualquier dispositivo, sea un ordenador de escritorio, portátil, e incluso un dispositivo móvil como una Tablet o smartphone tiene un procesador que puede rivalizar de tu a tu con algunos ordenadores tal y como los hemos conocido durante años. Los mayores fabricantes de procesadores son Intel y AMD, cada uno de ellos con sus armas listas para intentar dominar los mercados de escritorio y servidores, mientras que Qualcomm, Mediatek, Huawei y Samsung son los principales fabricantes que podemos encontrar en cualquier dispositivo móvil existente hoy en día.
A nivel de escritorio, Intel compite contra AMD en una carrera que se puso más que interesante en 2017 con la llegada de los procesadores Ryzen de AMD con arquitectura Zen, y que para 2019 prometen una lucha de tú a tú en todos los mercados en los que compite con Intel gracias a Zen 2. Por su parte, Intel ha recurrido a la misma técnica que AMD usó en su día con los FX y ha aumentado al doble el número de núcleos en su gama escritorio con la aparición de los Intel Core i9, marca que se originó primero en el sector HEDT. Su baza para competir con los procesadores AMD Ryzen de tercera generación, que llegarán con hasta 16 núcleos, será un silicio denominado Comet Lake, que llegará con hasta 10 núcleos y las ventajas en rendimiento mono núcleo que a día de hoy parecen seguir disfrutando en Intel, aunque cada vez por menor margen.
Especial mención a las nuevas tecnologías que llegan en materia de fabricación, pues si bien AMD compensa la desventaja de rendimiento mono núcleo que ha tenido hasta ahora introduciendo un número mayor de núcleos, como fue en su momento el caso de los procesadores AMD FX que sin ser malos, no dieron el resultado esperado, no es el caso con los procesadores AMD Ryzen con arquitectura Zen en los que su diseño mediante CCX separados y la interconexión Infinity Fabric ha conseguido aumentar de forma reseñable el número de núcleos que podemos tener en la gama doméstica y competir a la vez de forma muy cercana a Intel. Asimismo, el diseño mediante chiplets que llegará con Zen 2 no hace más que mejorar dicha idea, así como Intel ha optado por Foveros para su tecnología de chiplets apilados en vertical, por lo que el futuro de la fabricación de procesadores pasa por dicha tecnología de fabricación.
Los procesos de fabricación de dichos procesadores son otro mundo a parte, pues si bien AMD no parece tener mayores problemas con TSMC y la arquitectura Zen 2 llegará con una litografía de 7 nanómetros, Intel sigue atascada con la mayoría de su oferta a 14 nanómetros, mientras que los procesadores a 10 nanómetros lentamente empiezan a salir a la superficie junto a la arquitectura Ice Lake tras algunos retrasos. De todos modos, estos dos rivales tienen diferencias fundamentales en cuanto a la fabricación de sus procesadores, pues Intel se encarga del desarrollo de sus arquitecturas así como de la fabricación de los chips usando sus propias tecnologías, mientras que AMD ha delegado toda su producción a 7 nanómetros a TSMC, empresa que tiene previsto comenzar a fabricar chips a 5 nanómetros a mediados de este año. Del mismo modo, los chips móviles de Qualcomm y Mediatek, por mencionar algunos, también han tomado la misma ruta, mientras que Samsung prefiere seguir los pasos de Intel y fabricar sus propios chips.